La calificación de “AAA”, “supone la mayor calidad crediticia que ofrece a los inversores la mayor protección para el pago del capital y los respectivos intereses. Las beneficios de estos emisores se consideran estables, la estructura de la industria en la que opera la entidad es fuerte, y las perspectivas de rentabilidad futura es favorable. Por el contrario, las calificaciones de crédito “AA” son de una excelente solvencia y protección de los intereses y del principal [de pago] se considera alta y difieren de los bonos con calificación “AAA” sólo para un pequeño grado.
Como veremos a continuación en el gráfico del Banco de la Fed de St. Louis a partir de datos de Bank of America Merrill Lynch, la diferencia en los costes de los endeudamiento de ambos ratings (“AAA” frente a “AA”) puede ser bastante notable durante, en un mercado especialmente volátil. Para ilustrarlo, en el año 2011 durante la crisis de la deuda europea , los diferenciales en los costes entre el endeudamiento de los emisores de “AAA” y los emisores de “AA” alcanzaron un máximo de alrededor del 1%, mientras que hoy en día con una volatilidad baja, la diferencia está más cerca de 0,16%.
Si bien puede no parecer mucho un 1%, se puede hacer una diferencia sustancial si los nuevos préstamos son grandes. No es raro que los emisores de deuda para obtener grandes sumas de dinero. Por ejemplo la multinacional Apple, calificado como “AA +” y sin necesidad de endeudamiento debido a su exceso de tesorería ha emitido bonos por valor de 17.000 millones de dólares en 2013. Para Apple un 1% de diferencia en los costes de endeudamiento, sin embargo, habría sido el equivalente a 170 millones en costes anuales de endeudamiento, lo que es verdaderamente relevante. Si este coste lo proyectáramos en más de 10 años, la cantidad total de interés marginal sería 2.000 millones de dólares. Este es el dinero que se podría dedicar a la investigación y el desarrollo, CAPEX, recompra de acciones, dividendos, etc. Esto es sólo un ejemplo hipotético, pero ilustra la diferencia sustancial en los costes por intereses en diferentes momentos en el ciclo de mercado.
El rating de “AAA” está desapareciendo rápidamente del paisaje y pronto podría ser consignado al basurero de la historia, muestra de ello es esta gráfica que muestra el número de compañías americanas con esta nota.
Muchos emisores (especialmente estados) no ven el valor en conseguir la más alta calificación crediticia posible, a pesar de cierta evidencia de lo contrario. El mantenimiento de calificaciones de grado de inversión (por encima de “BBB-“) parece ser lo que es más importante en el mundo actual.
La Asociación de Usuarios de Bancos, Cajas y Seguros (Adicae) ha puesto el foco en…
El Euribor es el índice de referencia más utilizado en las hipotecas variables en Europa…
El mercado inmobiliario en España sigue mostrando una tendencia alcista, con el precio medio de…
La financiación de gastos a través de tarjetas de crédito se ha consolidado como la…
El bitcoin, la criptomoneda más reconocida del mundo, ha registrado un nuevo máximo histórico al…
Hola ¿Qué tal? Yo bien, gracias por preguntar. Bueno, realmente no preguntáis nunca y hoy…
Ver comentarios
Podemos-IU proponen una subida de los costes laborales al quitar el tope de cotización http://www.elespanol.com/economia/20160511/123987886_0.html …
Las bolsas presentan 3 síntomas previos a recesión http://www.invertia.com/noticias/articulo-final.asp?idNoticia=3123229&strGoo=bolsas-europeas-sobrevaloradas-presentan-sintomas-previos-recesion …
Posiblemente, una de las principales diferencias entre un político y un experto en economía es que el primero utiliza datos y el segundo maneja tendencias. Esto es así porque al político le interesa destacar el crecimiento del trimestre anterior o la mejora de la tasa de paro del último año; mientras que el experto contempla la evolución del crecimiento o del desempleo en los últimos cinco o, a veces, diez años, a fin de realizar comparaciones y establecer tendencias. Pero qué sucede si queremos ir más allá, mucho más allá, y realizar estimaciones y proyecciones en un plazo largo, verdaderamente largo? Un plazo que vaya mucho más lejos de lo que consideran habitualmente los expertos.
En los últimos años, uno de los informes sobre "los años venideros" que levantó más polvareda fue el elaborado por la Société Générale. Uno de sus gráficos fue recogido en un artículo de Piergiorno M. Sandri bajo el título "Seremos más viejos y más pobres" publicado en La Vanguardia el 17 de mayo de 2007 (gráfico 1).
