Bancos

Hoy hemos conocido que el BBVA prepara una opa hostil sobre el Banco Sabadell, una acción rechazada por el Gobierno ya que según ellos podría introducir “efectos lesivos”. Por otro lado, el presidente de BBVA, Carlos Torres, ha asegurado que la opinión preliminar del Banco Central Europeo (BCE) es “favorable” a la fusión que ha propuesto con Banco Sabadell y que se ha materializado como una oferta pública de adquisición (OPA) hostil.

Así lo ha señalado Torres durante un conferencia telefónica con analistas e inversores celebrada este jueves para explicar la oferta que le han presentado a los accionistas de Banco Sabadell.

En todo caso, Torres ha recordado que todavía no han recibido el visto bueno del BCE y que tienen que seguir el proceso formal, como en cualquier otra operación. Es decir, el BCE no se ha pronunciado oficialmente todavía, porque el banco tiene que presentar la propuesta completa al supervisor, “pero parece que es una opinión favorable”, ha indicado.

De acuerdo con las conversaciones preliminares que ha tenido BBVA con el BCE, no habría “grandes impedimentos” para esta fusión desde un punto de vista prudencial y bancario, según han trasladado fuentes financieras a Europa Press. En todo caso, el BCE tiene que analizar todos los elementos de la propuesta en detalle.

El banco baraja un plazo de entre seis y ochos meses para cerrar la OPA hostil sobre el banco catalán. Además de la aprobación del BCE, necesitan el visto bueno de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), así como el resto de aprobaciones regulatorias por parte de autoridades públicas, como el Ministerio de Economía.

El ministro, Carlos Cuerpo, que ha rechazado la operación por los “efectos lesivos potenciales” que puede tener sobre la estabilidad financiera, los clientes, el empleo y la economía, ya ha advertido de que tiene “la última palabra” sobre la OPA.

Así, aunque el BCE lo juzga desde un punto de vista de prudencia, las cuestiones de competencia y otras consideraciones recaen bajo el análisis de otros organismos. Y en esos análisis el BCE “ni entra ni juzga”, recuerdan fuentes del sector a Europa Press.

Además, la oferta, idéntica a la que el consejo de administración de Sabadell rechazó este pasado lunes, está condicionada a obtener más de un 50,01% del capital del banco y a la aprobación de la ampliación de capital necesaria por parte de la junta de accionistas de BBVA.

BBVA ofrece a los accionistas de Sabadell un canje de un título nuevo por cada 4,83 de Sabadell, la misma oferta que había propuesto la semana pasada al consejo de administración de la entidad catalana y que esta rechazó el pasado lunes. De esta forma, se mantiene la prima del 30% sobre el precio de cierre de ambas entidades del pasado 29 de abril; del 42% sobre las cotizaciones medias ponderadas del último mes; y del 50% sobre las cotizaciones medias ponderadas de los últimos tres meses.

Además, los accionistas de Banco Sabadell tendrán un 16% de participación en la entidad resultante. El precio equivalente de la contraprestación en efectivo es de 2,12 euros por acción de la entidad de origen catalán.

La deuda de los bancos españoles con el Banco Central Europeo (BCE), que refleja la apelación bruta de las entidades al instituto emisor a través de las operaciones regulares de financiación, bajó de los 20.000 millones de euros en marzo, tras reducirse en 3.747 millones de euros frente a febrero, según los datos publicados este viernes por el Banco de España.

En concreto, en marzo se situó en los 18.840 millones que, con respecto a marzo de 2023, la reducción es de 91.951 millones de euros. De esta forma, la deuda de la banca española ha bajado de los 20.000 millones por primera vez desde agosto de 2007, cuando estaba en los 17.998 millones de euros.

Es importante señalar que desde finales de 2022 la banca europea, incluyendo la española, ha tenido que afrontar la devolución de parte de la liquidez que todavía tenía de la que el BCE ofreció en 2020 a unas condiciones más ventajosas dentro del programa de subastas TLTRO-III.

