Sin embargo, como decía, la maquinaria judicial sigue su curso, ya que los jueces, a pesar de la aparente subordinación política a la que están sometidos, han salido respondones. Así, el irreductible juez Castro, que ha imputado a la Infanta a pesar de todos, y mira que ha sido rocambolesca la historia del fiscal que se metió a defensor, ha recibido ahora la encomienda de investigar la presunta financiación irregular del PP dentro del caso Palma Arena; lo que se une a la investigación por otro lado sobre el Presidente Bauzá acerca de la no concesión, presuntamente fraudulenta, de varias concesiones de farmacias, chocante, ya que precisamente ese es el negocio familiar del Presidente. Por otro lado, la juez Alaya, ha imputado recientemente a otras 34 personas en su investigación del caso ERE, y ya van 265, que a este paso va a tener que celebrarse el juicio en un estadio de futbol. Eso sí, no el del Barcelona, porque se mezclaría con otro de los casos del juez Ruz. Por cierto que este juez, incansable que parece, sigue adelante con el caso Bárcenas (por ahora en espera) y con la investigación de la financiación ilegal de la sede del PP, en la que la última noticia es la declaración de dos peritos que avalan la tesis de que las obras se pagaron con 1,71 millones de euros en dinero negro.
Pero la estrategia está clara, bombo y platillo para Errejones y Monederos, independientemente de si sus actuaciones constituyen delito o no, con el fin de minar al contrario. Alentar en lo posible la autodestrucción del PSOE y acallar los escándalos propios al tiempo que se ensalzan los logros. Porque parece ser que al final el panorama electoral que se va a plantear al ciudadano es el que éste tenga que escoger al menos malo, o al corrupto conocido, quizás en la esperanza de que como ya se ha enriquecido, quizás no robe más.
El caso es que el pobre elector va a tener que hilar muy fino para decidir su voto. Votar al partido que posiblemente más daño haya hecho al ciudadano, rescatando una banca con 100.000 millones de euros en ayudas directas, mientras era incapaz de mantener siquiera los presupuestos en educación, sanidad, o las prestaciones para las personas dependientes, o las ayudas para los desempleados; partidas todas ellas que no suponen en su conjunto ni la mitad del dinero inyectado a la banca. Y todo ello aderezado con continuos y sangrantes casos de corrupción. También puede votar al desenfrenado socialismo, bajo cuyo gobierno se gestó, explotó y se agravó la crisis sin que pudieran ni verlo venir. Al margen de que sus corruptelas no son menores. O bien hacerlo a alguna de las otras opciones más innovadoras, entre las que destaca la opción estrella del líder politólogo y cuyo programa político y económico no se sabe si da más miedo en algunos puntos que risa en otros, pero que se perfila como seria opción de voto de castigo al defender según qué posturas o posiciones que no por irrealizables dejan de ser la expresión de buena parte de la población, sobre todo de esa que siente que de sus costillas se ha pagado la crisis, que siguen estando al final de la cadena de decisiones y les queda un largo camino hasta conseguir un poco de dignidad económica y moral.
Lo que está claro que no nos conviene olvidar es que vivimos en un país saqueado en sus arcas públicas, en los derechos de sus ciudadanos y en las más elementales normas de la decencia. Según los técnicos de Hacienda, más del 70% de la evasión fiscal la practican las grandes empresas. El 94% de las sociedades del IBEX se alojan en paraísos fiscales, proporción que además va en aumento sin que nadie le ponga freno. Es más, el ministerio de Hacienda realizó una amnistía fiscal por la que los impuestos les salieron casi gratis a una cuadrilla de delincuentes que tuvieron a bien regularizar sus cuentas sin costo penal alguno.
La cuantía de lo robado de las arcas públicas en los múltiples casos de corrupción se ha cuantificado en 40.000 millones anuales. Hervé Falciani ha declarado que perdemos cada año en evasión fiscal el equivalente a la totalidad de la deuda. Y aún no salimos de una Gürtel cuando nos nace una Púnica, unos ERE o cualquier herencia en Andorra, y todos presuntamente inocentes, pagándose los mejores abogados y presuntamente insolventes. Y ni dios devuelve lo robado.
Y ahora votemos.
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Durante diciembre de 2014 se vendieron 43.901 viviendas según los datos del Consejo General del Notariado. Tras corregir la serie de las variaciones estacionales propias del mes se observa un crecimiento de las ventas del 2,2% respecto a las del mes anterior, que se traduce en un crecimiento trimestral del 3,4%. Con todo, en 2014 se cerraron 364.600 operaciones de compraventa, el 19,1% más que en 2013.
De acuerdo a Daniel Kahneman, premio Nobel de economía, “la suerte juega un papel importante en todas las historias de éxito”. Uno de los ejemplos que Kahneman utiliza es el de la supuesta “maldición” que se cierne sobre algunos deportistas, una vez que aparecen en la portada de revistas importantes o de videojuegos. En estos casos, es conocido que el año posterior, su rendimiento tiende a empeorar, probablemente porque parte de la atención que generaban no tenía que ver con su habilidad, sino con un poco de suerte. Lo mismo pasa con las contrataciones de los clubes de fútbol poco después de un mundial: una actuación puntualmente buena en un escaparate como ése ha supuesto contratos de cuantía significativa, para jugadores cuyo rendimiento después no ha estado a la altura.
En cierto sentido, la economía española había sufrido de “mala suerte”. En amagos de recuperación anteriores, la falta de instituciones adecuadas para hacer frente a los problemas en Europa, junto con políticas monetarias y fiscales poco coincidentes con la posición cíclica de la economía impidieron que se consolidara un crecimiento similar al que se había producido después de crisis anteriores. Sin embargo, existen diversos factores que parecen estarse alineando hacia delante en favor de la economía española y que probablemente lleven a que durante los próximos trimestres los economistas vayamos revisando al alza nuestras estimaciones de crecimiento para 2015.
