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Actualizado el 27 de septiembre de 2024
De hecho, mientras que, según la EPA, en 1996 apenas había 3 millones de personas con titulación superior, número que se aproximaba a las demandas del mercado laboral, veinte años más tarde eran 10.932.500 titulados para 5.922.600 puestos de trabajo acordes. Lo que significa que 4 millones de personas están condenadas a engrosar las listas del paro o a aceptar un puesto de trabajo por debajo de su cualificación.
Este hecho, se debe sencillamente a dos fenómenos que van en el mismo sentido y que tienen el mismo origen, que no es otro que la falta de empleo. Según Michael Spence, premio Nobel de Economía en 2001, y su “Teoría de la señalización del mercado”, los empresarios, a la hora de escoger personal, valoran de forma ponderada la formación, a veces incluso por encima de la adecuación al puesto de trabajo. El empleador asume que existe una correlación positiva entre el nivel educativo y las mayores habilidades para el desempeño de un puesto de trabajo. Es decir, considera que si el candidato “es bueno para los estudios también debe serlo para el trabajo”. Los empresarios ante el riesgo de reclutar trabajadores poco productivos y a falta de mayor información, optan por reclutar aquellos trabajadores que poseen mayores estudios al considerarlos más productivos y susceptibles de un mejor desarrollo personal a través de la promoción interna. Lo que significa al fin y al cabo que el tener elevada formación ayuda a conseguir un empleo.
Por otro lado, los demandantes de empleo ante la falta de puestos de trabajo de calidad acordes con su preparación formativa o experiencia, optan por cualquier tipo de empleo, aunque los mismos no tengan nada que ver con sus niveles de competencia. Con el agravante de que, conforme la situación se perpetua, el trabajador va asumiendo la situación permanente de degradación del mercado laboral. Estos trabajadores consideran que la precariedad laboral forma parte de sus profesiones y que el encadenamiento sucesivo de contratos son parte de un modelo normal de integración profesional. Con lo que se está asumiendo que los empleos temporales y la precariedad son las características estructurales propias de los mercados de trabajo actuales.
Pero lo verdaderamente preocupante para los universitarios es la sobrecualificación persistente; esto es, acumular durante años empleos para los que se está sobrecualificado. Por un lado, las capacidades, conocimientos y habilidades que no se ponen en práctica se deterioran y deprecian; por otro lado, porque acumular experiencias en trabajos menos cualificados da señales negativas a los potenciales empleadores futuros. En conclusión, que los trabajos menos cualificados no actúan como una plataforma para obtener más experiencia laboral y acceder a puestos mejores, sino que en buena medida son callejones sin salida que en muchos casos contribuyen a perpetuar el desajuste educativo. Hasta tal punto puede ser así, quienes acumulan experiencias laborales en puestos para los que están sobrecualificados tienen menos probabilidades de escapar de esta situación que quienes están en la inactividad.
Según las estadísticas de Eurostat, las tasas de sobrecualificación en España superan ampliamente al conjunto de la Unión Europea en todos los sectores. Con datos de 2016, se aprecia que las cifras, en muchos sectores, doblan las de la media europea. Por poner un ejemplo, en el sector de la construcción, el 57,4% de los trabajadores tienen una formación superior a la requerida por el puesto que ocupan, mientras que la media europea se sitúa en el 29,5%.
Lo que significan estos datos es simplemente que existe un enorme desajuste entre la oferta de trabajo en el país y la demanda, posiblemente ocasionada por motivos meramente políticos. Durante muchos años se ha estado intentando universalizar la formación superior, de modo que dejase de ser privilegio de unos pocos afortunados que pudieran permitirse el coste de la misma. El problema es que se ha creado la oferta sin que el país pudiera absorberla adecuadamente. De hecho, las políticas llevadas a cabo para la mejora de la competitividad del país han ido precisamente en sentido contrario, ya que se han centrado principalmente en la devaluación del trabajo.
En cuanto a las iniciativas para subsanar este desajuste, en opinión de la OCDE alguna está dando resultados, como es la reforma de la Formación Profesional Dual, que acerca el entorno académico al laboral. No obstante, estos avances son limitados, debido principalmente a la falta de coordinación de las políticas entre las distintas Comunidades Autónomas. A este respecto, la OCDE estima que existe la información necesaria para tratar de ajustar demanda y oferta de empleo, pero que apenas se utiliza. Y, por ello, realiza una serie de recomendaciones:
En definitiva, la OCDE identifica problemas del mercado laboral y qué medidas ejecutar para mitigar o solucionarlos a partir de un mejor aprovechamiento de la información disponible, de modo que permita optimizar el cuadre entre demanda y oferta de empleo.
