El nacimiento de la Clase E viene dado en el punto en el que las gestoras internacionales querían distribuir sus fondos de inversión en España. Sin embargo, al entrar en este país, se encontraron con el oligopolio bancario, que tiene un férreo control en la distribución de fondos, y éstos les solicitaron que crearán la Clase E con una mayor comisión de la cual serían beneficiarios. Por lo que, nos encontramos en un mercado de fondos de inversión en el que existen fondos de Clase A y fondos Clase E que son exactamente el mismo producto financiero, pero eso sí, con un mayor incremento en comisiones en la Clase E.
La distribución de este tipo de fondos de inversión está prohibida en diferentes países como pueden ser Reino Unido, Bélgica, Holanda por los diferentes reguladores bursátiles. No obstante, la CNMV no ha mostrado firmeza alguna en relación a este tipo de fondo de inversión.
Vayamos con un ejemplo para entenderlo mejor… En este caso analizaremos el fondo Invesco Asia Balanced Fund A-Acc Shares y el fondo Invesco Asia Balanced Fund E-Acc Shares. En ambos productos de inversión observamos que la distribución de activos es idéntica, Renta Variable (54,9%), Renta Fija (42,2%) y Liquidez (2,9%). Del mismo modo, no se aprecia diferencia alguna en las ponderaciones sectoriales o geográficas. Tampoco existe algún tipo de modificación en la calificación crediticia, ambos fondos tienen una media de calificación de BBB-.
Como vemos, ambos productos son idénticos en su estructura, sin embargo existe una diferencia notoria entre ambos y se encuentra en el apartado comisiones. En el fondo de inversión de Clase A de Invesco, la comisión de gestión anual es del 1,25%, mientras que en el Clase E, la comisión de gestión se eleva 50 puntos porcentuales hasta el 1,75% anualmente (que se mete en el bolsillo el distribuidor). Por ello, los gastos corrientes, que representan todos los pagos que se deducen de los activos de una institución de inversión colectiva, saltan del 1,65% del fondo de Clase A hasta el 2,15% en el fondo de Clase E.
En consecuencia, sería muy recomendable que revisara detenidamente sus fondos de inversión contratados, y en concreto, si usted es participe de algún fondo con la denominada Clase E. En ese supuesto, usted tiene todo el derecho en reclamar que se traspase en el fondo de inversión de Clase E al de Clase A, debido a que, como partícipe, esas mayores comisiones irán en detrimento de su rentabilidad en el largo plazo.
El Euríbor, el índice de referencia para la mayoría de las hipotecas variables en España,…
El Euribor es el índice de referencia más utilizado en las hipotecas variables en Europa…
https://youtu.be/jHPyMqYf-n4 El mercado de inversión puede ser atractivo, pero no debemos olvidar que el éxito…
El precio del alquiler en España continúa una tendencia alcista, situándose en 13 euros por…
Hola ¿Qué tal? Yo bien, gracias por preguntar. ¿Habéis hecho mucho truco o trato este…
Tras una semana intensa en datos macroeconómicos y en publicación de resultados empresariales, que se…
Ver comentarios
Veo otra nota "discordante" entre ambos fondos:
Clase A - Mínimo de 1500USD - Comisión de Suscripción hasta 5%
Clase E - Mínimo de 500€ - Comisión de Suscripción hasta 3%
Supongo que el importe mínimo de inversión y el importe de la comisión de suscripción tiene algo que ver con que la comisión de gestión anual sea mayor en la E que en la A...
¿O no??
Principales contribuidores económicos a la ONU http://dlvr.it/LqlnZM
-
Aumento de balance de los bancos centrales y crecimiento del PIB del G20 http://dlvr.it/LqlnBx
-
Listado del papel corporativo que puede comprar BCE http://dlvr.it/Lr96rQ
España pide a Bruselas dos años adicionales para rebajar el déficit http://economia.elpais.com/economia/2016/07/20/actualidad/1469042079_929155.html?id_externo_rsoc=TW_CC …
Iberia gana un pleito de 29 millones a Hacienda http://economia.elpais.com/economia/2016/07/18/actualidad/1468870717_692117.html?id_externo_rsoc=TW_CC …
Brexit, ataques terroristas en Francia, golpe de Estado en Turquía, tiroteos en Estados Unidos… Muchos ciudadanos se preguntan por qué determinados acontecimientos hasta ahora impensables o altamente improbables acechan, con relativa frecuencia, a países en los que, supuestamente, la calidad institucional debía haber alcanzado cierta madurez. La envergadura y frecuencia de este tipo de hechos se multiplican y su huella en la economía es considerable. De un modo más o menos certero, todas las previsiones económicas radican en distribuciones de probabilidad pero los errores de predicción, lejos de disminuir, han aumentado. La parte más impredecible de esas distribuciones (riesgos residuales o tail risks) ha engordado en la medida en que lo ha hecho la incertidumbre geopolítica.
