Las entidades financieras españolas endurecieron ligeramente los criterios de concesión de créditos para adquisición de vivienda a las familias y empresas en el tercer trimestre del año, al tiempo que se lo pusieron un poco más fácil a la hora de concederles financiación para el consumo.
Este es uno de los datos más relevantes de la Encuesta sobre Préstamos Bancarios en España relativa al tercer trimestre de 2006, que publica hoy el Banco de España, que añade que esto parece demostrar el interés de bancos y cajas por incentivar la financiación al consumo como alternativa a la hipotecaria.
En cuanto al presente trimestre, el Banco de España cree que las entidades españolas y europeas continuarán relajando los criterios para la concesión de financiación al consumo y que la demanda de estos préstamos seguirá creciendo.
Por el contrario, explica la entidad supervisora, la demanda de préstamos para adquisición de vivienda continuó desacelerándose entre julio y septiembre, algo que espera que siga ocurriendo este trimestre que aún no ha terminado.
En cuanto a la oferta de financiación hipotecaria para los hogares, el Banco de España observa una ligera contracción frente a los aumentos de los dos trimestres anteriores, lo que podría obedecer al deterioro de las expectativas sobre el mercado inmobiliario por parte de las entidades financieras.
Sin embargo, al tiempo que las entidades se lo ponían más difícil a sus clientes a la hora de concederles créditos hipotecarios, las condiciones de los nuevos créditos que sí se otorgaban eran más flexibles, como por ejemplo los plazos de devolución.