El aumento del Euríbor vivido estos últimos años ha impactado de manera desigual en las familias con hipotecas variables en España. Los intereses pagados en las hipotecas más recientes se han incrementado hasta 11 veces más que las de las más antiguas. Esto se debe la fórmula de cálculo de la cuota hipotecaria que se utiliza en España, el sistema de amortización francés. Con esta fórmula, la mayor parte de los intereses de la deuda se pagan en los primeros años de préstamo, lo que provoca que durante los primeros años apenas se esté devolviendo dinero prestado si no que se pagan prácticamente intereses.
Lo que permite este sistema de amortización es que se tiene una cuota constante, ya que todos los meses se paga lo mismo. Sin embargo, al principio de la vida del préstamo se pagan más intereses y menos capital, aunque conforme van pasando los años esta situación se revierte. Este matiz es muy importante ya que si tienes un dinero ahorrado y con los tipos de interés disparados, cuanto antes hagas la amortización anticipada de tu hipoteca mejor, ya que a la larga pagarás menos intereses.
No obstante, el contexto actual es diferente al de la crisis inmobiliaria de 2008. En los últimos años, se han firmado muchas menos hipotecas, y la proporción de préstamos a tipo fijo se ha disparado, contribuyendo a amortiguar el efecto de las subidas de los tipos sobre los hogares.
Aunque las perspectivas a futuro para la inflación son favorables, el BCE todavía no se ha animado a bajar los tipos de interés con lo que la bajada del Euribor será más lenta de lo previsto el año pasado.