En un momento de calentón llegué a calificar de “trileros” a los bancos de este país. Hay de todo en la viña del señor, está claro, pero malas uvas hay demasiadas. Ahora sale Greg Smith, ex-empleado de la firma, y escandaliza a la opinión pública con unas verdades que la gran mayoría debería haberse figurado.
Resumiendo la interesante misiva, Goldman Sachs ha abandonado sus fundamentos de trabajo, basados en:
Lo cual permite que un trabajador se sienta orgulloso y crea en lo que hace.
Para propiciar una dinámica de negocio que:
La verdad, no han inventado nada estos americanos. En los bancos patrios han orquestado una red de sucursales en los que se incentiva al director y demás bancarios a:
El cliente de la banca ha sido puesto en el último lugar de la cadena del negocio. No se si en los 143 años de este banco se han hecho bien las cosas en algún momento. Lo que tengo claro es que algo muy importante ha cambiado: la gente habla y escucha sobre lo que pasa en el interior del sistema financiero.
Internet, las redes sociales y la crisis financiera han despertado al ciudadano dormido: la cultura financiera es vital para cualquiera y, además, podemos comunicarnos con los demás clientes bancarios si algo no funciona. Y considero que estamos ante un cambio de paradigma que obligará a la banca a reinventarse y poner al cliente donde siempre debería haber estado: el primero.
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Las propuestas de la Comisión Nacional de la Energía (CNE) para reformar el sistema energético y atajar el déficit de tarifa del sector eléctrico parece que no han gustado a nadie; ni siquiera a su presidente, Alberto Lafuente. Tanto las principales asociaciones de renovables, las grandes eléctricas y su patronal, como algunas organizaciones de consumidores se han alzado en pie de guerra contra el regulador. El Ministerio de Industria también se apresuró a desmarcarse el mismo día de la publicación.
El informe, encargado por el secretario de Estado de Energía, Fernando Martí, a principios de febrero, aborda diversos puntos sensibles, pero evita pronunciarse sobre cuestiones polémicas, como una posible quita de deuda o la imposición de tasas a las energías nuclear e hidráulica. Entre las medidas planteadas figura el establecimiento de un impuesto sobre el gas natural y los carburantes para sufragar, en parte, el coste de las energías renovables y la cogeneración, y la supresión de las ayudas al carbón nacional.
Además, la CNE apuesta por frenar a la energía termosolar, revisando las primas que percibe y laminando la retribución en el tiempo. El regulador va más allá y dirige su mirada hacia el sector renovable en general. De este modo, pide que se mantenga la suspensión de las ayudas a estas tecnologías hasta 2016, para a partir de esa fecha acelerar la potencia que contempla el Plan de Energías Renovables; priorizando, sobre todo, la más madura y económica, la eólica terrestre.
Pero las tecnologías verdes no son las únicas que lloran. Las grandes eléctricas, que digirieron el informe del regulador con fuertes caídas bursátiles, alegan que las medidas planteadas no resuelven los desajustes del sector y denuncian que son las que están soportando la financiación de la deuda "como si fuesen banqueros". De aplicarse el plan anti déficit de la CNE, estas compañías ganarían menos por distribuir energía, ya que se rebajarían los costes de las actividades reguladas. Además, la comisión propone que ellas coloquen la deuda eléctrica, titulizada ahora por el FADE con la garantía del Estado.
Los consumidores tampoco salen bien parados. La subida del recibo de la luz es, para el regulador, una medida absolutamente necesaria y condición sine qua non para acabar con el quebradero de cabeza del déficit tarifario, que se produce porque los costes reconocidos del sistema superan los ingresos regulados, en una cifra acumulada que se estima en torno a 24.000 millones de euros. Para acabar con él, los peajes, que comprenden los costes regulados del sistema y que tienen un peso del 50 por 100 sobre la tarifa eléctrica, deberán subir en torno a un 3 por 100 hasta 2015.
Finalmente, la CNE plantea que el Estado asuma determinados costes, como las compensaciones por los sistemas eléctricos extrapeninsulares, que fueron incluidos en el pasado en el recibo de la luz, en un contexto de creciente demanda. Ante el cisma que han provocado las propuestas en el seno del sector energético, el ministro de Industria, José Manuel Soria, ha salido a la palestra rápidamente para recordar que el informe del regulador "no es vinculante", a la vez que no ocultó su malestar por su publicación, que esperaba fuera omitida hasta ser "debidamente evaluado".
