La Reserva Federal de Estados Unidos tomó la decisión de reducir los tipos de interés el pasado miércoles, con el objetivo de frenar la inflación y acercarse al 2% que tienen marcado como meta. Esta medida puede tener gran repercusión sobre lo que ocurra en el panorama hipotecarios español. Para aclarar el panorama, el economista Gonzalo Bernardos ofreció su análisis sobre cómo podría afectar a las hipotecas en nuestro país.
Bernardos, profesor de economía en la Universidad de Barcelona, comentó en el programa Al Rojo Vivo de La Sexta que la economía está mejorando y que se espera una evolución positiva en los próximos meses. Sin embargo, señaló que los efectos de la bajada de tipos de interés en EE.UU. no se reflejarán en todos los hipotecados por igual.
Impacto en las hipotecas variables
En lo que respecta a las hipotecas a tipo variable, Bernardos fue claro: los titulares de este tipo de préstamos no verán cambios importantes, ya que sus condiciones están ligadas al Euríbor, que se ajusta en función de las decisiones del Banco Central Europeo (BCE). Por tanto, los movimientos en la Reserva Federal estadounidense no afectarán directamente a este grupo de hipotecados.
Efecto en las hipotecas a tipo fijo
Donde sí podría notarse un cambio es en las hipotecas a tipo fijo. Según Bernardos, el abaratamiento de los tipos de interés en EE.UU. podría influir en las entidades bancarias españolas, que encontrarían financiación más barata fuera de Europa. Esto podría reflejarse en una reducción de los tipos de interés que los bancos aplican a las nuevas hipotecas fijas.
El economista prevé que, para finales de año, los tipos de interés fijos en algunas de las mejores hipotecas podrían bajar al 2%. Bernardos destacó que un tipo de interés fijo de alrededor del 2% sería un “chollo” en comparación con los valores del Euríbor que rondaban el 3,38% entre 1999 y 2007, cuando las políticas monetarias eran más estables.
En resumen, mientras que los hipotecados con préstamos a tipo variable no verán cambios inmediatos, aquellos con hipotecas fijas podrían beneficiarse de una disminución en los tipos de interés gracias a la bajada en EE.UU., lo que supondría una oportunidad atractiva para quienes busquen nuevas opciones de financiación.