Después de un periodo de descensos que alivió a muchos hipotecados, el Euríbor a 12 meses ha iniciado una senda alcista, dejando claro que la era del dinero barato podría estar llegando a su fin. Este giro en el índice de referencia de las hipotecas en España coincide con una reconfiguración de los mercados financieros, impulsada en gran parte por el mayor gasto en defensa de los gobiernos europeos y por la relajación de las reglas fiscales en la UE.
El pasado 7 de marzo, el Euríbor a 12 meses registró su quinto ascenso diario consecutivo, situándose en el 2,481%, su nivel más alto desde finales de enero. Esta subida lo acerca a los tipos oficiales del Banco Central Europeo (BCE), que actualmente se sitúan en el 2,5% para la tasa de depósito y el 2,65% para la principal de financiación. La clave está en que el mercado ya no se fija en las bajadas de tipos recientes del BCE, sino en lo que puede venir: una financiación más cara a medio y largo plazo.
Las razones del repunte: gasto en defensa y menor margen para bajar tipos
El principal factor detrás del alza del Euríbor es el plan de endeudamiento masivo que están preparando los gobiernos europeos para reforzar el gasto en defensa. La Comisión Europea ya ha anunciado una movilización de 800.000 millones de euros, mientras que Alemania ha presentado un plan adicional de 1 billón de euros.
Este aumento del gasto público podría generar un fenómeno conocido como “crowding out”, en el que el sector público absorbe tanta financiación que encarece el acceso al crédito para empresas y familias. Además, si este mayor gasto impulsa el crecimiento económico y la inflación, el BCE tendrá menos margen para bajar los tipos de interés en los próximos meses.
“El aumento del gasto en defensa acelerará el crecimiento y el consumo, lo que limitará la capacidad del BCE para seguir bajando tipos”, explica Diego Barnuevo, analista de Ebury.
Impacto en las hipotecas: revisiones más caras desde el verano
A pesar de que el Euríbor sigue por debajo de los niveles de 2023, su tendencia alcista sugiere que las hipotecas variables podrían empezar a encarecerse a partir de agosto o septiembre. Hasta ahora, las revisiones anuales han resultado en cuotas más bajas, pero si el Euríbor sigue subiendo, los hipotecados comenzarán a notar incrementos en sus pagos mensuales.
Actualmente, la media mensual de febrero se situó en el 2,406%, lo que supone 126 puntos básicos menos que en el mismo mes de 2023. Sin embargo, en los primeros días de marzo, la media ya ha subido al 2,41% y todo indica que seguirá escalando en las próximas semanas.
El efecto del Euríbor no solo afecta a las hipotecas variables. Las hipotecas fijas también pueden encarecerse debido al aumento de los costes de financiación de los bancos. Esto se suma a una situación de precios inmobiliarios al alza: en 2024, el precio de la vivienda en España subió un 8,4%, según el Índice de Precios de Vivienda.
Con este nuevo escenario, las familias que estén pensando en firmar una hipoteca deberán valorar bien las condiciones antes de tomar una decisión. El mercado inmobiliario sigue tensionado y, con un Euríbor en ascenso, el acceso a la vivienda podría volverse aún más complicado en los próximos meses.