Por un lado, en contra de lo que se esperaba, la actividad se ha mostrado bastante resistente a la falta de crecimiento sólido en el resto de la UEM, en parte gracias a la solidez de las exportaciones, impulsadas más que por el aumento de la demanda, por el crecimiento de la inversión en maquinaria y equipo y la ganancia de cuota de mercado. Afortunadamente, los primeros datos de 2015 señalizan que la actividad mejora en Europa y que estaríamos en el inicio de un proceso de moderada aceleración del crecimiento. De esta manera, si con la demanda estancada en nuestro principal socio comercial se ha podido aumentar la presencia en los mercados externos, esta tendencia se debería potenciar con una Europa en expansión.
Asimismo, por primera vez desde cuando menos 2010, tanto la política monetaria como la fiscal tendrán un sesgo más acorde con la posición cíclica de la economía. Respecto a la primera, las medidas tomadas por el Banco Central Europeo han sorprendido positivamente, y han tenido ya un impacto sobre el tipo de cambio del euro frente al dólar. Igualmente, la reducción de los tipos de interés libres de riesgo, junto con la restructuración y saneamiento por la que ha pasado una parte del sistema financiero español, impulsarán la competencia entre los proveedores de crédito, disminuyendo el coste de la financiación. Por último, la caída del precio del petróleo beneficiará a economías como la española, netamente importadoras, liberando renta a las familias y a las empresas, que será destinada para continuar el proceso de desapalancamiento y para incrementar la demanda por bienes y servicios. Por lo tanto, mientras que en el pasado una moneda fuerte, la fragmentación del sistema financiero europeo y los costes de transporte suponían déficits de competitividad frente al resto del mundo, durante los siguientes trimestres lo contrario debería ser verdad.
Respecto a la política fiscal, los esfuerzos que se hicieron durante los últimos años, permitirán ahora que sin implementar medidas adicionales, la recuperación sea suficiente para reducir el desequilibrio en las cuentas públicas, cuando menos para cumplir los objetivos a los que se ha comprometido el país.
En todo caso, vale la pena recordar, que como con los deportistas, cuando tenemos una muestra suficiente de su desempeño, el impacto de la suerte tiende a reducirse y la evolución de la economía se explica por la fortaleza de los fundamentales. Este año, por el momento, los vientos son de cola y hay que aprovecharlos. Sin embargo, no hay garantías de que esto permanezca ya que riesgos de distinta índole (geopolíticos, internos y externos) planean sobre el cielo de la economía española. Por lo tanto, este tiempo debería de servir para impulsar medidas que pudieran sostener el crecimiento en los niveles que ahora observamos una vez que el viento cambie de dirección.
Miguel Cardoso Lecourtois
El acuerdo Eurogrupo-Grecia queda en espera hasta la próxima reunión http://dlvr.it/8b1Yrf
No aclare que oscurece - Yanis Varoufakis asegura que habrá un "buen acuerdo" en 48 horas http://dlvr.it/8bCVP6
2014, el año que el sector inmobiliario tocó fondo. Tras seis años de ajuste, las compraventas de viviendas aumentaron un 2,2% respecto al año anterior (319.000 viviendas frente a 312.000). Por el lado de la oferta, el sector de la construcción también mostró cierta mejoría, tanto en términos de ocupación como de inversión. Las perspectivas para 2015 son favorables: el repunte de los visados de obra nueva, por ejemplo, con un crecimiento del 5,6% interanual en noviembre (acumulado de 12 meses), apunta a que la recuperación de la actividad irá ganando tracción. En este contexto, es de esperar que los precios dejen de caer y cierren el año con una tasa de crecimiento ligeramente positiva.
La evolución del precio del petróleo no da tregua al IPC. La inflación se redujo en enero hasta el -1,3%, tres décimas por debajo de la cifra de diciembre. Esta contracción se atribuye a la caída del precio del petróleo, que fue del 16% respecto al mes anterior. Así, la inflación subyacente, que excluye el componente energético y el de alimentos no elaborados, aumentó dos décimas con relación al registro de diciembre, hasta el 0,2%. En los próximos meses, la inflación subyacente seguirá la senda ascendente gracias a la mejora de la demanda interna y a la depreciación del euro. El IPC general, muy condicionado por la evolución del precio del petróleo, se mantendrá en terreno negativo durante todo el primer semestre del año, como mínimo.
¿Cómo identificar los buenos valores bursátiles? http://dlvr.it/8ZcZ2Z
AGENDA económica del día http://dlvr.it/8bCWyy
El problema es que seguimos con la sensacion de que las leyes y los castigos son demasiado leves con los corruptos y al final les merece la pena ser corrupto, exceptuando algunos casos ( como julian muñoz por ejemplo) los corruptos se van de rositas y a los pocos que condenan les caen 6 o 7 años y salen en libertad en 3 .
# 9, miguel
Y el tercer grado en uno.
Sí, las penas son ya de por sí benevolentes. Si además aplicas beneficios penitenciarios es la repanocha.
Abogo por un código penal duro, disuasorio, y un sistema penitenciario en el que solo de manera excepcional pueda obtenerse alguna ventaja.
Lo de la reinserción, en el caso de delitos leves (hurtos y cosas así) puede tener sentido. Pero en penas de chorizeo de lo público, o en delitos de extrema gravedad no se lo cree nadie. Y el chorizeo público debería llevar la inhabilitación de por vida.