La bajadas de tipos siguen estando lejos, al menos en EEUU en donde Christopher Waller, integrante de la Junta de Gobernadores de la Reserva Federal estadounidense (Fed), ha manifestado que se requerirán varios meses más de datos alentadores sobre la inflación antes de respaldar un relajamiento en la política monetaria.
“A menos que se observe un debilitamiento relevante en el mercado laboral, necesitaré ver varios meses más de buenos datos inflacionarios antes de sentirme cómodo apoyando un relajamiento en el enfoque de la política monetaria”, explicó Waller en un evento del Peterson Institute.
De este modo, el organismo encargado de salvaguardar el dólar considera que los últimos datos del IPC fueron “tranquilizadores”, al constatar que la inflación no se está acelerando. Igualmente, aseguró que las lecturas sobre el consumo y el mercado laboral sugieren que el tono monetario se encuentra en un nivel adecuado para presionar a la baja la inflación.
Waller indicó que estos avances suponen solo un progreso modesto hacia la convergencia con el objetivo del 2% fijado por la Fed. “Si aún fuera profesor y tuviera que calificar este informe inflacionario, le pondría un ‘C+’: lejos de reprobar, pero tampoco sobresaliente”, ejemplificó con una calificación equivalente a un “bien” en España.
En consecuencia, probablemente no sean necesarios incrementos adicionales en las tasas de interés, que desde julio del año pasado se mantienen en un rango del 5,25% al 5,5%.