TOKIO. AFP. El nuevo primer ministro japonés, Naoto Kan, alertó ayer sobre el "riesgo de derrumbe" que sufre la economía del país a causa de su gigantesca deuda, la mayor del mundo industrializado, y abogó por una amplia reforma fiscal.
"Nuestras finanzas públicas son las peores entre los países desarrollados. Es difícil seguir llevando adelante políticas presupuestarias que dependen mayormente de la emisión de bonos del Tesoro", advirtió Kan en su primer discurso de política general ante el Parlamento.
Según él, si el país sigue "emitiendo nuevas obligaciones al nivel actual, la deuda superará el 200% del Producto Interior Bruto de aquí a unos años".
Japón tiene una deuda pública de alrededor del 200% de su PIB, la peor proporción de los países industrializados. Para cubrir su presupuesto 2009-2010 tuvo que emitir obligaciones por un monto superior al de sus ingresos fiscales, por primera vez desde 1946. Más del 93% de los acreedores del Estado nipón son instituciones financieras, empresas y particulares locales, lo que a priori reduce el peligro de quiebra del país.
¿Pero esto es sostenible eternamente?... Parece que no
Moody's advierte sobre deuda de Japón, insta a reforma fiscal
09 de Febrero de 2011 • 08:18hs
TOKIO (Reuters) - La agencia calificadora Moody's Investors Service advirtió el miércoles que el eventual fracaso de una reforma fiscal en Japón impactaría negativamente sobre su nota crediticia, lo que aumentó la presión para que el Gobierno presente un plan creíble para reducir la deuda pública.
La advertencia se conoce luego de que Standard & Poor's bajara su calificación de la deuda japonesa el mes pasado, su primera reducción en nueve años, que dejó al país bajo la mirada atenta del mercado por su estrechez financiera.
Moody's Investors Service ratificó el miércoles su calificación para Japón en Aa2 con un panorama estable, lo que según la agencia implica que hay una muy baja probabilidad de suspensión de pagos de los compromisos.
Pero Tom Byrne, vicepresidente y directivo de crédito con responsabilidad regional de Moody's, dijo a Reuters que Japón podría no lograr su meta de equilibrar el presupuesto primario sólo con crecimiento económico, sino que es necesaria hacer una reforma fiscal.
También el panorama político, que bloquea los cambios requeridos por la economía, aportaría a la visión negativa de la agencia a la hora de evaluar la situación financiera del país, dijo.
"Hay un fusible importante antes de que los problemas fiscales de Japón estallen en una crisis, pero el Gobierno finalmente va a tener que tomar medidas para reducir su déficit", señaló Byrne.
El mes pasado, Standard & Poor's recortó la calificación de Japón en un escalón a "AA-", tres niveles por debajo del mayor grado posible, diciendo que Tokio no tenía un plan coherente para hacer frente a su deuda creciente.
La rebaja de la calificación crediticia aplicada por S&P a Japón la dejó un escalón por debajo de la nota de Moody's, pero en el mismo nivel que Fitch.
DURA BATALLA
Byrne dijo a un medio de prensa que Moody's espera que el Gobierno presente sus planes de reforma impositiva y del sistema de salud a fines de abril y que la hoja de ruta del programa esté lista en junio.
Cualquier retraso en la implementación de las reformas presupuestarias podría conducir a una reducción en la calificación, o implicaría dar un paso hacia una evaluación de panorama negativo, añadió el ejecutivo.
S&P fue más pesimista y justificó su baja de la nota en que ve una baja probabilidad de que los cambios puedan eventualmente reducir la deuda.
Sin embargo, hay numerosos factores a favor de Japón, que explican la aún débil reacción de los mercados a las advertencias: la mayor parte de su deuda está en manos locales, su sólida posición en los pagos internacionales, la profundidad de su mercado interno y la alta tasa de ahorro interna.
Pero los economistas y las agencias calificadoras señalan que Japón no tendrá otra opción más que reducir su deuda, que duplica el tamaño de su economía de 5 billones de dólares, y que marca la peor relación deuda-PIB entre las naciones industrializadas.
"No sé si Moody's reducirá o no su calificación. Pero hay suficientes razones para hacerlo porque la situación fiscal de Japón se deteriora cada año", dijo Chotaro Morita, jefe del área de investigación de renta fija japonesa de Barclays Capital en Tokio.
Japón no está solo bajo la mirada atenta de los mercados por el estado de sus finanzas públicas. Los miembros de la zona euro Irlanda y Grecia tienen una relación de deuda sobre Producto Interno Bruto superior al 100 por ciento. España, Portugal, Estados Unidos y Gran Bretaña no están muy detrás.