Ayer hablamos sobre las 5 burbujas de ámbito financiero que estamos padeciendo. Las burbujas no se producen porque sí, tras ellas está el comportamiento de unos cegados inversores (o simplemente, ciudadanos), ha habido muchas tendencias en las últimas décadas a las se que puede denominar fácilmente como burbujas. A continuación, hacemos referencia a 5 burbujas socioeconómicas que siguen creciendo:
5 burbujas socioeconómicas
1. Crecimiento: se puede argumentar que el crecimiento en sí mismo se ha convertido en una burbuja. A lo largo de los últimos 30 años, los gobiernos parecen estar dispuestos a hacer lo que sea para evitar una ralentización del crecimiento. Pero éste, sin control, puede convertirse en algo cancerígeno. El crecimiento sostenible tiene que ser equilibrado. No podemos tener más, más y más sin consecuencias. Tanto si se habla de biología como de economía, el equilibrio entre la capacidad de recursos y su utilización es primordial. Las células que crecen sin control minan los recursos del organismo, y acaban con él finalmente. Lo mismo ocurre con los recursos económicos.
Si gastamos todos nuestros recursos para sostener el crecimiento, este, y la economía en sí misma, se estancarán y acabarán muriendo. El concepto parece tan simple, y aún no hemos sido capaces de entenderlo. Nosotros, los ciudadanos, seguimos apoyando políticas cancerígenas que promueven el crecimiento a cualquier precio. Estamos dispuestos a asumir cuantías de deuda sin precedentes para ayudar a las empresas en quiebra. Agotaremos nuestras líneas de crédito para tener lo último, lo más grande y lo mejor. Nos preocuparemos de pagarlo más tarde. Es un ejemplo perfecto de cómo una burbuja alimenta a otra.
2. Consumo: nuestro deseo insaciable ha alimentado las burbujas de crecimiento y endeudamiento. La casa de 90 metros cuadrados en la que crecimos no es lo suficientemente buena para nuestros hijos. Necesitamos una más grande. Los aparatos del año pasado ya no están de moda. Necesitamos otros nuevos. Nuestra antigua televisión sigue funcionando perfectamente, pero necesitamos tener un nuevo modelo de pantalla gigante de alta definición y cientos de canales.
Aunque todo este consumo inflacionario ha conducido al crecimiento económico, debemos recordar cuál es la base de estas compras: una enorme deuda. Que puede continuar… hasta que no pueda ir más allá. Como comenta Charles Hugh Smith en su artículo Oversupply of Old Failed Ideas, Undersupply of New Pragmatic Ideas (Exceso de viejas ideas fallidas, escasez de ideas nuevas pragmáticas):
«Más allá de un nivel modesto, el consumo es el clásico ejemplo de rendimiento decreciente: seguimos gastando más pero disfrutándolo menos. Al final, el hastío, la alienación y el agotamiento reemplazan al placer.»
Si insistimos en crecer a cualquier precio, tendremos que prepararnos para asumir el coste que supone. Pero parece que la mayoría de nosotros queremos el crecimiento sin el coste que supone. No es solo imposible, sino indeseable.
3. Complejidad: ¿Soy yo o todo es más complicado de lo que solía serlo? Pedir una taza llena de café es aburrido. Nuestros coches están tan informatizados que el mecánico de toda la vida ya no puede arreglarlo. Nuestros sistemas financiero, fiscal y legal están formados por una red de información tan compleja que el ciudadano medio no tiene ni el tiempo ni la experiencia para desentrañarla.
Quizás es por eso por lo que no existe una regulación sólida o transparente en el mercado de derivados de 600 billones de dólares. Quizás nadie en una posición de poder ni siquiera entienda la estructura e implicaciones de estas bombas de relojería. ¿Es una coincidencia que las únicas personas que las entienden del todo son las que están obteniendo enormes cantidades de dinero de ellas mientras los contribuyentes pagan la factura cuando estallan? Si ese es el caso, quizás no deberían existir, al menos no hasta que sepan cómo evitar que destruyan nuestra economía o hasta que los que actúan en esos mercados estén preparados para asumir los riesgos asociados a ellas.
The Paradox Of Choice (la paradoja de la elección) es un libro de Barry Schwartz, que postula que más es menos. Demasiada complejidad y elección en exceso no conduce a una mayor satisfacción. Por el contrario, puede dificultar nuestra capacidad para adoptar decisiones efectivas.