No se trata sólo de cuestiones que afecten a la economía puesto que su huella social es brutal. Pero llama la atención que casi todas las previsiones económicas sean más optimistas a corto que a largo plazo. Eso tiene mucho que ver con el peso que factores geopolíticos poco predecibles pueden tener en los próximos años: donde hay estabilidad, la posibilidad de perderla; donde hay cohesión, la amenaza de desintegración. Los mercados también son conscientes de este nuevo entorno de imprevisibilidad y cada soplo de incertidumbre es un bofetón para los índices bursátiles. El 11-S en EE UU fue el inicio, lo que vemos ahora es la expansión de la incertidumbre. Lo que queda pendiente es su consolidación.
Hay, al menos, tres aspectos de este incómodo nuevo «normal» que parecen incontestables: El primero, la frecuencia de los shocks crece; el segundo, se están incorporando al mundo «desarrollado» problemas que pensábamos exclusivos de otros países en desarrollo (falta de credibilidad institucional, inestabilidad política, terrorismo en masa, corrupción); y el tercero, una más que probable reversión de la globalización, con un avance del populismo y de las propuestas políticas desintegradoras. A largo plazo, estos factores imponen una regresión del crecimiento económico y una pérdida de confianza y cohesión social.
No es que sea ésta la primera vez en la historia que las convulsiones políticas determinan un retroceso económico y social pero hay un riesgo de que ocurra. Y no todo surge como consecuencia de un orden internacional difícil de sostener. La desigualdad, la pérdida de calidad laboral y la falta de referencias políticas de liderazgo están minando la moral social y afectando negativamente a las expectativas. Y la socialización de la información (debidamente rigurosa y filtrada o no) hace que muchos de estos temores se extiendan de forma aún más acelerada.
Países como España no están exentos de estos problemas. Nada de lo que sucede en Francia, en Reino Unido e, incluso, en Estados Unidos debería resultarnos ajeno porque casi todo lo que nos sorprende allí, podría algún día suceder aquí. Al margen de lo que ya pasó en nuestro país, que no es poco. Sorprende, en este contexto, el escaso o nulo debate sobre el papel de España en la esfera internacional, sobre qué se puede hacer, qué se puede proteger y qué no se puede demorar.
FUNCAS
La Junta de Andalucía pagó a la vez a dos altos cargos para dirigir la Filmoteca de Andalucía http://www.elmundo.es/andalucia/2016/07/21/578fc2d8ca474120588b4623.html …
El recorte de 1.500 millones que pidió Montoro a las CC.AA. se queda en menos de 100 millones http://vozpopuli.com/economia-y-finanzas/86610-el-recorte-de-1-500-millones-que-pidio-montoro-a-las-cc-aa-se-queda-en-menos-de-100-millones …
Popular prepara un ajuste de plantilla de hasta 3.000 empleados http://www.expansion.com/empresas/banca/2016/07/21/57906850268e3e1a238b461c.html?cid=SMBOSO22801&s_kw=twitter …
El alcance de las medidas tomadas por el presidente Erdogan para reprimir el intento de golpe de estado del 15 de julio sobrepasan ya al grupo de conspiradores y efectivos humanos implicados. Erdogan ha entrado directamente a perseguir a millares de personas, la mayoría de ellos civiles.
Dada la improbabilidad de que tantas personas formaran parte o fueran cómplices del complot militar, sólo cabe suponer que la persecución emprendida por su gobierno contra (según estimaciones) 50.000 personas tiene una motivación ideológica. Según este análisis, las listas de personas a detener o expulsar de sus tareas y obligaciones dentro de las diversas administraciones habrían sido compuestas con antelación, hace años incluso, para su eventual uso en una ocasión que las autoridades sospechaban que acabaría por llegar.
Los hechos, según medios con acceso a fuentes de inteligencia, se habrían desencadenado según esta secuencia: Hakan Fidan, jefe de la inteligencia turca, había sido acusado en 2014 por el influyente clérigo exiliado Fetulá Gulen, de andar en conversaciones con el Partido Kurdo de los Trabajadores (movimiento separatista, clasificado como terrorista), lo que habría provocado la firme oposición del ejército. Esta posiblemente se haría patente y manifiesta en la reunión del Consejo Supremo Militar prevista para el próximo 1 de agosto. Para neutralizar la oposición castrense, el gobierno trazó un plan para la detención de los que consideraba cabecillas , pero éstos supieron de tales planes, por lo que decidieron adelantar (como se ha visto, precipitadamente) los planes de golpe.
Una profunda división ideológica por razones religiosas
Las medidas tomadas por Erdogan parecen confirmar las tendencias autoritarias que se le atribuyen. Su ideología islamista choca de frente con la tradición laica de las fuerzas armadas, dentro de las cuales hay sectores que siguen viendo su misión como la de garantes de un orden constitucional laico, y toman su nacionalismo como el único valladar contra las tendencias ideológicas y culturales, favorables a abrazar el Islam como ideología rectora de la vida y costumbres del país.
