Esta vez fue el BCE el que tomó la iniciativa bajando los tipos de interés el pasado 6 de junio, mientras tanto los miembros del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) estuvieron divididos en torno a cuanto tiempo mantener los tipos de interés en el rango objetivo actual del 5,25% al 5,5%, según se desprende de las actas de la reunión del pasado 12 de junio.
Así, mientras “algunos” funcionarios subrayaron la necesidad de ser “pacientes”, “varios” participantes manifestaron que una ralentización del mercado laboral podría conducir a un engrosamiento de las listas del paro comparativamente más grande.
“Con la normalización del mercado laboral, un debilitamiento de la demanda podría generar ahora un mayor alza del desempleo que en el pasado reciente, cuando la menor demanda de mano de obra se reflejaba más a través de un número más reducido de ofertas de empleo”, ha explicado el documento publicado.
En este sentido, algunos miembros mencionaron que, dado que los riesgos para los objetivos del doble mandato de la Fed de estabilidad de precios y crecimiento económico ahora están más equilibrados, el mercado laboral requerirá de un “seguimiento minucioso”.
Por otra parte, los miembros de el FOMC también afirmaron que no esperaban que fuera “apropiado” recortar tipos hasta que se dispusiera de más datos y de una “mayor confianza” en que la inflación estaba convergiendo hacia el objetivo del 2%. Es más, varios de los participantes se mostraron abiertos a subir el precio del dinero en caso de que la inflación se mantenga elevada.
“Los participantes tomaron nota de la incertidumbre relacionada con las perspectivas económicas y la duración de la actual política restrictiva”, han manifestado las actas.
Además, el órgano decisor de la Fed también ha hecho hincapié en que la “continuada fortaleza” de la economía, entre otros factores, podrían sugerir que se ha elevado la tasa neutral de tipos (r*), esto es aquella que mantiene la economía en equilibrio en ausencia de crisis y con un una tasa de pleno empleo y precios estables.