¿Qué son las Letras del Tesoro? ¿Merecen la pena para los ahorradores?

Cuando se trata de invertir en instrumentos de deuda gubernamental, las dos opciones más populares son las Letras del Tesoro y los bonos. Aunque ambos son formas de prestar dinero al gobierno, existen diferencias clave que los inversores deben entender.

¿Qué son las Letras del Tesoro?

Las Letras del Tesoro son instrumentos de deuda a corto plazo emitidos por el gobierno. Estas se utilizan para financiar gastos gubernamentales y para regular la oferta monetaria en la economía. Al comprar una Letra del Tesoro, estás prestando dinero al gobierno a cambio de un rendimiento que recibirás al vencimiento del instrumento.

Diferencias con los bonos

1. Plazo de Vencimiento: Las Letras del Tesoro suelen tener vencimientos cortos, que van desde unos pocos meses hasta un año. Los bonos, en cambio, son instrumentos de deuda a largo plazo con vencimientos que pueden extenderse hasta 30 años.
2. Pago de Intereses: A diferencia de los bonos, que pagan intereses periódicos, las Letras del Tesoro no ofrecen pagos de intereses durante su vida útil. Se compran con un descuento sobre su valor nominal y la diferencia entre el precio de compra y el valor nominal es el rendimiento que obtienes.

Seguridad de la Inversión

Las Letras del Tesoro son consideradas una de las inversiones más seguras. Esto se debe a que están respaldadas por la solidez financiera del gobierno que las emite. En tiempos de incertidumbre económica, muchos inversores optan por “refugiarse” en estas letras, ya que ofrecen un retorno garantizado.

Ejemplo Práctico

Imagina que compras una Letra del Tesoro con un valor nominal de 1.000 euros por un precio de 950 euros. Al vencimiento de la letra, recibirás los 1.000 euros completos. La diferencia de 50 euros es el rendimiento que obtienes por tu inversión, y es como si hubieras recibido un “interés” por prestar tu dinero al gobierno.

Tanto las Letras del Tesoro como los bonos son formas efectivas de invertir en deuda gubernamental. Sin embargo, las diferencias en los plazos de vencimiento y en la forma en que se pagan los intereses hacen que cada uno sea adecuado para diferentes tipos de inversores y objetivos financieros.