La acción de los militares rebeldes es vista por el régimen como un atentado a los fundamentos religiosos de la República. El poderoso Directorio de Asuntos Religiosos (conocido por su sigla en turco como Diyanet) es una institución oficial encargada de administrar los lugares de culto musulmán. Diyanet emitió el pasado martes un edicto prohibiendo los ritos funerarios para los rebeldes fallecidos en los combates, alegando que están reservados a los ‘creyentes’. El alcalde del área metropolitana de Estambul prohibió su entierro en los cementerios, y mandó abrir para ellos una “tumba de traidores”, con la esperanza de que en ella “no encuentren la paz”.
Fetulá Gulen, aunque como clérigo islamista es considerado de tendencias moderadas, ha promovido la creación de redes de influencia social que no complacen a Erdogan, su antiguo aliado. Por inspiración y recursos suyos se ha creado una extensa red de centros educativos de todo tipo, que enderezan a la vida civil a numerosos profesionales, preparados para alcanzar puestos de influencia en los negocios y la administración. El martes pasado fueron cesados 21.000 profesores del sector privado, entre ellos los decanos de todas las facultades del país, sospechosos de gulenismo.
La enseñanza obligatoria de la religión está excluida por la constitución. Sin embargo, el gobierno de Erdogan la impone. Una reciente sentencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos declaró que su obligatoriedad constituía ‘una violación de derechos’. El gobierno, en lugar de dar una rápida muestra de acatamiento, nombró una comisión de alto nivel para estudiar ‘cómo’ habría de aplicarse la sentencia, haciendo sospechar a la oposición laica que el gobierno hará lo que considere necesario para que la sentencia surta el menor efecto posible.
Gulen reside en Estados Unidos, y Erdogan ha exigido a Washington que le sea entregado como sospechoso de ser el ideólogo del golpe. El secretario de Estado, John Kerry, pidió que esta demanda fuese formulada en debida forma, y prometió que sería estudiada de acuerdo con sus méritos. Las posibilidades de que Washington entregue a Gulen son muy reducidas, dado lo contencioso de una pretensión tan cargada de ideología. Gulen opina que con las medidas que Erdogan ha tomado, se ha desencadenado “una caza de brujas”.
“Caza de Brujas”
La represión ha penetrado a fondo en la administración. La ‘caza’ habría llegado hasta el corazón mismo del gobierno: 257 personas de la oficina del primer ministro habrían sido cesadas. Las cifras de los represaliados (detenidos o cesados), dadas por los medios, varían grandemente: entre 20.000 y 50.000. Los represaliados de una forma u otra comprenden militares, policías, jueces, fiscales, profesores, etc. El primer ministro, Binali Yildirim, reconoció el martes pasado la detención de 7.453 personas, de ellas 1.505 civiles, y un tercio del total de generales. En las mismas declaraciones, Yildirim dijo que consideraba impensable que los Estados Unidos no entregasen a Gulen, “porque en ese caso se pondría en cuestión nuestra amistad”.
Una cuestión abierta es la de las percepciones mutuas entre la presidencia de Erdogan y las fuerzas armadas. Es muy reciente (8 de junio) la encomienda que Erdogan hizo a las fuerzas armadas para la coordinación de la lucha contra el terrorismo. Turquía es víctima desde hace meses de una oleada de atentados masivos, atribuidos al clandestino y separatista Partido Kurdo de los Trabajadores o al llamado Estado Islámico (EI).
Hace tres o cuatro años la cuestión kurda estaba relativamente calmada en el interior, gracias a la activa participación de partidos kurdos legales en la vida parlamentaria. Desde entonces esta situación se ha deteriorado considerablemente, posiblemente debido a la conexión de la población turca con los guerrilleros kurdos del exterior, que se hallan activamente implicados en la lucha contra el EI, y cuentan con el apoyo de los Estados Unidos, para gran disgusto de Ankara.
El uso maestro de las técnicas de la comunicación digital mostrado por Erdogan para controlar los resortes del estado y frustrar el golpe militar no ha dado, sin embargo, para impedir lo que puede ser visto como un ‘golpe bajo’ contra la credibilidad de su propio partido. En efecto, el pasado miércoles el gobierno bloqueó el acceso a la página web de WikiLeaks, pero sólo después de que se hubieran ‘escapado’ a la red, el día anterior, 300.000 emails del partido gobernante, Justicia y Desarrollo, que van desde 2010 al 6 de julio de este año. Su lectura promete ser fascinante.
Como resumen, podemos decir con relativa seguridad que Turquía marcha hacia una concentración de poder político en Erdogan, con deterioro del orden constitucional, una profundización de las simas ideológico-religiosas que dividen a la sociedad turca, una inestabilidad general del programa de relaciones con Europa, una más difícil relación con Estados Unidos y su contrapartida, de una mejor relación con Rusia. A medida que Erdogan vayan profundizando en su programa islamizante, la influencia de Turquía en Occidente se irá debilitando.
La reconfiguración de la promoción inmobiliaria española http://bit.ly/29WDftl