El Tesoro Público español cerrará las subastas de septiembre con una nueva emisión de obligaciones del Estado, justo después de la reciente decisión del Banco Central Europeo (BCE) de reducir los tipos de interés en 25 puntos básicos, lo que deja la tasa de depósito en el 3,50%.
Este movimiento en la política monetaria ha influido en las subastas del Tesoro, que en los últimos meses había incrementado la remuneración a los inversores debido a las anteriores subidas de tipos. Esto atrajo un mayor interés, especialmente en la compra de letras del Tesoro por parte de los hogares. No obstante, tras el recorte de tipos, la rentabilidad ofrecida ha comenzado a reducirse en las subastas más recientes.
El jueves 19 de septiembre, el Tesoro subastará tres emisiones de Obligaciones del Estado: una con vida residual de 4 años y un mes, con un cupón del 5,15%; otra a 7 años, con un cupón del 3,10%; y una última a 20 años, con un cupón del 3,45%.
Los tipos de interés marginal de referencia para estas emisiones se sitúan en el 3,197% para las obligaciones a 4 años y un mes, 3,420% para las de 7 años y 3,652% para las de 20 años.
De cara a 2024, el Tesoro prevé unas necesidades de financiación de unos 55.000 millones de euros, lo que representa una reducción de 10.000 millones respecto al año anterior. La emisión bruta prevista será de 257.572 millones de euros, un 2% más que en 2023 debido al incremento de las amortizaciones, con un enfoque en la emisión a medio y largo plazo para mantener la vida media de la deuda pública.
El Tesoro también tiene previsto seguir recurriendo a las sindicaciones para determinadas emisiones de obligaciones y continuar diversificando su base inversora. Además, los bonos verdes seguirán siendo una parte clave del programa de financiación, consolidando así el mercado de finanzas sostenibles.