Artículos de opinion
Este jueves tenemos reunión del BCE, esa que a comienzos del verano sería la última antes del fin de las subidas de tipos pero que ahora hay dudas de que así sea. Lo único que tienen claro los analistas es que no tienen nada claro lo que hará la institución de Christine Lagarde. En estos momentos el consenso del mercado sólo ofrece un 38% de probabilidades a una nueva subida de tipos de 25 puntos básicos, hasta el 4% aunque hay un 68% de probabilidades a que se produzca una subida adicional de 25 puntos básicos de aquí a fin a año.
Uno de los más duros han sido los de Bank of America, que abogan por la necesidad de que el BCE siga subiendo los tipos esta semana y para ello se basa en cuatro razones por boca de su economista jefe en Europa, Rubén Segura-Cayuela.
- Todavía no hay recesión. Si el BCE se está pensando en pausar las subidas de tipos s precisamente por el daño que está haciendo a la economía de la zona euro que de momento presenta “unas perspectivas de crecimiento más débiles (pero sin recesión)“.
- Sigue habiendo inflación. El monstruo de los Bancos Centrales sigue haciendo de las suyas como si fuese Godzilla aunque es verdad que cada vez con menos fuerza, “una inflación casi (o totalmente) convergente con el objetivo al final del periodo de previsión, pero una inflación más fuerte a corto plazo“.
- Los costes laborales siguen subiendo así como las previsiones de precios, destaca “pequeños repuntes de las expectativas de inflación y de los costes laborales unitarios“.
- Y finalmente, la inflación subyacente, esa que no tiene en cuenta ni los precios de la energía ni la de los alimentos no elaborados que sigue descontrolada “la ausencia de indicios claros de un máximo en la inflación subyacente“.
Lo que parece que tienen claro es en la necesidad de mantener los tipos altos durante algún tiempo, “la tendencia será a hacer más o a hacer una pausa, y desde luego a no recortar“.
Respecto a la posibilidad de hacer una pausa en septiembre para seguir subiendo los tipos en octubre, francamente tiene poco sentido “si los datos no son lo suficientemente sólidos como para justificar una subida, es poco probable que justifiquen una subida más adelante, cuando la actividad seguirá siendo débil y la inflación se habrá debilitado aún más”.
Este jueves tendremos la respuesta y el viernes veremos como se comporta el Euribor ante la decisión del BCE.