El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha asegurado que 2014 será el año del inicio de la recuperación, después de que el 2012 fuera el ejercicio del ajuste económico y de que 2013 haya sido el año de las reformas del Gobierno.
“Hoy puedo decir que 2014 será un año mucho mejor, con más actividad y más crecimiento de la economía”, ha señalado tras el último Consejo de Ministros y después de comenzar su intervención con un reconocimiento “expreso” a todos españoles por su “comprensión, sentido común, coraje y responsabilidad” para afrontar el final de esta etapa “tan dura, larga y difícil”.
El jefe del Ejecutivo ha hecho un repaso del 2013, un ejercicio en el que el país ha conseguido “dejar atrás” la recesión y en el que la economía ha vuelto a crecer en el segundo semestre, aunque sea de forma modesta. “Estamos en condiciones de afirmar que hemos asistido a un claro cambio de la situación”, ha dicho.
Se ha referido a alguno de los logros conseguidos, como el mayor control de las cuentas públicas en todas las administraciones, que resulta “absolutamente imprescindible” aunque no sea una tarea fácil. En este sentido, ha asegurado que el Gobierno no puede relajarse y “echar a perder el enorme trabajo realizado”, aunque los esfuerzos “más duros” ya se hayan hecho.
De la misma forma, ha resaltado medidas como el Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) y el plan de pago a proveedores, dos mecanismos diseñados para ayudar a las comunidades y entidades locales que han movilizado más de 105.000 millones y han evitado la pérdida de 400.000 empleos y la caída de tres puntos en PIB en 2013, además de la quiebra de muchas instituciones públicas.
Por otro lado, ha resaltado el “extraordinario” incremento de la inversión extranjera en España a lo largo del ejercicio y las “históricas” cifras de crecimiento de las exportaciones, con un incremento medio en octubre superior al 6%. Además, ha confiado en que la recuperación de Europa permita mantener la fortaleza del sector exterior en los próximos meses.
Esta corrección de los algunos de los grandes desequilibrios de la economía, según Rajoy, ha permitido una reducción drástica de la prima de riesgo y una mejora de la percepción de España en todos los mercados, como prueba el hecho de que las tres agencias de rating (Moody’s, Fitch y Standard & Poor’s) hayan revisado al alza su perspectiva de España.
En este sentido, ha recordado que hace un año, en una rueda de prensa similar, se le preguntaba por la posibilidad de que España necesitara un rescate, una pregunta que hoy por hoy está “fuera de lugar” después de que el país haya recuperado la credibilidad perdida.
Aunque ha reconocido que estas cifras aún no llegan con “plenitud” a la vida diaria de los españoles, ha asegurado que tienen consecuencias importantes, ya que el hecho de que el IPC suba sólo unas décimas es bueno para todos los españoles, especialmente para los pensionistas, que no han visto mermado su poder adquisitivo.
VALORA LAS REFORMAS PUESTAS EN MARCHA
De la misma forma, ha explicado que la moderación de la prima de riesgo beneficia a todos los ciudadanos porque permite liberar recursos que antes se dedicaban al pago de intereses y poder destinarlos a partidas sociales. En 2013, tal y como ha dicho, la mejora de la prima ha permitido un ahorro de 8.700 millones.
En cualquier caso, el presidente ha dicho que el cambio de tendencia no habría sido posible sin el paquete de medidas y reformas que se ha puesto en marcha a lo largo del año, con una serie de iniciativas que han ido al fondo del problema, a los “cimientos” de la economía.
Pese a que se ha mostrado convencido de que 2014 será un año “mejor”, ha reconocido que no se siente satisfecho del todo porque el objetivo global de la legislatura, crecer y crear empleo, aún está lejos del nivel que se persigue. “No puedo ni mucho menos considerarme satisfecho con la situación”, ha dicho.
ORGULLOSO DEL CAMBIO DE PERCEPCIÓN DEL PAÍS
En concreto, preguntado por la valoración de las medidas concretas, Rajoy ha dicho que se siente orgulloso del cambio de percepción del país que se ha visto tanto fuera como dentro de España, puesto que en el primer Consejo Europeo al que asistió como presidente se encontró una situación muy difícil en la que sólo se hablaba del rescate de España y de todos sus problemas. “Ahora ya no se habla de eso, sino de la recuperación”, ha aseverado.
En concreto, ha dicho que se siente “orgulloso, aunque no satisfecho” porque el Gobierno y toda la sociedad “ha dado una gran batalla” en el tema económico y ha logrado un cambio importante de la percepción del país.
En cambio, ha reconocido que no se sintió “especialmente contento” al subir los impuestos, ni al quitar una paga extra a los funcionarios ni al tomar medidas como la congelación del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), puesto que se trata de decisiones que “no gustan a nadie”.
EL GOBIERNO NO VA A DESFALLECER
“A todos nos gusta gobernar en época de bonanza”, ha dicho Rajoy, tras recordar, sin embargo, que los gobernantes tienen la obligación de dar respuesta a los problemas de un país. En este sentido, ha vuelto a reconocer que queda mucho por hacer y ha resaltado la importancia de contar ya con un camino marcado. “Espero que lo recorramos juntos y con éxito”, ha señalado.
De hecho, ha garantizado que el Ejecutivo perseverará en las reformas porque “queda mucho camino” y el Gobierno no va a “desfallecer” ahora que empieza a recoger los frutos de las reformas. “Al Gobierno no le faltará el ánimo y estoy absolutamente convencido de que a los españoles tampoco”, ha concluido.