El precio de la vivienda usada en España en este trimestre
# 81, Jorge76
30 de septiembre de 2013, a las 14:17Me alegra que saquéis este tema: ¿qué generación ha vivido/vive/vivirá mejor? Bien, a mí no me queda otra que compararme con mi referencia más cercana: mi padre, con el que me llevo 25 años (como podéis ver por mi nick, nací a mediados de los 70 en pleno baby-boom). Por otra parte, diría que ambos pertenecemos a la misma clase social de nuestro tiempo, así que yo creo que lo mejor es poder comparar edad a edad:
– 2 años: mi abuelo trabajaba duramente para alimentar a la familia, al igual que mi padre, pero nunca nos faltó de nada a ninguno de los dos. Por aspectos sociales y educacionales, posiblemente mi alimentación fue más equilibrada, además de contar con una sanidad bastante más avanzada. Gano yo por poco.
– 10 años: Puedo decir que he tenido más ropa, he comido más y mejor, disfrutado de una educación menos estricta. Además, había TV en color, hospitales mejores y juguetes más molones. Gano yo.
– 18 años: tanto mi padre como yo pudimos estudiar en la Universidad. Mi carrera universitaria tuvo, sin embargo, una mayor duración, aunque el tuvo que hacer la mili. Podía salir con los amigos y gastar algo más (comparativamente), aunque sin demasiadas concesiones, y permitirme algunos fines de semana en la playa o similares de vez en cuando. Gano yo por poco.
– 25 años: Mi padre es ya un hombre casado y con su primer hijo recién nacido. Las pasan muy canutas para llegar al final de mes, pero ya tiene una cierta independencia económica, su primer piso y su primer coche. Yo, básicamente, me he quedado anclado en los 18, previo paso a mi incorporación al mercado laboral, pero no me falta de nada realmente. Mmmm… ¿gano yo? Vivo posiblemente mejor, pero mi padre me acaba de sacar 7 años de ventaja de un plumazo.
– 32 años: Mi padre ya tiene dos hijos, un trabajo bastante estable y un sueldo medio, que le ha permitido hipotecarse por un piso de 140 m2 más o menos cerca del centro de una ciudad. Es cierto que no se permite ningún lujo, pero en breve podrá permitirse irse 15 días de vacaciones con sus dos hijos a algún apartamento en la playa. Yo acabo de casarme, tengo ya mi piso, que no es ni la mitad de grande que el suyo, de vez en cuando hago viajes al extranjero, o me voy de fin de semana (a fin de cuentas, no tengo hijos que me aten). Me he comprado hace poco también mi primer cochecito, aunque aún no soy fijo, soy mileurista y las perspectivas son, cuando menos, borrosas. En definitiva, mi padre ya me saca 80 m2 cuadrados de ventaja, tiene (comparativamente para la época), un coche mejor que yo, mantiene a dos hijos, que yo no puedo permitirme, y tiene unas perspectivas laborales muy superiores.
– 37 años (actual): mi padre ha afianzado su posición laboral, ya no vive con los mismos apuros y se permite salir más e incluso ir de vacaciones con los niños (ya no tan niños) a un hotel. Yo, tras cinco años de intenso trabajo y haberlo pasado realmente mal, he tenido la suerte de haberme hecho fijo en el trabajo, me han subido el sueldo (en comparación con el de precario, aunque en el año y medio en el que he disfrutado de él, me lo han bajado y congelado varias veces). Además, tengo 2000 euros en el banco. Mi coche tiene 8 años y mi piso cada vez vale menos.
– 45 años (futuro mío): mi padre se ha comprado un cochazo con el que no podré soñar nunca, y una casa en la playa. Además, ha añadido un tercer hijo a su cuenta particular. No sale tanto como yo, es verdad, pero lo que le podría costar más caro, lo tiene. Aún así, no es un forrado, sino que pertenece a un tipo medio de la emergente sociedad española. Tiene la vida solucionada y unos hijos que estudian en la universidad.(Ahora tendré que imaginar mi futuro). Hace cinco años tuve mi primer hijo, así que menos mal que conseguí el trabajo fijo, porque tengo más gastos, aparte de haber tenido que comprar un coche nuevo más grande. También tuve que irme a un piso más grande, alquilado, a la vez que he alquilado el mío. He podido ganar al fin 30 m2, y tengo un piso de 90. Lo de la casa en la playa, ni se me pasa por la cabeza, así que intento pegarme una escapadita de fin de semana o de verano de vez en cuando, para escapar de la rutina.
