El mercado hipotecario es más complejo de lo que parece, a las tradicionales hipotecas fijas y variables últimamente se han sumado las mixtas y las duales. Hoy vamos a analizar otras poco comunes, las abiertas sin límites.
Una hipoteca abierta sin límite es un tipo de préstamo hipotecario que ofrece una gran flexibilidad en comparación con una hipoteca tradicional cerrada. En una hipoteca abierta sin límite, el hipotecado tiene la opción de hacer pagos adicionales en cualquier momento sin incurrir en penalizaciones. Esto permite al hipotecado reducir el capital del préstamo más rápidamente y, por lo tanto, pagar menos intereses a lo largo del tiempo.
Además, el término “sin límite” generalmente se refiere a la posibilidad de volver a disponer del capital ya amortizado. Es decir, si has pagado una parte significativa del préstamo, puedes volver a acceder a ese capital sin tener que solicitar un nuevo préstamo. Esto puede ser especialmente útil para financiar grandes gastos o inversiones sin tener que pasar por todo el proceso de aprobación de un nuevo préstamo.
Hay que tener en cuenta que las hipotecas abiertas suelen tener tasas de interés más altas que las hipotecas cerradas debido a la flexibilidad que ofrecen, además pueden terminar implicando un sobreendeudamiento muy elevado si no se actúa o se utiliza adecuadamente.
Por último si se da la situación de impago, el banco puede incluso iniciar los trámites necesarios y requeridos para poner en marcha y realizar una ejecución hipotecaria que puede terminar en el embargo de la casa.