4. Complacencia: parece que también tenemos la burbuja de la complacencia en nuestras manos, y que ésta alimenta a las demás burbujas a su vez. En 2006 muchos expertos nos dijeron que estaba bien que los precios de las viviendas se hubieran disparado porque las estadísticas apoyaban la subida de los precios, etc., etc.. Podremos ver una corrección, pero no se veía crisis en las cartas. Les creímos. Fuimos complacientes. Después de todo, nada malo había pasado todavía, ¿no? De nuevo, siguió hasta que no pudo continuar.
Ahora mismo, estamos oyendo el mismo silencio de los expertos, que nos dicen que no nos preocupemos de las masivas y (crecientes) acumulaciones de deuda en las cuentas de los países y de los consumidores de todo el mundo. No os preocupéis. Buscaremos una solución, dicen. Todo lo que tenemos que hacer es pedir prestado unos billones más para ayudar a los consumidores a comprar otra casa, otro coche, otro aparato que no necesitan y volveremos a funcionar. ¿De verdad?
Me alegraría si ya hubiéramos pedido prestado todo lo que se podía para consumir y crecer para generaciones futuras, y que éstas tardasen un poco en pagar la cuenta por nuestro despilfarro. Me pregunto cuándo estallará la burbuja de la complacencia. No estoy seguro, pero creo que probablemente ocurra al mismo tiempo que las otras 9 burbujas que indicamos aquí que iban a empezar a estallar. Quién sabe. Tal vez yo no tenga fundamentos en este sentido. Después de todo, aún no ha ocurrido, ¿no?
5. Narcisismo: con frecuencia me he preguntado si mi percepción acerca de que la gente es un poco más interesada de lo que solía serlo, solo tenía que ver con que hacía mayor y cada vez más malhumorado. Desafortunadamente, estudios recientes han demostrado que la gente, de hecho, es cada vez más narcisista. Un libro nuevo titulado The Narcissism Epidemic: Living in the Age of Entitlement (La epidemia del narcisismo: viviendo en la era de los derechos) detalla la investigación que muestra que también tenemos una burbuja narcisista.
Así parece que somos una sociedad adicta al consumo y al crecimiento. Pero somos demasiado complacientes para hacer algo al respecto porque es demasiado complicado para nosotros y de todos modos no nos preocupa, ya que no nos ha afectado personalmente, aún.
PD: Si el artículo de hoy te ha parecido especialmente bueno, es porque estoy de vacaciones y se trata de una traducción de este.
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Ver comentarios
Muy buen articulo Carlos.
El ritmo actual de consumo de energía y recursos naturales no es sostenible para un mundo finito, lo mismo sucede en la economía: es muy insensato pretender generar mas y mas riqueza, cuando recursos y energía son limitados fisicamente.
Porqué todavia hay gente que lo niega?
Simplemente por intereses personales (por cierto, muy egoistas) los que lo niegan es por que tienen unos privilegios que desean conservar a toda costa, de todos modos, el dia que la maltrecha Naturaleza diga basta, ellos no estaran, por lo que "carpe diem"
La mayoría mientras tanto, estaremos entretenidos con el futbol o sálvame...
XD
"3. Complejidad: ¿Soy yo o todo es más complicado de lo que solía serlo?"
En efecto, ¿cuánto cuesta elegir la mejor oferta de un servicio, como la telefonía móvil, para obtener el mejor rendimiento a lo que gastamos en él?. Entre las tarifas, con sus franjas horarias y semanales, las promociones, descuentos varios, puntos y sorteos es muy complicado hacer comparativas y planificaciones de gasto.
Y si no teníamos poco con la complejidad en las ofertas de telefonía, internet, banca, electricidad, gas, etc., a partir del año que viene empieza la liberalización del mercado postal, ¿veremos los sellos con descuentos? ¿podremos enviar una postal gratis por cada 5 cartas?
Yo tambien me quedo con lo de la complejidad.
Particularmente creo que el mejor anuncio DE LA HISTORIA de la televisión lo ha sacado Carrefour. Si, ese anuncio que parece cutre donde una señora le pregunta a un reponedor si "esas son unas galletas que le haran sacar todas las mañanas al perro que no tiene ... Solo son galletas"
Parece mentira que sea un anuncio el que tenga que anunciar que todo ese valor añadido es una patraña y de lo impactante del anuncio y lo inteligente en las forma es lo que lo convierte en una verdadera joya.
Ya es hora de poner los pies en el suelo.
Hola.
