Artículos de opinion
El gigante chino del comercio electrónico Temu tiene problemas y esto no es una anécdota, es una señal de advertencia de que la segunda economía más grande del mundo podría estar enfrentándose a un ciclo problemático de sobreproducción. PDD Holdings, la empresa matriz de Temu y Pinduoduo, presentó recientemente unos resultados trimestrales más débiles de lo esperado y una advertencia sobre la feroz competencia que podría afectar sus ganancias futuras.
Las acciones cayeron más de un 30% en u día, borrando de golpe más de 50 mil millones de dólares en valor de mercado de PDD y poniendo fin al breve reinado de su fundador Colin Huang como el hombre más rico de China.
Algunos analistas apuntan que el estancamiento reciente se debe a la crisis inmobiliaria, el envejecimiento de la población y el control más estricto de la política económica por parte del presidente Xi Jinping. Sin embargo, una causa más profunda podría encontrarse en la estrategia de décadas de Beijing de priorizar la producción industrial por encima de todo, lo que ha llevado a una enorme capacidad excedente.
En muchos sectores clave, China está produciendo mucho más de lo que el mercado interno y los mercados extranjeros pueden absorber de manera sostenible y como resultado, la economía china corre el riesgo de quedar atrapada en un ciclo negativo de precios en caída, insolvencias, cierres de fábricas y, en última instancia, pérdida de empleos.
Ante este panorama, muchas empresas han optado por aumentar la producción y bajar los precios para generar el efectivo necesario para pagar sus deudas. Esta dinámica ha desestabilizado el mercado global con una avalancha de exportaciones chinas a precios bajos, lo que ha provocado una respuesta contundente en forma de aranceles. Según han advertido diversos analistas, la situación del mercado interno, la sobreproducción y la competencia feroz en precios podrían llevar a la economía hacia la deflación.
Aunque el sector del comercio electrónico de China pueda sugerir una amplia gama de opciones para los consumidores, en realidad, grandes plataformas como Alibaba, Pinduoduo y Shein compiten ferozmente para vender los mismos productos básicos. Este enfoque centrado en objetivos industriales ha venido acompañado de un aumento de la deuda, están convirtiendo en “empresas zombi” que logran seguir funcionando gracias a un flujo de caja mínimo que les permite cumplir con sus obligaciones crediticias.
A pesar de todo, Beijing sigue inyectando dinero en sus sectores prioritarios. Y aunque se están invirtiendo sumas considerables en inteligencia artificial, los fondos se están destinando a las empresas que pueden expandirse más rápido, en lugar de a las más innovadoras y sin la posibilidad de una verdadera disrupción en el mercado, estas enormes inversiones no hacen más que agravar el problema de exceso de capacidad de China.