El Whatsapp se ha convertido en una herramienta cotidiana para todos, nos mejora la comunicación pero también tiene sus peligros, veamos 10 razones por las que creo que empeora tu vida.
CASI NADIE TE LLAMA
¿Te acuerdas cuando era tu cumpleaños y te pasabas todo el día al teléfono?. Ahora ya no, basta con un Whatsapp y eso es toda la atención que recibes el día de tu cumpleaños un buen día para hablar con los que quieres
PÉRDIDA DE TIEMPO
¿Cuántas horas al día pasas enganchado al WhatsApp? ¿En que invertías ese tiempo hace unos años? Si la respuesta no es 'hablar por MSN messenger' entonces hacías cosas mucho más productivas con tu tiempo libre. No sólo las aplicaciones de mensajería instantánea. Si sumas a esto las redes sociales, seguro que son varias horas al día improductivas.
PÉRDIDA DE VIDA
Unido a lo anterior. La vida 2.0 nos ha restado mucho de realidad e improvisación. De poder pasar tiempo con gente conocida. Tendemos a encerrarnos en nuestros perfiles digitales y a relacionarnos cada vez menos. En ocasiones es mucho más fructífero tomar un café con alguien que varias horas de conversación vía chat. Y mucho más divertido.
PÉRDIDA DE CONCENTRACIÓN
Herramientas como WhatsApp hace que perdamos concentración ya que pueden llegarnos notificaciones durante las 24 horas del día. Por lo tanto seremos menos productivos tanto en el trabajo como en los estudios. Seguramente las horas perdidas en WhatsApp se habrán traducido en suspensos de miles de estudiantes.
LOS DICHOSOS GRUPOS
Poco se puede decir que no esté dicho. Tenemos que empezar a aceptar como costumbre que salir de un grupo de WhatsApp no es una señal de mala educación, es una señal de querer mantener la salud mental. Algunos grupos cuentan sus mensajes diarios por miles. Unido a los memes, fotos y montajes.
PRIVACIDAD
Facebook es una base de datos grandiosa. Tiene millones de usuarios. Con la compra de WhatsApp, los datos que puede manejar la compañía son inimaginables. La falta de privacidad de esta herramienta es una de las principales desventajas con otras aplicaciones similares como Telegram. Unido a lo sencillo que puede resultar suplantar la personalidad de otra persona. Algo bastante más complicado en otras herramientas.
CONVERSACIÓN INTRASCENDENTE
Si hubiera que pagar por mensaje enviado... Analiza tus conversaciones recientes de WhatsApp y piensa cuales son de verdadero interés. Hablar durante horas vía chat no quiere decir que conozcamos mejor a una persona. Muchas veces lo hacemos por inercia cayendo en conversaciones de besugo. Al menos en un bar serían más divertidas.
LLENA TU MÓVIL DE BASURA
WhatsApp consume batería, datos, capacidad de memoria del móvil sin que tú te des ni cuenta. Todos los días nos llegan fotos, vídeos, tonterías que hemos visto mil veces y que aún así descargamos. Conseguimos que nuestro móvil, y en muchos casos nuestra cuenta de Dropbox o similares, se llene de cosas que ni queremos ni necesitamos
CASI NADIE TE LLAMA
¿Te acuerdas cuando era tu cumpleaños y te pasabas todo el día al teléfono?. Ahora ya no, basta con un Whatsapp y eso es toda la atención que recibes el día de tu cumpleaños un buen día para hablar con los que quieres
PÉRDIDA DE TIEMPO
¿Cuántas horas al día pasas enganchado al WhatsApp? ¿En que invertías ese tiempo hace unos años? Si la respuesta no es 'hablar por MSN messenger' entonces hacías cosas mucho más productivas con tu tiempo libre. No sólo las aplicaciones de mensajería instantánea. Si sumas a esto las redes sociales, seguro que son varias horas al día improductivas.
PÉRDIDA DE VIDA
Unido a lo anterior. La vida 2.0 nos ha restado mucho de realidad e improvisación. De poder pasar tiempo con gente conocida. Tendemos a encerrarnos en nuestros perfiles digitales y a relacionarnos cada vez menos. En ocasiones es mucho más fructífero tomar un café con alguien que varias horas de conversación vía chat. Y mucho más divertido.
PÉRDIDA DE CONCENTRACIÓN
Herramientas como WhatsApp hace que perdamos concentración ya que pueden llegarnos notificaciones durante las 24 horas del día. Por lo tanto seremos menos productivos tanto en el trabajo como en los estudios. Seguramente las horas perdidas en WhatsApp se habrán traducido en suspensos de miles de estudiantes.
LOS DICHOSOS GRUPOS
Poco se puede decir que no esté dicho. Tenemos que empezar a aceptar como costumbre que salir de un grupo de WhatsApp no es una señal de mala educación, es una señal de querer mantener la salud mental. Algunos grupos cuentan sus mensajes diarios por miles. Unido a los memes, fotos y montajes.
PRIVACIDAD
Facebook es una base de datos grandiosa. Tiene millones de usuarios. Con la compra de WhatsApp, los datos que puede manejar la compañía son inimaginables. La falta de privacidad de esta herramienta es una de las principales desventajas con otras aplicaciones similares como Telegram. Unido a lo sencillo que puede resultar suplantar la personalidad de otra persona. Algo bastante más complicado en otras herramientas.
CONVERSACIÓN INTRASCENDENTE
Si hubiera que pagar por mensaje enviado... Analiza tus conversaciones recientes de WhatsApp y piensa cuales son de verdadero interés. Hablar durante horas vía chat no quiere decir que conozcamos mejor a una persona. Muchas veces lo hacemos por inercia cayendo en conversaciones de besugo. Al menos en un bar serían más divertidas.
LLENA TU MÓVIL DE BASURA
WhatsApp consume batería, datos, capacidad de memoria del móvil sin que tú te des ni cuenta. Todos los días nos llegan fotos, vídeos, tonterías que hemos visto mil veces y que aún así descargamos. Conseguimos que nuestro móvil, y en muchos casos nuestra cuenta de Dropbox o similares, se llene de cosas que ni queremos ni necesitamos