Las hipotecas a tipo fijo vuelven a brillar como una opción atractiva para los compradores. Así lo confirman las cifras de octubre, donde el 82% de las hipotecas firmadas fueron a tipo fijo, un fenómeno que destaca por la creciente estabilidad que estas ofrecen frente a las fluctuaciones del mercado. El principal motor de este repunte es el descenso sostenido del Euríbor, que en octubre se situó en el 2,691%, su nivel más bajo en los últimos dos años.
El análisis del Centro de Estudios de Trioteca no deja lugar a dudas: las hipotecas fijas están dominando el mercado, y las expectativas son alentadoras. Los expertos apuntan a que la tendencia bajista podría llevar a hipotecas fijas en torno al 2% en los próximos meses. Esta posibilidad genera un ambiente de optimismo, ya que una oferta hipotecaria más accesible podría equilibrar el mercado inmobiliario, impulsando la demanda y manteniendo los precios de las viviendas en una línea ascendente.
Un entorno favorable para la compra de vivienda
El precio medio de las viviendas en España se ha estabilizado alrededor de los 260.000 euros, mientras que el valor nominal medio de las hipotecas contratadas ha alcanzado los 185.000 euros. Estos datos, junto con las condiciones cada vez más atractivas que ofrecen las entidades bancarias, sugieren que la actividad en el sector inmobiliario podría cerrar 2024 con cifras sólidas. Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), se espera que el año termine con un aumento del 4% en el número de hipotecas firmadas, lo que equivaldría a cerca de 400.000 contratos adicionales.
De hecho, el último trimestre del año apunta a un repunte en las firmas hipotecarias, especialmente en el ámbito de la banca digital, donde el crecimiento podría ser del 15%. Sin embargo, existe un desafío estructural importante: los jóvenes españoles están cada vez más excluidos del mercado de la vivienda. La combinación de salarios bajos, trabajos precarios y una capacidad de ahorro limitada ha dejado a una generación entera sin posibilidad de acceder a la compra de una vivienda, lo que se refleja en una “demanda embalsada” de 1,5 millones de hogares, muchos de ellos atrapados en el alquiler o viviendo con sus padres.
La influencia del Euríbor en las hipotecas fijas
El Euríbor, índice de referencia para la mayoría de las hipotecas en España, lleva más de seis meses en descenso, pasando del 3,718% en marzo al 2,7% en octubre. Este descenso ha impulsado a los bancos a reducir los tipos de interés de las hipotecas fijas por debajo del 3%, e incluso al 2,5% para los clientes más solventes. La guerra comercial entre entidades ha beneficiado a los consumidores, quienes ahora pueden optar por condiciones más ventajosas en sus hipotecas.
A lo largo del año, las hipotecas a tipo fijo han pasado de tener intereses del 3,5% en enero a ofrecerse en octubre a un promedio del 2,95%. Si el Banco Central Europeo (BCE) mantiene sus políticas de reducción de tipos y el Euríbor sigue descendiendo, se espera que la banca continúe abaratando estas hipotecas, consolidando así la preferencia por el tipo fijo frente al variable.
Mirando hacia 2025: hipotecas fijas y cambios normativos
Las expectativas a largo plazo son aún más prometedoras. Para 2025, los analistas predicen que las hipotecas fijas podrían situarse entre el 1,5% y el 1,7% TIN para los perfiles más sólidos, impulsando una mayor actividad en el mercado. Además, la legislación podría jugar un papel importante. En base al Real Decreto-ley 19/2022, se espera la eliminación de comisiones por cambiar de hipoteca variable a fija, lo que facilitará las subrogaciones y novaciones sin costes adicionales para los hipotecados. Si esta normativa no se aplicara, los cargos por estos cambios podrían alcanzar hasta el 1% del capital pendiente.
En definitiva, aunque los vientos de la inflación sigan soplando, el mercado hipotecario en España se muestra resiliente y lleno de oportunidades, especialmente para quienes buscan seguridad a largo plazo en un entorno económico incierto.