Sumar ha presentado en el Congreso una propuesta de ley que busca obligar a las entidades financieras a implementar un sistema específico para reclamar cláusulas abusivas en las hipotecas. Estas cláusulas, conocidas como ‘Redito ad Libitum’ (Redal), han sido incluidas en muchos contratos hipotecarios mediante métodos “engañosos” o sistemas de subamortización “encubierta”. En estos contratos de cuota creciente, la devolución del capital se aplaza durante años, y después de décadas, la cuota se encarece considerablemente, algo que no se explica claramente al firmar.
El diputado de En Comú, integrado en Sumar, Félix Alonso, destacó que estas cláusulas Redal pueden surgir debido a sistemas de amortización basados en conceptos matemático-financieros complejos que el consumidor medio no entiende. “Lo que pedimos con esta ley es que los bancos hagan una especie de ITV para identificar y corregir errores en estas hipotecas”, afirmó Alonso en rueda de prensa. Según un informe de la Dirección General de Consumo de las Islas Baleares, se han encontrado hasta 36 tipos de irregularidades en los contratos hipotecarios.
La propuesta de Alonso incluye la revisión de hipotecas, especialmente las de tipo variable firmadas antes de 2011, cuando Economía publicó una Orden Ministerial para regular las hipotecas Redal. El objetivo es que los propios bancos contacten a los afectados y realicen un chequeo exhaustivo.
Falta de Transparencia y Técnicismos Complejos
Estas cláusulas abusivas suelen estar ligadas a tecnicismos financieros (sistema francés, cuotas constantes, amortización progresiva) que no se explican claramente en los contratos. También se utilizan métodos exponenciales sin advertir los efectos futuros en las cuotas, o se presentan las primeras cuotas sin detallar cómo variarán en contratos de interés variable. A menudo, se muestran sólo las ventajas del acuerdo y se indican tipos de interés más bajos de lo real.
Sumar señala que los contratos no siempre proporcionan información sobre las cuotas en distintos escenarios de tipos de interés, lo que agrava la falta de transparencia. Ante esto, proponen un marco legislativo para regular la redacción de los contratos hipotecarios y proteger a los consumidores.
Necesidad de Nuevas Herramientas de Detección
Sumar defiende la creación de herramientas para detectar si los contratos son transparentes o si esconden abusos que perjudican al cliente. El grupo denuncia la dificultad de los consumidores para reclamar por infracciones en los servicios financieros y propone un mecanismo similar al decreto de protección de consumidores en cláusulas suelo.
La proposición de ley aborda los “cebos” financieros en contratos de cuota creciente y otros, y busca proteger adecuadamente al consumidor.
Sistema de Reclamaciones Conocido por los Consumidores
La principal propuesta es que las entidades de crédito implementen un sistema de reclamación específico conocido por todos los consumidores afectados. Además, la entidad no podrá iniciar un procedimiento civil por incumplimiento del pago si el contrato incluye cláusulas abusivas, siempre que las cuotas pagadas sean superiores a los intereses mensuales.
Recibida una reclamación, el banco deberá ofrecer un sistema de pago mixto que cubra los intereses y amortice una cantidad mínima de capital. Si el banco considera que la solicitud no aplica, deberá comunicar las razones y el consumidor podrá recurrir ante el Banco de España, que resolverá en dos meses.
Si no se llega a un acuerdo en tres meses, se aceptará la petición del consumidor. La norma también permite al consumidor elegir entre anular la cláusula de amortización o aplicar las condiciones más favorables.
Esta propuesta busca corregir los cuadros de amortización sin que la entidad pueda reclamar cantidades mensuales devengadas a su favor, si la opción elegida implica pagos menores durante ciertos periodos de amortización.