Tras una semana de altibajos en las principales bolsas mundiales, con saldo ligeramente negativo en las americanas, algo positivo en las europeas y asiáticas, comienza una semana cuyo dato más relevante será el IPC americano de febrero (el dato que más influye a la Reserva Federal), que se conocerá mañana martes.
Tras los buenos datos de empleo en USA conocidos el viernes, la evolución de los precios será la que marque el momento del inicio de las bajadas de tipos por parte de la FED, como así certificó su presidente la pasada semana. No se esperan cambios en la tasa anual (en el 3,1%) y puede recortarse algo la subyacente (del 3,9% al 3,7%). Un mejor dato sería muy bien acogido por los mercados, toda vez que ni el petróleo (el Brent se mantiene en torno a 81 $) ni los bonos (el 10 años americano relaja su rendimiento del 4,25% al 4,06% tras las palabras de Powell) van a actuar de forma negativa.
En Europa, tras la decisión del BCE de mantener los tipos de interés y certificar, con la declaración posterior, que el recorte de tipos está muy próximo, no hay importantes indicadores a conocer, por lo que las bolsas del continente estarán al albur de lo que marque la americana. En consecuencia, aunque no es descartable que la corrección de los principales índices del viernes pasado tuviera continuidad durante la jornada de hoy lunes, el dato de inflacion americana de mañana podría virar a postiva la tendencia de los mercados en la búsqueda de nuevos maximos.
Finalmente, respecto al Euribor, seguiremos con la resaca post-BCE y podríamos continuar con la volatilidad de la semana pasada, de momento los futuros vienen bastante nerviosos aunque previsiblemente tendremos bajadas.