Cada vez son más las personas que optan por un depósito remunerado como una opción para invertir. Un instrumento financiero que se caracteriza por ofrecer una rentabilidad fija a cambio de mantener inmóvil un capital en una entidad bancaria durante un tiempo acordado. Veremos en este artículo qué son estos depósitos remunerados y cuáles son sus principales características y ventajas.
La sencillez y la seguridad son dos de los aspectos más destacados de los depósitos o cuentas remuneradas. No en vano, hay que tener en cuenta que tanto el capital inicial que se deposita como los intereses que se generan suelen estar garantizados. Y esto es algo que, precisamente, valoran en gran medida la mayoría de inversores.
Los depósitos remunerados son productos financieros que permiten a los clientes depositar su dinero en una entidad bancaria a cambio de una rentabilidad o interés. Para que lo entendamos mejor, funcionan como los préstamos de los bancos, pero en sentido contrario. El cliente entrega una cantidad de dinero a la entidad durante un tiempo, mientras que el banco le paga los intereses de esa cantidad.
La cantidad de dinero a depositar se acuerda entre el cliente y el banco. Pero además, también se concreta el plazo del depósito y la tasa de interés. Los plazos pueden variar y oscilan entre pocos meses y varios años, mientras que los intereses pueden ser fijos o variables. Como regla escrita, durante el plazo que dura el depósito el cliente no puede acceder al dinero. Si lo hace, debe hacer frente a una penalización.
Una vez que concluya el plazo del depósito, el cliente recibe el capital inicial más los intereses generados.
Ahora que sabemos qué son los depósitos remunerados, veamos algunas de sus principales características para obtener una idea más general de esta opción de inversión:
Así pues, las cuentas remuneradas son una opción que se caracteriza, fundamentalmente, por su grado de seguridad.
La seguridad y la rentabilidad de los depósitos remunerados es muy similar, e incluso superior, a la que también ofrecen las cuentas de ahorro. Estas soluciones de ahorro son de riesgo mínimo pero, como contrapartida, brindan unos rendimientos más bajos que los de otras opciones.
Sin ir más lejos, los fondos de inversión, las acciones o los bonos permiten a los clientes disfrutar de mayores rendimientos. No obstante, el riesgo de estas soluciones de ahorro son más altos. Esto se debe a que la rentabilidad depende siempre de los mercados y, a diferencia del depósito remunerado, puede variar mucho en muy poco tiempo.
En este sentido, la principal diferencia entre los depósitos remunerados y el resto de opciones va a depender del perfil de riesgo de los clientes. Los depósitos remunerados son ideales para mantener el capital y obtener un rendimiento seguro, mientras que los demás brindan un rendimiento más alto pero con mayores riesgos.
A lo largo de este artículo, ya podemos hacernos una pequeña idea de algunas de las ventajas de los depósitos remunerados:
Pero, al mismo tiempo, los depósitos remunerados poseen ciertas desventajas, sobre todo si los comparamos con otras opciones de inversión:
El depósito remunerado es, en definitiva, una opción de inversión más que interesante, como instrumento de diversificación. Hablamos de una solución muy segura e ideal para los inversores que buscan un producto financiero de riesgos mínimos. Además, es un instrumento fácil de entender, sin grandes complejidades y muy accesible para todos. Los intereses que se generan son ya conocidos de antemano por el cliente. Solo hay que esperar el plazo acordado para disfrutar del rendimiento financiero que se produce.
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