El Euríbor a 12 meses, el indicador de referencia para la mayoría de las hipotecas variables en España, cerró el mes de noviembre en 2,51%, marcando su nivel más bajo desde septiembre de 2022. Este descenso, aunque moderado, representa un importante alivio para las familias con préstamos hipotecarios referenciados a esta tasa, que experimentarán una reducción notable en sus cuotas mensuales.
En comparación con octubre, cuando el Euríbor se situaba en un 2,691%, el descenso es de 18,3 puntos básicos. Más significativa aún es la diferencia respecto al año anterior: en noviembre de 2022, el indicador se encontraba en un 4,022%, lo que supone una caída de 1,513 puntos porcentuales en doce meses.
Impacto en las hipotecas variables: 132 euros menos al mes
El descenso del Euríbor se traduce directamente en una rebaja para los hipotecados. Según cálculos de Europa Press, un cliente con una hipoteca de 150.000 euros a 30 años, con un diferencial del 0,99% sobre el Euríbor, verá cómo su cuota mensual disminuye en 132,93 euros, lo que equivale a 1.595,16 euros menos al año. Este impacto es más notable al principio del préstamo, cuando la proporción destinada a amortizar el capital es mayor.
Este descenso beneficia especialmente a aquellos que deben revisar próximamente su tipo de interés, un proceso que se realiza anualmente en la mayoría de los contratos de hipotecas variables.
¿Qué esperar en los próximos meses?
Expertos del sector apuntan a nuevas rebajas en el Euríbor a corto plazo. Simone Colombelli, director de Hipotecas de iAhorro, prevé que el indicador podría cerrar el año en torno al 2,30%-2,35%. Si las tendencias actuales continúan, el Euríbor podría situarse por debajo del 2% antes de junio de 2025.
María Matos, directora de Estudios de Fotocasa, señala que la mejora en las condiciones del Euríbor podría reavivar el interés por las hipotecas variables, cuya contratación se había reducido ante las subidas de los últimos años. Sin embargo, advierte que las hipotecas a tipo fijo seguirán siendo las preferidas por su estabilidad.
Por su parte, Miquel Riera, analista de HelpMyCash, apunta que factores externos, como las posibles políticas económicas de Donald Trump o cambios en la estrategia del Banco Central Europeo (BCE), podrían acelerar aún más la caída del Euríbor.
Contexto macroeconómico: inflación al alza
El descenso del Euríbor se produce en un contexto económico marcado por el repunte de la inflación en la eurozona, que en noviembre alcanzó el 2,3% interanual, según Eurostat. Este es el segundo incremento consecutivo, lo que podría complicar las decisiones del BCE respecto a futuras bajadas de tipos de interés. Además, las expectativas inflacionarias entre los ciudadanos de la eurozona, aunque bajas, muestran un leve repunte, según la última encuesta del BCE.
Este panorama podría generar cierta incertidumbre en el comportamiento del Euríbor en los próximos meses, aunque el consenso general entre analistas es que el indicador seguirá su tendencia a la baja en el corto plazo.