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Estuve 3 noches en Cartagena de Indias.... y no son menores.... jóvenes sí... jajajajajajaja...
La parte antigua de Cartagena es espectacularmente bella y tiene la plaza del Monumento del Reloj que es un hervidero.
Y como punto final, que menos que Mr. Babilla, una discoteca con solera y donde aterriza lo mejor de cada casa... jajajajajajaja..
Según me comentan mis contactos que han estado ahí últimamente, hay un número importante de venezolanas que están en Cartagena huyendo de la incertidumbre de su país, lo que provoca que "redondee" el ambiente.
Sin querer justificar a nadie (hay cargos en que uno tiene que ser particularmente cauto), cualquier hombre sensible puede sucumbir a los cantos de sirena del pecado en Cartagena, especialmente después de unos Medellín (ron de la zona) con cola.
Si ya cuando fue Obama en una cumbre ya tuvo un pollo de magnitudes cósmicas son su Servicio Secreto..... que no es lo mismo Cartagena de Indias que Santiago de Compostela o Toledo......
Confieso que he pasado por el artículo de puntillas y si luego tengo un algo de tiempo lo leeré completo y con atención.
Pero, en mi experiencia personal, la verdad es que la sobrecualificación es generalizada. En parte, y no se por qué, por que la gente busca licenciados para trabajar de contable e incluso de auxiliar administrativo.
Eso sí, la mayoría de las veces los sueldos no van aparejados al título si no al puesto, lo cual no deja de tener sentido; pero también hace que la "fidelidad" del trabajador no sea la mejor, salvo circunstacias como la crisis, el perpetuo altísimo paro que hay siempre, y etc., etc.
En mis tiempos de jefe de administración me metían becarios, que nos los quería para nada, o Diplomados o Licenciados, que, en alguna que otra ocasión, lo que querían era "desbancarme", cuando un graduado en FP II ó III me hubiera valido perfectamente...
Creo que tan solo una vez me han denegado un puesto por estar "sobrecualificado"...
Estando en contacto económico con mucha gente de diferentes niveles de renta y laborales, tengo que decir que los artesanos, industriales y empleados cualificados pueden tener ingresos sorprendentes y especialmente sangrientos enfrente a muchos titulados.
Quizás tendríamos que ser un poco más consecuentes con nuestras capacidades (y las de nuestros hijos) y buscar que haya un poco más de diligencia a la hora de leer el futuro y especialmente potenciar las habilidades y gustos más especiales a la hora de empezar a elegir la carrera profesional, que no deja de ser la carrera de la vida.
Pintores especializados en vivienda unifamiliar y reformas.. camioneros hábiles con la pluma... conductores de excavadoras... fruteros.... carniceros.... etcétera, etcétera.
Lo que pasa que a los 18 si dices que quieres ser camionero o frutero, en fin....
No me extraña lo que comenta Manuel en el foro del día, la sobrecualificación es una pena para el trabajador, pero también para el Estado, el gasto en Universidades es muy elevado para luego no sacarle jugo. En España se genera mucho empleo en bares, restaurantes, campings, hoteles, …. Y exceptuando casos contados, ahí no necesitan ingenieros, necesitan gente que haga camas, limpie mesas, ponga copas, trabaje en recepción…. Desgraciadamente no generamos mucho empleo en la industria, un sector que exporta, un sector donde los salarios son más altos, se invierte en I+D, se contratan ingenieros, …..,
Por otra parte, me sorprende que no se hable nunca de las miles de personas que hay en España y que no trabajan ni trabajarán pero en este caso porque son cuasianalfabetos, no tienen la educación mínima para atender a un cliente, ya sea en un comercio, en un bar, en un hotel. El sistema ha fallado, o son ellos los que han fallado, o yo qué sé,… mi consuelo es que imagino que en mayor o menor medida esto ocurrirá en otros países. Por lo que veo en The Wire, las calles de Baltimore no están llenas de doctores en Harvard precisamente, ni los suburbios de París están llenos de pintores ni poetas….
1# Jajaaj, me parto contigo, podrías montar una agencia de viajes perfectamente.
# 3, oreidubic
En mis tiempos en la constructora me j.dia un poco ver el sueldo de los encargados, unos 3000€ o más, y a veces, hasta con dietas...
Pero es que los ferrallas, los fontaneros, electricistas, carpinteros, escayolistas, y otras profesiones "especializadas" también se llevaban un "pico".
E incluso oficiales y peones; pero estos no tanto, y dependía más de las horas que otra cosa...
Eso sí, la gente se movía mucho y trabajaba aún más, en la empresa, en su horario, y fuera de la empresa en su tiempo libre.
