Con las bajadas de tipos en el horizonte, el intentar sacar rendimiento a los ahorros a un plazo de más de un año se está volviendo cada vez más complicado, de ahí que cada vez más ahorradores miren a los Bonos.
El Tesoro Público ha colocado este jueves 5.894 millones de euros en una nueva emisión de bonos y obligaciones, en el rango alto estimado, y lo ha hecho elevando la rentabilidad ofrecida a los inversores tanto en el plazo a tres como a cinco años, según los datos del Banco de España.
La demanda de los mercados por los títulos de deuda españoles se ha mantenido alta en la última subasta del mes de febrero, y el importe solicitado ha superado los 10.200 millones de euros, muy por encima de la cantidad finalmente adjudicada.
En concreto, en el bono a tres años el organismo dependiente del Ministerio de Economía ha colocado 1.862,22 millones de euros, frente a unas peticiones por 3.212 millones, y la rentabilidad marginal se ha colocado en el 2,883%, ligeramente por encima del 2,811% ofrecido en la subasta previa.
En el bono a cinco años, el Tesoro ha adjudicado 2.185,69 millones de euros, por debajo de los 3.565 millones solicitados por los inversores, y el tipo marginal se ha situado en el 2,879%, también por encima del 2,628% de la emisión anterior del mismo tipo de papel.
Por último, en la obligación a 15 años, con una vida residual de 9 años y 5 meses, se han colocado 1.847,81 millones de euros, frente a una demanda de 3,427 millones. La rentabilidad marginal, en este caso, se ha situado en el 3,144%, bastante inferior al 3,985% ofrecido con anterioridad en la misma referencia.
Con esta emisión finalizan las pujas de un mes marcado por la subasta de 6.000 millones en un nuevo bono sindicado 30 años, con una demanda superior a los 83.700 millones de euros, la cifra más alta para una emisión a este plazo.
PROGRAMA DE FINANCIACIÓN DEL TESORO PARA 2024
El Tesoro ya lleva emitido 40.846 millones de euros en poco más de un mes del año, el 23,6% de su programa de financiación a medio y largo plazo para 2024. La vida media de la deuda del Estado en circulación alcanza los 8 años y el coste medio de la cartera se sitúa en el 2,1%.
En conjunto, la estrategia de financiación del Tesoro de 2024 prevé unas necesidades de financiación nueva de en torno a los 55.000 millones para este ejercicio, lo que supone una reducción 10.000 millones respecto a las de 2023.
Por su parte, la emisión bruta prevista ascenderá a 257.572 millones de euros, un 2% superior a la de 2023 debido al incremento de las amortizaciones, y el grueso se cubrirá mediante la emisión de instrumentos a medio y largo plazo con el objetivo de mantener la vida media de la cartera de deuda pública.
Dentro de la estrategia del Tesoro para 2024 está previsto recurrir nuevamente a las sindicaciones para la emisión de determinadas referencias de Obligaciones del Estado.
Otros de los objetivos para 2024 será mantener la diversificación de la base inversora y apostar por la emisión de bonos verdes como elemento estructural del programa de financiación, reforzando de esta forma el mercado de finanzas sostenibles