Hipoetcado, te toca apretarte el cinturón al menos dos años más

El panorama financiero para los hogares españoles con hipotecas de tipo variable no es muy alagueño. Las proyecciones actuales de Funcas, la organización de cajas de ahorros, predicen que el Euríbor, el principal indicador de los tipos hipotecarios, se mantendrá cerca del 4% hasta finales de 2023, y no se prevé que disminuya a niveles cercanos al 3,5% hasta finales de 2024.

El Euribor parece imparable en su camino hacia el 4%, y ayer mismo marcó su máximo mensual, a efectos prácticos la hipoteca media en España, que ronda los 150.000 euros, una tasa de Euríbor del 4% supone un aumento de 280 euros en la cuota mensual, hasta los 765 euros.

HelpMyCash, a través de una encuesta a 1.300 usuarios, informa que uno de cada cinco hipotecados de tipo variable experimenta dificultades para hacer frente a sus pagos mensuales. Además, casi la mitad de estos clientes informa que no ha recibido ningún tipo de apoyo de su banco.

Por otro lado, Luis de Guindos, vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), reconoció ayer mismo que se esperan más aumentos de tipos. De hecho, el mercado no descarta dos incrementos adicionales de 25 puntos básicos antes de finales de julio. Se espera que en septiembre, las tasas alcancen el 4%. Si esto sucede, Christine Lagarde, en catorce meses, habrá incrementado los tipos de interés de depósito en 450 puntos básicos, un giro dramático nunca antes visto en la economía europea.

Esta situación está afectando la capacidad de ahorro de las familias españolas, que están lidiando con un aumento en los costos financieros y precios en auge. Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), la venta de viviendas cayó un 5,7% en marzo en comparación con el mismo mes del año anterior. Fotocasa predice que la situación puede empeorar, dado que estas transacciones suelen cerrarse con tres meses de antelación.

Esta confluencia de factores – el aumento en las tasas del Euríbor, la rigidez de la política monetaria, la inflación y la disminución de la rentabilidad de las inversiones inmobiliarias – parece apuntar hacia una desaceleración en el sector inmobiliario en los próximos años.

Se acercan tiempos duros para las familias en las que muchas tendrán que apretarse aún más el cinturón.