Precisamente la próxima semana se celebra la subasta eléctrica entre comercializadoras de último recurso (Cesur), que sirve para fijar el coste correspondiente a la energía dentro de la tarifa. La puja se celebrará unos días después de que el Tribunal Supremo haya anulado la congelación del recibo de la luz en octubre y enero, por lo que la tarifa subirá con toda probabilidad en la próxima revisión trimestral, el 1 de abril. Soria alega que las subidas son "inevitables", pero asegura que en la ambiciosa reforma del sector energético que está preparando, habrá medidas para suavizar futuras subidas de la electricidad, con el objetivo de que el coste del déficit no recaiga sólo en los consumidores.
El polémico informe del CNE se ha conocido en pleno proceso de reestructuración de los organismos reguladores que, además de fusionarlos, devolverá potestades a los ministerios sectoriales, incluído Industria. Resta saber bajo que criterios abordará el equipo del ministro Soria el tan aplazado modelo energético sostenible que todos los partidos, comenzando por el PP, llevan años prometiendo en su propuesta electoral.
La €zona registra su mayor superávit de cuenta corriente desde 2007 http://dlvr.it/1L7tq1
La UE somete a consulta su propuesta de supervisión a la banca no regulada http://dlvr.it/1L76l2
Libertad, Igualdad, Fraternidad... La vieja trilogía no ha llegado aún al reino inexpugnable de las finanzas.
Así se explica, por ejemplo, que un directivo gane 300 veces más que sus empleados. O que un banquero cobre 19 millones de euros al año en plena crisis. O que la nueva generación de trabajadores no llegue siquiera a los 1.000 euros al mes.
España: la deuda pública bate récords http://dlvr.it/1KPthZ
El sector financiero español se asoma a los últimos días marcados en un calendario para que concreten sus planes de saneamientos, que vencen a finales de mes, y sus propuestas de integración o fusión, para las que aún quedaría margen hasta finales de mayo si no se condicionan al anterior cumplimiento. La reforma financiera del ministro de Economía, Luis de Guindos, ha logrado tapar agujeros en algunas partes (integración de Unnim en las manos del BBVA o Caja 3, en Ibercaja), pero también ha generado más controversia en aquellas entidades integradas casi a la fuerza y que han visto cómo sus costuras no soportan más el esfuerzo de una mayor dimensión, como es el caso de Bankia, la mayor de las fusiones hasta la fechal. Algunas entidades ultiman o esperan el movimiento preciso para presentar sus planes ante el Banco de España y otras, como Caixabank o el Santander, se quedan en el nuevo tablero financiero sin haber movido ficha, de momento. Eso sí, la partida se presume aún larga.
Rubalcaba apadrinó un programa de 740 millones para barcos de guerra antes de exigir recortes en Defensa http://www.elconfidencial.com/espana/2012/03/19/rubalcaba-apadrino-un-programa-de-740-millones-para-barcos-de-guerra-antes-de-exigir-recortes-en-defensa-94625/
¡Por fin una noticia buena en la prensa!
Descubierta una manera de combatir con éxito el cáncer de páncreas http://dlvr.it/1L3X83
USA está dando un paso tentativo para facilitar que las aerolíneas permitan a los pasajeros utilizar a bordo dispositivos electrónicos personales como tablets, lectores electrónicos y reproductores de música durante despegues y aterrizajes.
La Administración Federal de Aviación (FAA por sus siglas en inglés) dijo el lunes que está "explorando formas de reunir a todos los participantes involucrados" -incluidas aerolíneas, fabricantes de aviones, fabricantes de aparatos electrónicos, y sindicatos de auxiliares de vuelo- para discutir si existen formas prácticas para probar dispositivos para ver si es seguro que los pasajeros los utilicen durante fases críticas de vuelo.
Técnicamente, los reglamentos de la FAA ya permiten que cualquier línea aérea pruebe marcas y modelos específicos para determinar si éstos generan poder suficiente que pudiera interferir con instrumentos sensibles de la cabina de pilotos y otro equipo importante.
Pero pocas aerolíneas han realizado ese tipo de pruebas extensas debido a que existen muchísimos aparatos, y probarlos todos -o incluso muchos- no es práctico.
En lugar de ello, la posición ha sido acatar las reglas de la FAA requiriendo a los pasajeros que apaguen todos sus aparatos electrónicos mientras la altitud de la aeronave sea menor a 3.000 metros (10.000 pies).
Aún si se probara y aprobara un dispositivo para ser usado hoy, series posteriores del mismo artefacto podrían ser suficientemente diferentes que tendrían que ser probadas nuevamente. El iPad de Apple iPad actual, por ejemplo, no es el mismo que el iPad original desarrollado hace tres años.
"¿Puede cualquier dispositivo electrónico hacer esto? La respuesta es no. Todos los dispositivos no son creados iguales. Algunos tienen más energía que otros", dijo Kevin Hiatt, director de operaciones de la Fundación de Seguridad Aérea, de Alexandria, Virginia