Palazo para los hipotecados, el BCE no descarta seguir subiendo los tipos de interés

El Banco Central Europeo (BCE) ha observado que los niveles de inflación en la zona euro están mostrando signos de reducción. Sin embargo, prevé que estos niveles seguirán siendo altos por un período extendido. Como resultado, el BCE asegurará que las tasas de interés se mantengan en cifras restrictivas el tiempo necesario para alcanzar una inflación cercana al objetivo del 2% en el mediano plazo.

En su último informe económico de 2023, el BCE señaló que, durante su sesión del 27 de julio de 2023, optaron por elevar los tipos de interés en 25 puntos. Así, el banco resalta que mantendrá un criterio basado en datos actuales para definir la magnitud y duración de dichas restricciones. De todos modos, el BCE reitera su disposición para adaptar sus herramientas a fin de lograr que la inflación se estabilice en el objetivo propuesto y mantener una efectiva política monetaria.

Se espera una continuada reducción de la inflación en Europa. El BCE también comenta el impacto positivo de las recientes alzas en las tasas de interés, las cuales, en su opinión, han tenido un impacto notable. Las condiciones financieras se han ajustado, limitando así la demanda y contribuyendo a estabilizar los precios.

No obstante, el BCE admite que las expectativas económicas a corto plazo para la zona euro han empeorado, sobre todo por la disminución de la demanda interna. La alta inflación y las condiciones crediticias más estrictas han limitado el gasto, afectando sectores como el manufacturero. Aunque hay cierto dinamismo en servicios, este parece ir perdiendo impulso.

A pesar de un panorama económico desafiante, se espera una recuperación respaldada por la reducción de la inflación y otros factores positivos a largo plazo.

La incertidumbre sigue siendo un factor clave. Riesgos como las tensiones entre Rusia y Ucrania y otras disputas geopolíticas podrían afectar negativamente la economía europea. Por otro lado, hay potencial para un crecimiento más sólido si factores como el mercado laboral y la confianza de consumidores y empresas se fortalecen.

El BCE se muestra optimista sobre la situación laboral actual, aunque también muestra preocupación por posibles desafíos en el futuro. La inflación también se ve influenciada por factores como el aumento salarial.

Finalmente, con la gradual mejora de la situación energética, el BCE sugiere que es fundamental que los gobiernos revoquen ciertas ayudas ofrecidas a la población y se enfoquen en reducir la deuda pública.