Un encargado se me rió una vez en la cara cuando, por accidente, vió mi nómina, que, en aquel entonces, para mí, no estaba mal del todo. Y, en todo caso, era mejor que la que tengo ahora...
:/
En fin, yo sí que pensé en ser taxista, camionero, o chófer privado, de no haber estudiado, incluso tenía un "plan" para hacer FP mecánica hasta los 18 u la edad mínima para sacarme el carnet correspondiente; pero en mi familia había un cierto interés por los estudios, por aquello de que "pesa menos un lápiz que una pala", y, al final, resulta que nada me resultó especialmente difícil, aunque tampoco puedo presumir de ser especialmente brillate...
(Humilde que es uno...)
:P
Hay grados universitarios que es mucho suponer eso de que están sobrecualificados. Por ejemplo, los flamantes grados en estudios del Jenaro, ¿algún insensato va a atreverse a meter una bomba de relojería en su empresa?
Luego están los millones de los de me meto en cualquier cosa en la uni que pagan los papis y de estudiante se vive de coña. Historiadores, maestros, psicólogos y demás hierbas, grados que están sobreofertados. Ese grado hecho a disgusto y solo a cumplir el expediente debería tener menos valor que el bachillerato, por lo que no me parece bien meterlo en el saco de la sobrecualificación.
#4 Osopanda
Conozco gente que está invirtiendo en servicios turísticos en Cartagena de Indias... gente con la que almuerzo a menudo. Es un destino que está creciendo... y hay seguridad jurídica y, para aprender, una agilidad para crear empresas alucinante en comparación a España.
Los colombianos gustan de un tipo de fiesta muy de Miami... cogen lanchas rápidas (que alquilan) y se concentran islas unas 50-60 lanchas (juro que fondeamos una noche solos a 50 metros de la playa y que al mediodía del día siguiente pusimos las defensas... parecía que molestamos) y se van allí a bailar reguetón y tajarse... no es un tipo de fiesta que me atraiga especialmente.... y notar que el porcentaje de hombres es sensiblemente superior al de mujeres.
Otra cosa es Cartagena ciudad... no fui a la parte moderna (muy de Miami también, salvando las distancias), me quedé intramurallas... seguridad 100%.... salir fuera, ya no era lo mismo pero algunos salieron y no tuvieron en ningún momento una especial sensación de inseguridad...
Yo me movía a pie dentro de murallas y ningún problema....mucha policía..
Mucho perreo, perreo y las bebidas a precios correctos (un poco más económico que aquí)..
Y claro... es Caribe... playas interesantes, islas curiosas.... pero la navegación es o fiesta de un día o mucho mochilero que quiere ir a Panamá y es la manera más cómoda y económica.... pero los barcos que hacen esta ruta están muy deteriorados...
Y sí.... las colombianas son preciosas...... que estás allá y te dicen, no, no... las guapas están en Medellín... Por Dios... mejor ni acercarse, que el corazón sufriría....
En Mr. Babilla fui en Halloween y era de escándalo... un escándalo.... concursos de perreo... ufffff. disfrazadas de policía, caperucita.... jajajajajajaja....
En fin.... pobres jueces...... es que los meten en el ojo del huracán..... que aquí todo el mundo es virtuoso pero no ha visitado nunca el infierno..
Si hemos pasado de 3 a 11 millones de titulados mientras los trabajos para ellos pasaban de 3 a 6 millones, tenemos problema para rato. Habría que endurecer el sistema, que los títulos los tengan los mejores: becas para estudiantes que saquen un 5 me parece que es tirar el dinero. Podrán tener colgada su orla en la pared mientras sirven hamburguesas.
En España parece que es obligatorio tener un título universitario y que el estado te lo tiene que pagar. Al final estamos exportando titulados, y no es algo puntual: hay titulados que nunca, nunca, van a trabajar de lo suyo. Ya sobran 5 millones y al ritmo que salen pronto serán 6, 7, 8... ¿Qué político se atreve a suicidarse proponiendo disminuir el número de plazas universitarias para solucionar el problema?
Otro efecto negativo de la sobrecualificación es que un altísimo porcentaje de jóvenes dedican años a estudiar (o sea, a sobrecualificarse) mientras en otros países estarían ya saliendo al mercado laboral y cogiendo experiencia real en trabajos de verdad.
Aquí vivimos de becarios, gratis o a precio de saldo, porque, "como están estudiando..."
SIETE CARRERAS CON CERO ALUMNOS EN PRIMERO
https://www.farodevigo.es/galicia/2018/09/26/siete-carreras-alumnos-1/1968183.html