La gran pregunta que se hacen todos los hipotecados es cuando comenzará a bajar los tipos el BCE. Christine Lagarde, presidenta del Banco Central Europeo (BCE), ha logrado mantener la euforia en los mercados sin desinflar las expectativas de rebajas en las tasas de interés. De hecho, estas expectativas se han intensificado, empezando a anticipar el primer recorte para marzo del próximo año (el 7 de marzo se reúne el BCE), con un total de seis reducciones previstas para el resto de 2024. Esto, a pesar de que Lagarde asegura que en el Consejo de Gobierno no se ha debatido sobre los recortes. La mayoría de los expertos prevén bajadas, pero no antes de junio de 2024.
Lagarde ha enfrentado un desafío similar al de Jerome Powell, presidente de la Reserva Federal de EE.UU. (Fed), al contradecir las expectativas del mercado de manera sutil. Tanto la Fed como el BCE se han visto en la tarea de tranquilizar a los mercados. Los enfrentamientos entre los mercados y los bancos centrales suelen acabar mal, con pérdidas para los inversores en bolsa y renta fija. Pero Lagarde, al igual que Powell, ha conseguido mantener la fiesta en marcha con movimientos calculados.
“No hemos discutido nada sobre recortes de tipos”, declaró Lagarde. Estas palabras podrían haber causado un terremoto financiero, pero no ha sido así, incluso con un tono más restrictivo que el emitido por la Reserva Federal de EE.UU., donde Powell reconoció que se mencionaron los recortes de tipos.
El modelo OIS (Overnight Indexed Swap) de derivados financieros, que guía a los inversores en tipos de interés, ha empezado a anticipar la primera bajada para marzo, antes de lo esperado entre abril y mayo, y abre la puerta a seis bajadas para todo 2024.
Los swaps financieros señalan movimientos hasta octubre próximo, anticipando 5.4 bajadas. Hasta ahora, seis recortes se habían reservado a la Fed. Los futuros del euríbor a tres meses, que también sirven para anticipar los movimientos de tipos, con vencimiento en diciembre de 2024, sugieren que el índice terminará en el 2.48%.
Actualmente, el euríbor está replicando los movimientos de la tasa de depósitos del BCE, por lo que los niveles futuros de diciembre coinciden con seis bajadas de tipos.
“Con los tipos de interés presumiblemente en sus máximos, el mercado se ha centrado firmemente en el próximo ciclo de recortes. Creemos que los riesgos están sesgados hacia recortes más tardíos en comparación con las expectativas actuales del mercado”, señala Konstantin Veit, gestor de carteras en PIMCO.
La primera señal del BCE para impulsar la perspectiva de recorte de tipos fue la reducción de las previsiones de inflación. La nueva estimación para 2024 es del 2.7%, por debajo de la previsión anterior del 3.2%. Para este año, la previsión se reduce dos décimas al 5.4%. “Al observar una disminución significativa de la inflación, el BCE abrió hoy la puerta a recortes de tipos el próximo año. Sin embargo, evitó respaldar las expectativas del mercado de un primer movimiento en marzo de 2024”, comenta Holger Schmieding, economista jefe en Berenberg, quien apunta al primer recorte para junio de 2024.
El manejo de Lagarde en la rueda de prensa fue tan similar al de Powell que incluso se atrevió a descartar una recesión para toda la zona euro. “No tenemos una recesión en nuestro escenario base”, indicó la presidenta, añadiendo: “Nuestro mandato no es causar una recesión, es alcanzar nuestro objetivo de inflación, aunque sepamos que para ello tendremos que reducir la demanda, algo que ya está ocurriendo”. La posibilidad de un aterrizaje suave que también llegue a Europa es una perspectiva bien recibida.
“Ningún recorte de tipos parece ser inminente. Esperamos que el primer recorte se produzca en junio de 2024”, explica Piet Haines Christiansen de Danske Bank.