# 5, Fabricando
4 de junio de 2014, a las 8:05Esto mientras la gente tenga ganas de estar contándole su vida en tiempo real a un telefonillo o PC, porque me temo que esto de las redes es para hablar mucho y escuchar poco.
A mí es un tema que me preocupa desde hace relativamente poco. Mi socio me encasquetó un Galaxy S4…porque no puedes ir con una Blackberry de 8 años por ahí…y literalmente me acojo.né de la de cosas que he tenido que deshabilitar, y de las que no me he dado cuenta todavía.
Como ejemplo, el widget-podómetro, que parece diseñado para que el día que tengas un problema vengan los abogados de la mutua a decirte que es que no tenías hábitos saludables…la madre que los parió.
Aparte de que el Sr.Google me cargó la agenda de contactos por la cara…le habré dado permiso para tenerla seguramente, pero no sé ni dónde ni cuando…ya estoy deseando estar en disposición de pegarle fuego a todo e irme a plantar patatas tranquilamente, pañuelo con cuatro nudos incluido.
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Tu sí que sabes, fabricando, yo como pueda cambio la arquitectura por las olivas.
P.D. Muy pocos entenderán lo del pañuelo con cuatro nudos. Saludos a todos.
Para los que no lo entiendan:
Antiguamente el labrador que trabajaba encorvado contra la madre tierra de sol a sol si no tenía a mano sombrero, boina o similar, aprovechaba el pañuelo de tela (ahora se llevan clinex de usar y tirar) que solía llevar en el bolsillo para colocárselo en la cabeza para protegerse del justiciero sol. Se solían anudar sus cuatro puntas para darle mejor cabida en la cabeza y, si había, se solía mojar con agua para mejor protección.
¡Aquéllo era trabajar de verdad!