El artículo de hoy es interesante. Sin embargo, en cuanto a la complejidad, yo no estoy de acuerdo en que "más es menos". La complejidad es el precio que hay que pagar si queremos ser libres, o tener libertad. Yo estoy dispuesto a pagarlo. De lo contrario, la vida sería más simple, si, pero no podríamos elegir porque alguien o algunos elegirían por los demás.
Por otra parte, en cuanto a crecimiento y consumo, estoy de acuerdo.
Nunca olvidaré mi primera clase de contabilidad donde el "profe" comenzó diciendo:
"Los recursos son ilimitados".
Espero que ese axioma haya desaparecido (o puede ser el profe fuera un cenutrio).
Salu2.
No es nada complicado el mundo solo mira:
Los juicios de hipotecas swap donde los jueces han determinado que eran demasiado complicadas para gente normal.
Los nuevos alfa romeos con adaptador de iPod que no estan preparados para MPG y cuando pones un MPG se bloquea la radio. (200€ cuesta desbloquearlo)
Windows 7 y sus siete "mis documentos" donde esta interrelacionado y si guardas en uno de llos puedes verlo en otros 5 mientras en otros 2 no porque has entrado con doble click en ver con boton derecho y explorar capetas.
Hasta que al final hagan como paso con el BMW serie 7 del 2005 con 700 funciones y la gente no se enteraba ni de como se ponia la radio, tuvieron que sacar otro como menos cosas porque la gente no se enteraba.
No es nada complicado el mundo solo mira:
Los juicios de hipotecas swap donde los jueces han determinado que eran demasiado complicadas para gente normal.
Los nuevos alfa romeos con adaptador de iPod que no estan preparados para MPG y cuando pones un MPG se bloquea la radio. (200€ cuesta desbloquearlo)
Windows 7 y sus siete "mis documentos" donde esta interrelacionado y si guardas en uno de llos puedes verlo en otros 5 mientras en otros 2 no porque has entrado con doble click en ver con boton derecho y explorar capetas.
Hasta que al final hagan como paso con el BMW serie 7 del 2005 con 700 funciones y la gente no se enteraba ni de como se ponia la radio, tubieron que sacar otro como menos cosas porque la gente no se enteraba.
Pues creo que es un buen artículo... muy buen artículo.....
Yo me quedo con la frase de Hugh.... después de unos años de medio-yuppie, estoy intentando encontrar la gracia de als cosas sencillas y asequibles (amistad, raíces, baños en el mar....) con buenos resultados...
Buenos días,
Estoy conforme con el artículo de hoy. Antiguamente, una lavadora (por ejemplo), duraba 20 años. Hoy en día durá 5 ó 6 años. ¿Por qué? Unos dirán porqué los materiales no son tan buenos como lo eran entonces y ya no se fabrican como antes. Aparte el fabricante gana 4 veces más en el mismo tiempo. Otros dirán que, conque ha salido un mejor modelo, la "birria" que tenemos (lo más adecuado cuando se compró), ya no sirve (pero, que en realidad, seguro que le queda mucha vida útil) y deciden cambiarla por otra con más tecnología, más carga o, simplemente, más bonita. Las personas ya no se conforman con una cosa que les sea útil. Ahora también quieren que esté a la moda perpetuamente, con lo que influye a comprarse el mismo artículo sólo por el hecho de estar a la moda.
En fin...
La burbuja de la complejidad-información existe, cada vez hay más opciones y más datos/información en la que basarse para decidir. Por supuesto es una elección personal que a partir de cierto punto no merece la pena buscar más información, y según Punset no está demostrado que las elecciones intuitivas no sean mejores que las supuestamente racionales.
En cuanto a la burbuja del crecimiento y la sostenibilidad, es obvio que los recursos naturales son finitos, pero tambien que no todo el crecimiento se basa en dichos recursos, cada vez más los nuevos crecimientos pueden venir ligados a servicios cuyo recurso principal sea la mano de obra, materiales reciclados, energías renovables etc.
En economía una burbuja se comporta igual que un cáncer en el cuerpo humano, crecimiento descontrolado y desordenado de determinados sectores de la economía, crecimiento al margen de las necesidades reales de la llamada economía real , el problema es cuando el cerebro( gobierno) no solo no para el tumor...si no sigue alimentándolo en perjuicio de los demás miembros del organismo...al final la debilidad del sistema será porque la burbuja absorba todos los recursos del sistema...y el metabolismo se colapsara y tendremos un bonito cadáver……económico
Saludos