Ayer os puse un problema que tenía una doble función, por un lado entreteneros un poco (que tal y como está el Euribor estos días no viene mal) y por otro saber si leéis la otra parte del blog, la buena, la fetén y es que hace poco más de medio año escribimos un superinteresantísimo artículo titulado “el sesgo del superviviente” que daba la solución al problema de ayer, primero veamos su enunciado.
Al comienzo de la Primera Guerra Mundial el uniforme de los soldados británicos incluía una gorra marrón de tela. No llevaban casco. A medida que la guerra se fue recrudeciendo los altos mandos militares se dieron cuenta de la cantidad de soldados que estaban heridos en la cabeza con lo que decidieron reemplazar la gorra por un casco metálico. Sin embargo al cabo del tiempo se sorprendieron al descubrir que la incidencia de heridas en la cabeza aumentaba. ¿Por qué creéis que aumentó la proporción de heridos en la cabeza por batallón cuando los hombres llevaban cascos metálicos en lugar de gorras?
La solución es bien sencilla, el número de heridos en la cabeza aumentó, porque el número de muertos descendió. Antes del uso del casco si un soldado era alcanzado en la cabeza por un pedazo de metralla, ésta le perforaba la gorra y lo mataba, lo que hubiese quedado registrado como muerte, no como herida. Después de adoptar los cascos era más probable que el fragmento de metralla provocase una herida más que una muerte. Por lo tanto, la incidencia de heridas en la cabeza aumentó, mientras que la de muertes decreció.
Algo similar ocurrió con los aviones de guerra, decidieron reforzar la zona del fuselaje porque era donde más agujeros de bala tenían hasta que un estadístico muy listo descubrió que lo mejor era blindar el área del morro, los motores y la parte media del cuerpo justo donde no había casi agujeros de bala ya que se dio cuenta de un importante matiz, a los aviones también les disparaban allí, pero no llegaban a casa. Su pregunta fue ¿Dónde están los agujeros que faltan?
Vaya chapa os he dado ¿verdad?
Parece que el Euribor se ha tranquilizado de los últimos sustos y tras la bajada de ayer de dos milésimas, el indicador más utilizado en las hipotecas de España vuelve a bajar otra milésimas en su tasa diaria hasta el -0.286%. En cuanto a la media de febrero se queda en el -0.337% aunque probablemente cierre el mes cerca del -0.3% muy por encima del valor marcado hace un año cuando estaba en el -0.5%.
A día de hoy probablemente los mercados hayan descontado casi en su totalidad el peor de los escenarios aunque obviamente todo es susceptible de empeorar más. Con la tormenta que estamos viviendo es imposible hacer una predicción sobre el comportamiento del Euribor pero como me pagáis para hacerlo me mojaré, seguirá en negativo durante todo el 2022 (subirá hasta el -0.25% a final de año) y es probable que llegue al 0% a finales del 2023, la subida será muy paulatina con algunas bajadas puntuales aunque lo peor ya ha pasado.
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Pronto se acercaran a comentar los carroñeros que tienen la hipoteca variable a calmar su ansiedad y deseando que suba mas y mas el euribor para desgracia de los que temenos la hipoteca variable.
¿Eres un carroñero?