El primer cierre negativo del Euribor se produjo en febrero de 2016 una situación impredecible y excepcional, que aparentemente iba a durar muy poco. Nos pilló a todos por sorpresa ya que pasamos en pocos años de verlo por encima del 5% a una caída en picado en donde no encontraba suelo.
Esto pilló también desprevenidos a los bancos que venían ofreciendo hipotecas con un diferencial inferior al 0.5%, especialmente entre los años 2006 y 2010, el caso extremo lo vimos con la “hipoteca rompedora” de Deutsche Bank (de marzo de 2008 cuando el Euribor cotizaba por encima del 4.5%) que tenía un diferencial de 0.17 puntos. Bankinter se quedó muy cerca con otra hipoteca que lanzó también en 2008 con un diferencial del 0.18%. Ayunque ahora nos parezcan un chollo había que tener valor para contratar una hipoteca cuyo TAE final era del 4.5%.
Por tanto, desde hace varios años muchos bancos deberían pagar intereses a sus clientes (y no lo hacen), concretamente a aquellos en los que la suma de diferencia más el Euribor sea negativo y este mes correspondería a todos aquellos que tengan un diferencial igual o inferior al -0.5% (ya que cerrará el mes previsiblemente en el -0.5%).
El problema es que la mayoría de los bancos no están pagando nada, bien es cierto que se tratan de cantidades bajas (entorno a los 10€ mensuales) pero cuando les toca cobrar a ellos no les importa lo pequeño que sea el importe, que si no lo pagas además te cobran intereses de demora.
Y como es poco dinero, la gente no reclama ya que no sale rentable por el esfuerzo que requiere litigiar contra el banco, afortunadamente la OCU se ha puesto manos a la obra y ha puesto en marcha una campaña (llamada “Un trato es un trato“) para exigir a los bancos que cumplan con las obligaciones aceptadas en las hipotecas, poniendo especial hincapié en los tipos negativos.
Según la Organización de Consumidores y Uusarios el cumplimiento del contrato no puede quedar al arbitrio de una de las partes sólo porque el resultado les sea desfavorable. Incluso el presidente de la Autoridad Bancaria Europea ha confirmado que bancos deben pagar a sus clientes por las hipotecas que arrojen tipos de interés negativos reales, salvo que haya alguna restricción legal (algo que de momento no ocurre).
De esta manera, la OCU se ha dirigido a los bancos más importantes de España para que informen si están aplicando los intereses negativos cuando proceda,
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Respecto a lo último ya os lo digo yo sin necesidad de recurrir a peticiones de información, al menos en el banco con color corporativo verde, NO se está aplicando los intereses negativos.
Pues dejamos de pagar nuestra parte. A ver quien pierde mas...