El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha defendido este miércoles mantener las exportaciones de armamento a Arabia Saudí por “responsabilidad”, sin perjudicar a la industria de defensa española y asegurando los empleos de Navantia en la Bahía de Cádiz.
“Tengo que estar hoy y aquí en la defensa de los intereses de España, de sus intereses estratégicos, que además están situados en zonas muy afectadas por el drama del desempleo”, ha dicho en su comparecencia en el Pleno del Congreso para dar cuenta de las relaciones comerciales de España con Arabia Saudí en materia de armamento.
El jefe del Ejecutivo ha pedido al hemiciclo “altura de miras” para compartir esta visión y ha insistido en que su obligación es “conciliar intereses”. “Siempre he pensado que la política es intentar convertir ideales en realidades”, ha dicho reconociendo que esto “no siempre se puede conseguir” o en ocasiones “lleva más tiempo de lo que alguien pudiera desear”.
Así, ha garantizado el compromiso del Gobierno con la defensa de los derechos humanos, la paz y la libertad y ha asegurado que seguirá actuando por esta senda; pero ha remarcado que el Ejecutivo también debe tener en cuenta los intereses de las empresas españolas con relaciones comerciales con otros países, a los ciudadanos españoles y la necesidad de mantener sus puestos de trabajo.
OBLIGADO A “CONCILIAR INTERESES”
Sánchez ha hecho así alusión a su obligación de “conciliar intereses” y defender los de España, en alusión al contrato que Arabia Saudí tiene firmado con Navantia para la construcción de cinco corbetas en la Bahía de Cádiz, por un importe de 1.800 millones de euros que generará 6.000 puestos de trabajo en cinco años.
El presidente del Gobierno ha recordado que en este debate ha irrumpido el asesinato del periodista saudí Jamal Khashoggi, un hecho que ha calificado de “terrible” y ha condenado “sin paliativos”, para el que ha pedido una investigación que esclarezca los hechos y la actuación judicial “para que caiga el paso de la ley sobre los responsables”.
Sin embargo, cree que esto “no puede impedir que se actúe con responsabilidad”. Este caso es, para Sánchez, un “claro ejemplo de la complejidad de la política” que lleva a “entender las prioridades de la gestión pública”.
EL MARCO LEGAL ES MUY EXIGENTE
En este contexto, ha defendido que España cuenta con “un completo marco legal” para las exportaciones de material de defensa, acorde con “los más exigentes” estándares internacionales y siguiendo los criterios de la Unión Europea, la OSCE y los tratados de no proliferación de armas.
“La autorización de material de defensa está sujeta a requisitos equiparables, si no superiores, a los existentes en cualquier otro país de nuestro entorno”, ha insistido reconociendo que esto no excluye sin embargo la posibilidad de incluir mejoras si es necesario para adoptar “garantías adicionales”.
Y ha incluido en este ámbito el contrato de venta de 400 bombas a Arabia Saudí que desencadenó la polémica en España al rectificar el Gobierno el anuncio de la ministra de Defensa, Margarita Robles, de suspender su exportación por el peligro de que fueran usadas en la guerra de Yemen.
CERTIDUMBRE Y SEGURIDAD JURÍDICA
Sánchez ha recordado que esa operación fue autorizada en 2015 por la junta interministerial encargada de su análisis, la JIMDDU, y confirmada en los años 2016 y 2017. Por ello, ha defendido que son contratos “en vigor” que cumplen la normativa y “no entran en contradicción” con las resoluciones de Naciones Unidas.
“Son obligaciones contraídas por un Gobierno anterior que cumplen con los requisitos internacionales”, ha enfatizado volviendo a su “deber” de “velar por la seguridad jurídica y dar certidumbre en cumplimiento de las obligaciones internacionales de España”.
En este punto, ha preguntado si “alguien duda” de los principios progresistas de los alcaldes de la Bahía de Cádiz, entre los que se encuentra José María González, ‘Kichi’, de Podemos; y ha recordado que ellos conviven con una necesidad de “paz inmediata” representada por los puestos de trabajo de Navantia.
CONSENSO EN POLÍTICA EXTERIOR
Pedro Sánchez ha insistido así en su obligación de gobernar mirando “a largo plazo” y ha apelado al consenso para “salvaguardar” las relaciones internacionales de España de la polémica partidista. “Entiendo que otros quieran mezclar debates desde un enfoque partidista, pero yo no me puedo permitir ese lujo”, ha reseñado.
Y ha ofrecido la labor de su Ejecutivo por una política industrial que ayude a la internacionalización de las empresas españolas, la transformación del modelo productivo o el I+D+i. Para ello ha apuntado que el “primer paso” está representado en su proyecto de Presupuestos Generales del Estado, que “apuestan por la estabilidad, la creación de empleo y la lucha contra la desigualdad”.
2 comentarios
siempre son los mismos perjudicados, los que menos tienen, los andaluces.
El otro dia estuve en Gibraltar, la de españoles que pasan a diario a hacer compras y la línea muerta del asco, con un paro del 50%.
y es lógico, no puedes competir con Gibraltar en ninguna materia.
no seria mas lógico, ya que no podemos o no queremos hacer nada con Gibraltar, poner la línea libre de impuestos tipo canarias y que puedan vender mas barato que en Gibraltar?
trasladar los puestos fronterizos a los limites de la línea para evitar el contrabando igual que hacemos en Gibraltar.
los españoles no vamos a Gibraltar a ver monos, vamos a lo que vamos que es comprar ropa,oro,tabaco,alcohol, etc.
tendrían una oportunidad en esa zona y al mismo tiempo nos cargamos Gibraltar.
Si no defendemos la indutria nacional otras naciones nos echaran del mercado independientemente de lo que exportemos, y esto va cada vez a peor ( cierre de fábrica de energia eolica, eres en fabricas automovilísticas, cierre de fabricas de aluminio y acero, cierre de cementeras….) , y se siguen cerrando empresas de tamaño medio-grande que son las que pueden aportar I+D, sin que nadie haga nada por evitar el desierto industrial al que vamos encaminados .