De esta forma, la deuda con el BCE del conjunto del sector de la eurozona se situó en los 366.156 millones de euros tras reducirse en 35.817 millones de euros frente a febrero.

Con respecto a marzo de 2023, la bajada es de 840.104 millones de euros, de tal manera que el nivel de la deuda europea se ha colocado en mínimos desde mayo de 2005, cuando estaba en los 361.864 millones de euros.

Así, la apelación de los bancos residentes en España al instituto emisor representaba en marzo el 5,1% del total del Eurosistema, por debajo del 5,6% de febrero y del 9,18% que se registraba en marzo de 2023.

PROGRAMA DE COMPRA DE ACTIVOS

Por otro lado, el volumen agregado de activos adquiridos en España en el marco de los distintos programas de compra de activos implementados desde 2009 por el BCE sumaba 600.317 millones de euros en marzo, un 0,1% más que en febrero, pero un 3,5% menos que en marzo de 2023.

En el conjunto del Eurosistema, el importe agregado de las compras de activos se situó en el tercer mes de 2024 en un total de 4,62 billones de euros, un 0,6% menos que en marzo y un 6,2% menos con respecto a marzo de 2023.

Por otro lado, ha aumentado un 1,6% en tasa mensual el volumen que la banca española tiene en las facilidades permanentes, hasta los 223.974 millones de euros, donde se puede beneficiar de la subida de tipos aplicada por el Banco Central Europeo (BCE) a los depósitos.

¿Cuál es el mejor banco de España? Para responder a esta pregunta podemos tomar muchas métricas, desde el que tenga más solvencia hasta el que más productos comercialice así que puestos a tomar una vamos a elegir el que tenga a los clientes más satisfechos.

Si nos basamos en ese parámetro, el ganador sería el Banco Mediolanum ya que un estudio de la consultora Stiga lo elige  como la entidad con los clientes más satisfechos de la banca española en 2023 por quinto año consecutivo.

   El estudio Benchmarking de Satisfacción de Clientes del sector financiero lo puntúa con un 8,39 sobre 10 en el ranking de satisfacción global del cliente, que suma varios parámetros.

   El conjunto de la banca española obtuvo una calificación de 7,24 sobre 10, por lo que mejoró respecto al año anterior, cuando obtuvo un 7,17 global.

   El consejero delegado de Banco Mediolanum, Luca Bosisio, ha afirmado que los resultados de la entidad reflejan los principios de su fundador, Ennio Doris: “Situar al cliente y a sus necesidades en el centro como eje de nuestro modelo de asesoramiento financiero personalizado”.

9 CATEGORÍAS

   Mediolanum obtiene su nota más alta en la categoría de gestor de banco (el asesor financiero de Mediolalum es el ‘Family Banker), con un 8,96, frente al 8,3 de media del sector; y la nota más baja, en Sector y Precio, con un 7,5 frente a la media sectorial de 5,79.

   Ocupa el primer puesto en atención del Servicio de Banca Telefónica (8,9, frente a la media sectoral de 7,76) y también (por tercer año consecutivo) en la capacidad de respuesta a incidencias, con un 7,56 frente a la media sectorial del 4,7.

   Entre los 11 aspectos de la encuesta de Stiga, Mediolanum participa en 9 y supera la media del sector en todas: Gestor, Banca telefónica, Internet, Banca móvil, Información al cliente, Incidencias, Oferta y precio, Intangibles de relación (transparencia, confianza, personalización) e Intangibles de marca (solidez, solvencia, modernidad, compromiso social).

Si mañana tienes pensado ir al banco si no es para algo urgente será mejor que lo dejes para otro día ya que los sindicatos han convocado un paro de dos horas mañana lunes, 26 de febrero, para el conjunto de los 152.000 empleados del sector financiero, como medida de presión para pedir una mejora en las condiciones salariales en el mercado de las negociaciones de los convenios colectivos que se están produciendo estas semanas.

El paro de dos horas está convocado por los sindicatos mayoritarios del sector financiero (FINE, UGT y CCOO) y se celebrará de 08.00 a 10.00 horas, retrasando de forma efectiva la hora de entrada a trabajar en esas dos horas.

