Para mí el mayor drama que sufre España y que es común a toda Europa es el escaso porcentaje de población que aporta ingresos al estado respecto al que los recibe. En nuestro país por ejemplo hay casi 2 españoles que están en el grupo de menores, parados, presos, jubilados, incapacitados etc. por cada uno que realiza un trabajo (incluyendo a empleados públicos) del que el estado toma una parte para gastos tan básicos como escolarizar a los niños o pagar las pensiones. Por supuesto el estado también tiene otras formas de ingresar dinero como por ejemplo por el IVA o por los beneficios empresariales pero al final es todo lo mismo: ¿de dónde sale el dinero que se usa para consumir que es lo que genera esos ingresos impositivos? Del porcentaje de la población que tiene una ocupación remunerada. Cierto que ese número ha aumentado últimamente pero los nuevos salarios son tan escuetos que no suponen una gran diferencia en cuanto a ingresos. Y el envejecimiento poblacional y el que el salario medio de nuestros pensionistas supere el de los nuevos contratados tampoco ayuda.
Cuando se habla de soluciones contra esto siempre sale el tema de aumentar impuestos a ricos y empresas. Los impuestos a las personas que más ingresos tienen han ido subiendo desde hace varias décadas que se implantó la progresividad fiscal (se cobra mayor porcentaje al que más gana) y dudo mucho que se pueda castigar mucho más al que ya aporta más de la mitad de su salario. En cuanto a las empresas, el tema es muy complejo: por un lado las Administraciones quieren quedarse con parte de sus beneficios y por otro las miman para que se instalen en un territorio determinado para que contraten personal y aumente la actividad económica, amén de las numerosas subvenciones. Los empresarios y consejos de administración de las grandes compañías lo saben por lo que cuanto más grande es una empresa, mayor posibilidad hay de que busque para radicarse un lugar con los impuestos más bajos dada la competencia fiscal que existe en el mundo (e incluso entre autonomías y municipios españoles que hasta regalan terrenos a quien reduzca el paro). Es por eso, por esa dependencia del sector empresarial para crear empleo y por esa falta de unificación fiscal nacional e internacional, que es tan poco realista subir mucho más la presión impositiva a las empresas.
Pero incluso si se consiguiera hacer con empresas que lo tienen difícil para irse del país porque su clientela está aquí, el Corte Inglés por poner un ejemplo de gran empresa cuyo negocio es casi al 100% nacional, ésta depende de que haya el suficiente número de españoles que tengan poder adquisitivo como para hacer el suficiente gasto como para rentabilizar su estructura y mantener (e incluso crear) empleos luego sus beneficios también proceden de esa minoría de la que hablaba antes. Lo mismo ocurre con los sueldos: si queremos que sean altos debemos aumentar el consumo pero para aumentar el consumo necesitamos sueldos altos…Es por eso que el turismo es tan importante en un país con tan poca población ocupada como España, el consumo de esos más de 60 millones de turistas aporta un gran porcentaje de ingresos –y de empleos- ya que permite a muchas compañías tener más beneficios y por lo tanto pagar más impuestos. Lo mismo pasa con las exportaciones, conseguir que el dinero se lo gasten en otros países provoca que llegue a España un flujo de fondos que no nos correspondería por nuestra población. Así es como empezamos a asomar la cabeza tras lo más duro de la crisis, con el consumo externo. Y así seguimos.
De hecho, si eliminamos eso, el panorama es desolador porque si por cuestiones demográficas vamos a que 2 españoles vivirán a expensas de uno y encima hay que abonar los intereses de las deudas –el capital ya sabemos que es casi imposible- tanto privadas como de las administraciones públicas (es decir, dinero que se trajo de un futuro que ahora es presente) para simplemente seguir como estamos habría que conseguir algo tan utópico como, por poner el ejemplo de la Seguridad Social, que por cada jubilado que cobra mil € se crearan varios nuevos puesto de trabajo de cuyas nóminas pudiéramos extraer esos mil € y aún quedara algo más para sus medicinas y la atención hospitalaria si hiciera falta (más todos los gastos de la seguridad social no relacionados con los ancianos, claro). Y no es algo que ocurra sólo en España, aunque aquí sea más grave por el alto desempleo y por la enorme cantidad de economía sumergida, es que en la vieja Europa sólo les va realmente bien a quienes exportan, a quienes dependen del consumo de otros como Alemania.
Y todo esto enlaza con las economías emergentes que cada vez más estaban ayudando a nuestro sector exterior porque su mejora económica se traducía en más turistas que vienen y en más consumo de productos españoles. Su retroceso acabará afectándonos más allá de lo que pueda influir en el Ibex. Y no estamos solos en esto ya que otros países europeos necesitan que sus exportaciones a China, Rusia,. Brasil etc. no caigan demasiado porque el mercado europeo es, tomando una perspectiva global, demasiado pequeño. Y es que esa es la clave para mantener el llamado “estado del bienestar” o al menos no recortarlo demasiado: el sector exterior. Por eso en España no deberíamos despreciar al turismo, puede nos esté aportando una gran ventaja competitiva respecto a otros miembros de la Eurozona.