Lo que hizo la entidad francesa es, mediante un modelo econométrico, proyectar el año 2050 el PIB per cápita del año 2005 correspondiente a una serie de países. Lo que resulta se muestra en el gráfico expresado en números índices tomando como base 100 el PIB per cápita de 2005.
Dejando de lado el más obvio porque ahora no interesa, que el país que más ve caer su PIB per cápita de los de la lista de países mostrada es España -un 22% -, lo que es verdaderamente decepcionante es que todos los países de la lista empeoran, unos menos: Suiza, Dinamarca; otros más: Alemania, Francia, y otros muchísimo: España e Italia, pero la verdad es que todas las economías estudiadas caen. Es decir, el resumen es simple: la tendencia marca que a lo largo del próximo medio siglo la economía empeorará.
Escenarios de la OCDE.
Más recientemente, la OCDE, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, entre los años 2012 y 2014 realizó tres estudios en los que trata del posible escenario en que pudiera encontrarse la economía mundial en los próximos cincuenta años . En los estudios, citados a continuación, vale la pena hacerles un vistazo.
-OECD (2012), Looking * to 2060: A global vision of long-term growth, OECD Economics Department Policy Notes, n. 15. Noviembre 2012.
-OECD (2014) Shifting gear: Policy challenges for the next 50 years, OECD Economics Department Policy Notes, n. 24. Julio 2014.
-OECD (2014) Trade patterns in the 2060 world economy, Jean Château, Lionel Foutagne, Jean Fouré, Asa Jojansson y Eduardo Olaberría, OECD Economics Department Working Paper, n. 1142. 1 de diciembre de 2014.
Estos documentos confirman lo que indicaba el estudio realizado por la Société Générale en 2007. A lo largo de sus páginas y en sus numerosos gráficos y cuadros estadísticos se repite el mismo mensaje: estancamiento y empeoramiento de la economía mundial.
En la ilustración de arriba figuran algunos gráficos extraídos del citado material de la OCDE.
El gráfico 2 muestra la evolución de la tasa de variación anual real del PIB como promedio de una muestra de 147 países. Lo que se deduce es desalentador: el resumen de lo que indica la evolución de la línea representativa del total mundial muestra una clara senda decreciente a partir de la mitad de la década actual. La pérdida es muy significativa comparando el punto final de la curva y el inicial. Una pérdida que, llegados a 2060, no presenta indicios de flexión. Es decir, decididamente, las expectativas económicas del planeta apuntan a peor.
Como puede observarse, la evolución de la economía del mundo viene determinada por el muy diferente comportamiento de dos grupos de países: los países miembros de la OCDE y el resto. Los primeros experimentan un estancamiento entre el momento actual y la mitad de la década siguiente e inician un declive relevante a partir de entonces, un declive que los sitúa en una posición ligeramente inferior en 2060 que al inicio del presente siglo, de tal manera que en términos económicos, medianas y en el conjunto de estos países, en el transcurso de estos sesenta años no habrán ganado nada en términos de evolución económica.
Pero donde el retroceso es brutal es en los países que no son miembros de la OCDE. En su conjunto la pérdida es enorme, de cuatro puntos, que es una exageración. Han ido cayendo desde el inicio de la década anterior ya partir de la actual el descenso se ralentiza muy ligeramente, pero finalizan este periodo de sesenta años con unas expectativas mucho peores que con las que lo empezaron, y, teniendo en cuenta las economías que integran este grupo, lo que puede deducirse del conjunto del gráfico, además de que tiende a producirse un empeoramiento generalizado, es que el planeta tiende a perpetuarse la escisión de los países que lo forman en dos grupos: aquellos que "irán haciendo", y los que "no tirarán en absoluto", con lo que las diferencias se agudizarán y la pobreza crecerá. Esto queda palpablemente reflejado en el gráfico 3, en el que se muestra por países la diferencia de ingresos totales antes de impuestos y transferencias entre el decil que los tiene más elevados y el que los tiene más bajos, en 2010, y la situación que se dará en 2060 según la estimación.
Como puede observarse, absolutamente en todos los países se produce un aumento de la desigualdad. En unos -Israel, Estados Unidos, Corea, Alemania- más que en otros -Nueva Zelanda, Noruega, Irlanda-. En España el incremento es relevante: de un punto.
