El problema de la vivienda en nuestro país parece lejos de arreglarse, la agencia de calificación Fitch Ratings ha anunciado hoy que los “retos” en el acceso a la vivienda en España y Portugal persistirán en el corto plazo dado que los aumentos de la renta nominal de las familias serán “prácticamente iguales” a la evolución prevista del precio de los hogares en 2024 y 2025.
“Esperamos que el valor medio nacional del precio de la vivienda en relación con la renta bruta anual de los hogares se mantenga entre el 5,5x y el 6x en España y Portugal. Sin embargo, la ratio de asequibilidad se amplía materialmente en las grandes áreas metropolitanas urbanas, como Madrid y Lisboa, a casi 8x”, ha explicado el informe.
Fitch ha indicado que espera que la demanda de crédito y las condiciones de financiación mejoren en 2024 en comparación con el año pasado debido a la bajada de los tipos de interés y a la estabilidad de las prácticas de suscripción.
No obstante, el acceso a una vivienda asequible es “una preocupación social clave” en ambos países, especialmente para las familias jóvenes y los compradores primerizos con poca capacidad de ahorro.
Así, la agencia se ha hecho eco de las medidas de apoyo anunciadas por los responsables políticos a ambos lados de la frontera, como el plan de garantía español para familias jóvenes y el de beneficios fiscales de Portugal para aumentar el parque de viviendas.
En cualquier caso, el precio nominal de los hogares crecerá entre un 3% y un 5% anual en España y entre un 4% y un 6% en Portugal. Esta dinámica se apoyará en las “persistentes limitaciones en la oferta de viviendas”, si bien Fitch ha apuntado a una evolución a dos velocidades, con las áreas escasamente pobladas apenas registrando variación, al tiempo que las ciudades y las zonas turísticas experimentarán un alza “sólido”.
Por otro lado, Fitch ha destacado que, por primera vez en la historia, las hipotecas mixtas que combinan intereses fijos y variables se han convertido en la norma en ambos países ibéricos, con un dominio del 40% en España y del 70% en Portugal.
El documento publicado recoge también que se producirá un “ligero aumento de la morosidad” en el sector hipotecario residencial a lo largo de 2024 por “la erosión de la renta disponible” fruto del impacto de la inflación.
La morosidad se irá suavizando “gradualmente” en 2025 a medida que las reducciones del Euríbor en los próximos meses alivien los plazos de pago de los préstamos a tipo variable, que suelen operar con frecuencias de reajuste anuales.