El Euríbor a 12 meses ha dado un respiro inesperado a miles de familias con hipotecas variables en España. Hoy, el índice de referencia para calcular los intereses de este tipo de préstamos ha descendido hasta el 2,534%, marcando su nivel más bajo en dos años. Este dato tan bajo no se veía desde el 6 de octubre de 2022 y coincide con la reciente decisión del Banco Central Europeo (BCE) de rebajar los tipos de interés al 3,25%, en un intento por suavizar las condiciones monetarias tras un prolongado periodo de endurecimiento.
El descenso supone un cambio de tendencia relevante tras el pico que el Euríbor alcanzó en septiembre de 2024, cuando tocó el 4,224%. La bajada actual podría cerrar noviembre con una tasa media mensual en torno al 2,55%, lo que representaría un alivio notable para los presupuestos familiares. Para ilustrar el impacto: una hipoteca de 150.000 euros a 30 años, con un diferencial de 0,99% sobre el Euríbor, verá una reducción mensual de 125 euros si se revisa anualmente en octubre. Aquellos con revisiones semestrales se beneficiarían de un ahorro de 83 euros al mes, una cifra relevante considerando el aumento que muchos han soportado durante el último año.
A pesar de este respiro para los hipotecados, la oferta hipotecaria de los bancos no cambiará drásticamente a corto plazo, según Simone Colombelli, director del comparador iAhorro. “Los bancos ya han ajustado sus ofertas para lo que queda del año”, afirmó, señalando que el sector financiero ha reaccionado con rapidez a las bajadas de tipos del BCE. Las entidades han comenzado a ofrecer hipotecas fijas y mixtas con condiciones muy atractivas, intentando capturar nuevos clientes.
En iAhorro, por ejemplo, ya se están firmando hipotecas fijas con tipos de interés cercanos al 2% TIN, una cifra que no se veía desde hace más de un año. Además, algunas ofertas de hipotecas mixtas están saliendo al mercado con un tipo fijo inicial por debajo del 1% TIN, algo que ha despertado el interés de muchos compradores. Sin embargo, Colombelli advierte que estas oportunidades podrían ser pasajeras si el entorno económico vuelve a cambiar.
Con la caída del Euríbor y estas condiciones más favorables, el mercado inmobiliario podría experimentar un repunte en la demanda. Las hipotecas fijas y mixtas, que ofrecen estabilidad a largo plazo, parecen estar ganando terreno frente a las variables. Aunque estas últimas dependen directamente de las futuras fluctuaciones del Euríbor, el hecho de que los tipos estén bajando ya genera cierto optimismo.
Este entorno es especialmente relevante para quienes busquen comprar una vivienda o cambiar las condiciones de su hipoteca actual. Las familias con mayor aversión al riesgo podrían optar por las hipotecas fijas para evitar nuevas sorpresas. Mientras tanto, los más optimistas podrían ver esta bajada del Euríbor como una oportunidad para seguir apostando por préstamos variables, confiando en que el índice continúe a la baja.