– 62 años (actual de mi padre): mi padre acaba de prejubilarse. Gana menos que antes, pero más que yo en la actualidad. Tiene un buen nivel de vida, sin excesos, pero muy bueno. Yo, con 62 años, sé que aún me queda mucho… ¿podré jubilarme algún día? He podido ahorrar por fin algo para poder mandar a mis dos hijos a la universidad.
– 82 años (futuro de ambos): a pesar de que las pensiones son insostenibles, mi padre ha vendido la casa de la playa a un nuevo rico ruso, con lo que se asegura pagar el asilo que ha contratado, y en el que las condiciones son bastante decentes. Yo acabo de morir de un infarto en mi puesto de trabajo… nunca pude heredar la casa de la playa…
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Ver comentarios
Enhorabuena, me ha encantado lo que has escrito
Estoy en total desacuerdo con el comentario del día. Es fácil hacerse la víctina, pero si el padre del comentarista pudo estudiar hace 37 años en la universidad, era de clase alta, no de clase media. Mi padre era camionero y mi madre ama de casa. Yo universitario y hablo varios idiomas, gracias al esfuerzo de mis padres. Jamás les podré estar lo suficicenteme agradecidos, con o sin crisis.
#2 Anónimo
Mi abuelo era minero y mi abuela ama de casa. Y aún así, hicieron mil sacrificios para que sus hijos estudiaran.
Lo que no vemos es el egoísmo intergeneracional y es que mi padre tenia un negocio vinculado a la construcción y lo que el no veía es que ese montón de dinero que ganaban lo hacia a costa de asfixiar a la siguiente generación.
Es que es muy duro pero nuestros padres han destruido nuestro futuro y nosotros estamos destruyendo el futuro de los nuestros hijos alguien cree que los niños de hoy día van a poder pagar el follón que han liado sus padre y sus abuelos que vamos a hacer meterles una carga fiscal del 60%.
Piensa que tu padre gano dinero pero el que gano fue el dinero que tu tienes metido en tu hipoteca y que su pensión sale de tu nomina junto con toda la parafernalia publica que no ha hecho mas que crecer los últimos 20 años y que la única forma de que la rueda siga girando es que tus hijos se endeuden por una barbaridad y tengan una carga fiscal de narices porque si no lo hacen el sistema se ira derrumbando lenta pero inexorablemente.
Tu relato se basa, fundamentalmente, en lo que uno tiene... pero qué te llevas al final de tu vida? no lo comparto... aunque coincido que como no hagamos algo, vamos a pasar una 'jubilación', si la tenemos, muy precaria...
Muy bueno. Has descrito de forma genérica la vida de mis padres y mis suegros. Se podría resumir diciendo que hasta cierta edad (la infancia y adolescencia), nuestra generación tuvo mejores comodidades. A partir de ahí...
Sólo baste decir, a modo de resumen: La generación de mis padres compró su casa y una 2ª vivienda (playa, urbanización, pueblo, etc.). La mía, con mucho esfuerzo, compró una casa (ni piensas en una 2ª vivienda cuando tienes 150.000 eur de hipoteca). Los nacidos en los '80 y '90 no pueden comprarse su 1ª casa.
Cuando mi padre se casó no tenía nada ahorrado ni en posesiones, tenía un trabajo fijo por el que ganaba un salario medio para la época, mi madre era ama de casa, y se fueron a vivir de alquiler. Transcurridos 10 años, habían tenido tres hijos, mi madre seguia sin trabajar fuera de casa, él no había mejorado de posición (lo hizo más adelante), pero en ese tiempo pudo comprar y terminar de pagar un piso de calidad media de 90m en un barrio nuevo (por aquel entonces) de Alcalá de Henares y un seat ritmo nuevo. Es cierto que la concepción de la vida de entonces era mucho más austera, ni viajábamos ni nos podíamos permitir caprichos.
Mi situación es que cuando me fui a vivir con mi novia teníamos ahorrado cada uno 18.000, hemos tenido dos hijos de 6 y 5 años, no me pude comprar un piso en alcalá de henares y me tuve que ir a un pueblo, me quedan por pagar 135000 que según mis cálculos podra ser dentro de unos 20 años. Y todo esto trabajando los dos fuera de casa todo el p. día. Lo único que tenemos en común es que tampoco viajamos ni nos podemos permitir ningún capricho. Mi opel corsa lo compré de 2ª mano. Es cierto que es mejor que el ritmo, si...