En los últimos años, quienes tienen hipotecas a tipo variable han sufrido la continua escalada del euríbor, que ha provocado un incremento en sus pagos mensuales. Este índice de referencia utilizado en la mayoría de las hipotecas de España marcó en octubre su nivel más alto desde 2008, alcanzando el 4,16% y este mes de marzo cerrará en el entorno del 3,7%.
La subida de los tipos de interés por parte del Banco Central Europeo (BCE) ha sido un factor clave en esta situación, impactando directamente a los hipotecados con ajustes al alza en sus cuotas. El BCE persigue como objetivo principal llevar la inflación a un 2%, y a pesar de afirmar que se está aproximando a esta cifra, las estadísticas de junio evidencian una inflación persistente en la zona euro, ubicándose en el 5,5%. Las recientes declaraciones de Christine Lagarde, presidenta del BCE, sobre la posible rebaja de los tipos en junio nos dan un poco de esperanza.
En este entorno el mes de abril se presenta como aquel en el que los hipotecados que revisen anualmente verán por fin como la cuota mensual baja ya que el Euribor de abril del año pasado fue del 3,757% y el de este año será previsiblemente inferior (es pronto para hacer una previsión pero creemos que rondará el 3,6%), no mucho pero es prácticamente seguro que algo más bajo y lo más importante es el cambio de tendencia. Mejor suerte tendrán aquellos que revisen semestralmente ya que lo harán frente al Euribor de octubre que marcó máximos en el 4,16% y en ese caso la rebaja será considerable.