En concreto, están llamados a secundar este paro los 80.000 empleados que abarca el convenio colectivo de Banca, los 55.000 del de Ahorro y los 17.000 del de Cooperativa de Crédito.

Los sindicatos piden incrementos salariales “acordes con los beneficios del sector y medidas de calado que mejoren un clima laboral cada vez más insostenible”. El 22 de marzo se producirá una huelga de 24 horas en el sector, coincidiendo con las juntas de accionistas de CaixaBank y Banco Santander.

“Exigimos a las cúpulas directivas de un sector que ha batido todos sus récord de beneficios, y que sigue incrementando sus dividendos y los sueldos de sus cúpulas, que revierta esos beneficios en quienes los hacen posible: Con incrementos salariales justos, para recuperar el poder adquisitivo perdido, con medidas que mejoren un insostenible clima laboral, marcado por la presión comercial, las cargas de trabajo y el impacto sobre la salud, y con dotaciones adecuadas de plantilla para poder prestar un servicio de calidad a la clientela”, han pedido los tres sindicatos en un comunicado conjunto.

Los sindicatos piden mejoras salariales de entre el 17% y el 23% para el conjunto de los cuatro años que duren los convenios los convenios colectivos de Banca, Ahorro y Cooperativas de Crédito. Aunque las propuestas de las patronales están lejos de esas revalorizaciones.

La última oferta por parte de la AEB es una subida salarial del 8% en cuatro años, una cifra similar a la ofrecida por las patronales de Crédito (Unacc y Asemecc), aunque en su caso el alza se produciría en tres años. De su lado, CECA decidió elevar al 7,5% su propuesta de subida salarial en su última reunión.

Las próximas reuniones entre patronales y sindicatos se producirán algunas semanas antes de la huelga prevista para el 22 de marzo. En concreto, los representantes de los trabajadores celebrarán su sexta jornada de negociación con la AEB el 29 de febrero; su cuarta jornada con Unacc y Asemecc el 7 de marzo; y la séptima con la CECA el 12 de marzo.

La banca española está mostrando una robustez notable manteniendo expectativas positivas a pesar de los temores iniciales por una posible reducción de los tipos de interés desde el 4,5% establecido desde septiembre pasado. La revisión de estas expectativas por el mercado, posponiendo cualquier cambio por parte del Banco Central Europeo (BCE) hasta el verano, ha llevado a un optimismo renovado entre los analistas, quienes han ajustado al alza las previsiones de ganancias para las principales entidades financieras del país. Tras la temporada de resultados, la proyección de beneficios combinados para este año se ha incrementado en 703 millones de euros, alcanzando los 26.121 millones. Destacan especialmente Banco Santander y BBVA, con incrementos en sus expectativas de ganancias de 249 y 252 millones de euros, respectivamente, seguidos por CaixaBank, Banco Sabadell, Bankinter y Unicaja con mejoras más modestas.

Aunque esta mejora es notable, no se espera que superen los récords de ganancias del último año. Sin embargo, se anticipa que la fase final de aprovechamiento del aumento en los costos de financiación antes de alcanzar el máximo en los márgenes de interés impulse aún más el sector. La situación actual revela una banca de dos velocidades, con Bankinter y Unicaja en camino de marcar nuevos récords de beneficios, contrastando con una visión más conservadora para el resto de los bancos, a pesar de algunas predicciones más optimistas para 2024.

Morningstar subraya que el entorno de altos tipos de interés seguirá favoreciendo a los bancos españoles, apoyados además por un mercado laboral sólido y una inflación en moderación. Sin embargo, se advierte sobre una recuperación más lenta en la demanda de crédito, en un contexto donde el euríbor muestra tendencias alcistas. La banca enfrenta desafíos, pero también oportunidades de crecimiento en rentabilidad, eficiencia, y en el manejo de costos de financiación, en un momento donde su comportamiento bursátil presenta una mezcla de avances y retrocesos, con expectativas de valorización a mediano plazo.