El aumento de la distancia entre el grupo de rentas más altas y el de rentas más bajas indica que la desigualdad va a más, pero como hoy ya es elevada o muy elevada, si aumenta, al final de esta fase estudiada, el 2060, la desigualdad será enorme. Embargo, el aumento de la distancia entre los más ricos y los más pobres, viene a certificar la tendencia hacia una aún mayor concentración de la renta y de la riqueza a partir de una concentración del capital en unidades productivas de tamaño creciente y de expansión global, en el que un reducido número de personas generarán un creciente valor a partir de productividades en aumento. El resultado es el desplazamiento de la población hacia los extremos del espectro social y la progresiva disminución de la clase media.
Afiliados y pensiones.
Y España? ¿Qué se puede decir sobre la tendencia a muy largo plazo de su economía, de su sociedad? Son prácticamente inexistentes en España los estudios de estas características, pero el gráfico 4 aporta ideas al respecto. Muestra, proyectados hasta 2050, la evolución del número de afiliados a la Seguridad Social, el número de pensiones contributivas satisfechas por el sistema y el ratio entre afiliados para pensión, la denominada tasa de cobertura (FEDEA, Balance del sistema de pensiones y boom migratorio en España. Proyecciones del modelo MODPENS de FEDEA 2050. Javier Alonso Meseguer y José A. Herce. Documento de trabajo 2003-02. Julio 2003).
La tendencia de las tres curvas no puede ser más significativa. El número de afiliados inicia una línea decreciente a partir de 2020, que ya no se recupera, y termina en una posición menor que al inicio del periodo; evidentemente menos afiliados, en una atmósfera de salarios medios congelados o con alzas muy ligeras, implica una menor recaudación. Pero, a la vez que se produce esto, el número de pensiones que debe pagar el sistema crece de manera imparable desde el 2010 hasta el 2045 debido a la llegada a la edad de jubilación de los baby boomers y de sus descendientes. En consecuencia, es una obviedad que el ratio "afiliados por pensión pagada" caiga en picado desde casi 2,3 a 1,2, y haga totalmente insostenible el sistema.
(Obviamente también, mucho antes el sistema ya se habrá colapsado o habrá tenido que cambiar su filosofía y su funcionamiento. Hoy, casi a mediados de 2016, está comúnmente asumido que el actual sistema de pensiones es insostenible: en España desde hace dos años las pagas extras de los pensionistas están pagando recurriendo a la caja de reserva de la Seguridad Social, caja que, al ritmo actual, se agotará en dos años.)
Bien. El resumen del resumen de todo lo que se ha dicho de manera simple: tendencialmente, vamos a peor, el mundo va a peor. No es que tal persona o tal empresa, o tal localidad, tengan que ir a peor, de hecho habrá individuos, compañías y municipios que mejorarán, pero en su conjunto el planeta se desliza hacia un empeoramiento que afectará a unos mucho más que a otros.
Todo indica que este empeoramiento vendrá caracterizado por la caída de la importancia del factor trabajo en un entorno de exceso de población activa y por la disminución del papel unificador y igualador del Estado y la ganancia en importancia de las grandes corporaciones, lo que incidirá en el retroceso imparable de las políticas de protección social con su impacto redistributivo y la polarización social. Un escenario muy complicado de lo que ya se están empezando a ver las primeras manifestaciones
SNB
¿Quién está moviendo el petróleo? http://dlvr.it/LHPMdP
En EE.UU., el trauma de la crisis dejó cicatrices… http://dlvr.it/LHN2lP
El Complemento Salarial Garantizado (CSG) fue uno de los puntos de fricción más salientes durante las interminables negociaciones para formar gobierno. La medida es una idea salida del programa de Ciudadanos para ayudar a las familias trabajadoras con menos ingresos, y fue incluida en el acuerdo entre esa formación y el PSOE. Hablé sobre ella con cierto detalle antes de las elecciones, ya que es muy similar al EITC, un programa federal en Estados Unidos. Es una idea estupenda, enormemente redistributiva, que incentiva la incorporación al mercado laboral, reduce el trabajo en negro y es muy efectiva reduciendo la pobreza.
A la gente de Podemos, sin embargo, les pareció muy de derechas, diciendo que su alternativa, la Renta Garantizada (RG), era una idea mucho mejor. En el fondo, era una repetición de esa vieja costumbre de la izquierda española de hacer lo perfecto el enemigo de lo bueno; otra de las excusas del partido para forzar la repetición electoral. Aun así, han hecho a bien de incluir su propuesta en el acuerdo que han firmado con Izquierda Unida, dándome la oportunidad de compararla con el CSG.
