Los ahorradores no son tontos y esta foto lo demuestra

Esta foto la publicó ayer el diario económico Expansión y está sacada en el Banco de España. No se trata de una cola por sacar dinero, como puede ocurrir en algunos países en crisis, todo lo contrario es un reguero de gente esperando para comprar Letras del Tesoro. Tal está siendo la demanda que el Banco de España ya exige cita debido a la avalancha de minoristas.

Según comenté el BdE con la cita previa “se pretende ordenar la gestión de las cuentas directas y reducir los tiempos de espera”. La próxima semana tendremos una nueva nueva subasta de Letras para plazos de seis y un año, en el que se esperan que las rentabilidades sigan al alza, ya que el Banco Central Europeo (BCE) subirá los tipos de interés este jueves, en la reunión del Consejo de Gobierno, la primera de 2023. En dicho encuentro, el mercado espera que el organismo que rige la política monetaria de la eurozona incremente los tipos de interés en medio punto, hasta el 3%.

Las Letras del Tesoro también se pueden comprar online a través de la web tesoro.es pero realmente no es una tarea sencilla (necesitas el certificado digital y abrir una cuenta en el Banco de España) ni apta para todo el mundo con lo que es normal que muchos prefieran hacerlo de manera presencial.

En un entorno de subida de tipos de interés en el que vemos como los bancos aplican automáticamente esa subida a las hipotecas pero no al ahorro es normal que cada vez son más los clientes que acaben hartos de esta racanearía de los bancos españoles y opten por otras opciones como las Letras del Tesoro. Que alguien se esfuerce en hacer una cola como la de la foto dice mucho de lo que se está perdiendo la banca y del potencial de negocio que tienen pero del que no quieren sacar provecho.

No es normal que los grandes bancos pidan un interés de más del 5% por las hipotecas fijas y ofrezcan prácticamente un 0% por los ahorros. De momento ellos están siendo los únicos beneficiados de las subidas de tipos, se lo están llevando todo y los ahorradores ya se están empezando a hartar. Como no se den prisa, pronto será tarde y habrán perdido a miles de clientes.