Solo ha pasado un años desde que el BCE comenzó a subir tipos

No ha pasado ni un año pero a la mayoría de los hipotecados les parece que ha pasado una década, Este 21 de julio se cumple un año desde que el Banco Central Europeo (BCE) se embarcara en una vertiginosa serie de aumentos a las tasas de interés. Hasta el año pasado, la institución presidida por la francesa Christine Lagarde, había mantenido durante 11 años las tasas de referencia en 0, pero las enormes inyecciones de efectivo a la economía durante la pandemia provocaron en la zona euro una inflación desenfrenada. 

En julio del año pasado, la inflación en Europa tocó el 8,9%. La guerra en Ucrania, el precio de la electricidad y del gas, complicaron aún más el panorama inflacionario. “Así que en un esfuerzo por frenar la economía y enfriar la inflación, el banco central aumentó las tasas en 50 puntos básicos, llevando el tipo principal a 0,50%. Este fue el primero de ocho aumentos que han llevado la tasa de referencia al 4,00%”, enumera Olivia Feldman, cofundadora del comparador financiero HelpMyCash.com

El resultado previsto se ha logrado en cierta medida: la inflación en la zona Euro —medida por el índice de precios al consumidor— ha disminuido al 5,5% desde el 8,9% hace un año —aunque en octubre llegó al 10,7%—. Aun así, está muy lejos del objetivo del BCE del 2%.

“La política monetaria es una herramienta contundente”, sostiene Feldman. “Era el instrumento que tenía que usar el BCE sí o sí para contener a presión la inflación desbocada. Nosotros en HelpMyCash siempre sostuvimos que el BCE iba a tomar una postura firme. De hecho, se tardó mucho en comenzar a subir los tipos, la Reserva Federal de los Estados Unidos inició su política alcista en enero 2022”, recuerda la fundadora del comparador.

La última subida anunciada por los responsables de establecer las tasas para los 20 países que utilizan el euro, el pasado 15 de junio, llevó los tipos a su nivel más alto en más de dos décadas y advirtió que no será el último.  “¿Hemos terminado? ¿Hemos llegado al destino final? No, aún no estamos allí”, pronunció Lagarde.

Durante el 2022 y parte del 2023, el BCE ha tenido que hacer un acto de equilibrio complejo: mientras intenta controlar la inflación debe frenar la economía, pero si la desacelera demasiado o muy deprisa, la zona euro podría caer en recesión. 

Lo cierto es que a medida que el BCE continúe incrementando las tasas, tendrá que tener en cuenta los daños colaterales que estos aumentos están causando al bolsillo de los europeos