La idea detrás de un CSG es bastante simple: dado que algunos trabajos no pagan lo suficiente, el estado complementa el salario con un crédito fiscal o ayuda directa para animarle a ir a trabajar. Un CSG normalmente está estructurado en tres tramos: un primer segmento donde el CSG crece a la vez que el salario, para crear un incentivo para trabajar más horas, un segundo tramo donde la ayuda permanece estable, y un tramo decreciente donde el CSG se difumina poco a poco. Uno puede hacer del sistema más o menos progresivo retocando las pendientes y techo de esta pirámide truncada, pero la idea central (ayudar a que los trabajadores con salarios bajos favoreciendo la participación laboral) es sencilla.
La RG de Podemos e IU es una cosa menos sutil: cualquier familia (perdón, unidad de convivencia; la palabra familia es pequeñoburguesa) que viva bajo el umbral de la pobreza tiene derecho a recibir 600 euros al mes. La cifra aumenta a 810 en hogares con dos miembros, y en un 20% por cada persona adicional hasta alcanzar un máximo de 1290 euros. Contando que un 22% de españoles vive bajo el umbral de la pobreza, es una medida realmente cara. Lo interesante, y digno de señalar, es cuándo y cómo sus receptores dejan de recibirla. Básicamente, porque ni el acuerdo reciente con IU ni el programa electoral para el 20-D lo explican con demasiado detalle.
Por lo que han comentado en notas y artículos de prensa, cuando alguien que está recibiendo la RG encuentra empleo, la prestación se iría retirando de forma gradual. Dado que el umbral de la pobreza en España son 663 euros al mes, esto quiere decir que alguien que esté recibiendo la RG verá una reducción de la ayuda cada vez que tenga un aumento de ingresos. Si empieza a trabajar a tiempo parcial, por ejemplo y gana 500 euros, la prestación debería disminuir supongo unos 300-400 euros, ya que el RG (supongo que) se “extingue” al llegar al nivel de pobreza. En el mejor de los casos, cada euro adicional de ingresos que un trabajador pobre reciba por trabajar más horas le reportará unos ingresos adicionales reales de 10 ó 20 céntimos, según se reduzca la RG. Es decir: a efectos prácticos, el tipo marginal real en su “impuesto sobre la renta” será de un 80 ó 90%.
El RG suena bien. Es un programa que da dinero a quien no lo tiene; ayuda a los pobres. Tiene buenas intenciones. En realidad, es un programa brutalmente torpe que impone los impuestos sobre las rentas del trabajo más altos a las familias por debajo del umbral de la pobreza. Es un benefit cliff atroz, de los que genera una trampa de dependencia casi inevitable a todos sus receptores. No soluciona la pobreza, sino que crea incentivos para perpetuarla. Como está escrito, es una idea horrible.
Lo más divertido de todo este asunto es que los responsables de Podemos esto lo saben, así que en su programa electoral también incluían un complemento salarial para suavizar la transición del RG a rentas por trabajo. El complemento, sin embargo, no aparece en el acuerdo final porque Izquierda Unida se opone a ello: dicen que es subvencionar trabajo basura. Han conseguido contagiar a Podemos con una de sus peores ideas, cosa que tiene cierto mérito.
La cosa va más allá. El acuerdo entre Ciudadanos y PSOE, además del CSG, incluía un ingreso mínimo vital con prestación con hijos a cargo que suena sospechosamente parecido a una RG. El pacto entre Sánchez y Rivera, irónicamente, está más cerca del programa electoral de Podemos para el 20-D que lo que ha firmado Iglesias con Alberto Garzón.
Después hablaran de programas.
Roger Senserrich
Sin acuerdo para reducir el gasto electoral. http://www.elmundo.es/espana/2016/05/11/57330dc9468aebd6068b45dd.html …
http://www.republica.com/sapere-aude/2016/05/11/tipos-de-interes-negativos-nos-cobraran-los-bancos-por-tener-depositos/
# 1, austriaco
Los topes de cotización favorecen sólo a los salarios más altos. Efectivamente, la eliminación de los topes supondría un aumento de los costes laborales, pero sólo para un muy reducido grupo de altos ejecutivos, y haría que las empresas se replanteasen un poco las excesivas diferencias salariales que hay actualmente.
Aparte de que es simplemente justo; si tienes un sueldo indecentemente alto, ¿por qué tienes que cotizar lo mismo que si tuvieras simplemente un sueldo alto? Si tu sueldo es de 10 millones, cotiza por 10 millones; si es de 500, cotiza por 500...
http://www.libremercado.com/2016-05-11/el-consejo-de-expertos-independientes-que-auditara-la-deuda-de-madrid-esta-lleno-de-podemitas-1276573802/