Luis de Guindos, vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), ha insistido este lunes en el VII Foro Banca que el organismo no tiene una ruta fija para bajar los tipos de interés. Según él, el BCE quiere mantener abiertas todas las opciones, decidiendo paso a paso en cada reunión.
“Hemos sido claros, no hay un camino preestablecido para los tipos, y tomaremos decisiones reunión a reunión”, ha afirmado Guindos. También ha subrayado que analizarán los datos de forma global, y no basándose en una cifra puntual.
Por otro lado, comentó que se espera un repunte de la inflación en el último trimestre del año. Sin embargo, pronostica que hacia finales de 2025 la inflación estará cerca del objetivo de estabilidad de precios del BCE, es decir, en torno al 2%.
En cuanto al crecimiento económico en Europa, Guindos ha reconocido que está siendo débil, principalmente por la falta de recuperación del consumo. Atribuyó esto a la desconfianza y la visión pesimista de las familias sobre su situación económica futura. “El nivel de incertidumbre es enorme, lo que hace que las familias sean muy prudentes al consumir, especialmente en bienes”, explicó.
Además, destacó que la inflación ha caído en gran medida por la bajada de los precios energéticos y de bienes, aunque en los servicios sigue siendo elevada debido al aumento de los salarios. A pesar de esto, los márgenes empresariales estarían compensando en parte esta subida.