El riesgo divisa, también llamado riesgo de tipo de cambio es el riesgo financiero de la fluctuación del valor de una inversión debido a los cambios que se producen en el mercado divisas, en los cruces. Los efectos de las divisas extranjeras se traducen en beneficios o pérdidas en las inversiones extranjeras debido a los cambios en el valor relativo de los activos denominados en una moneda que no sea la principal con la que la cartera de inversión lleva a cabo sus inversiones.
Si un inversor de España invierte en valores del S&P500, no puede obtener el rendimiento de un inversor estadounidense, ya que el inversor español debe preocuparse por su rendimiento en euros y no en dólares.
Para que entendamos cómo funciona, si invertimos en un activo denominado en dólares, nuestro riesgo será que la relación euro/dólar suba, es decir, que el euro aumente su poder adquisitivo frente al dólar ya que en el momento de la desinversión, el activo en cuestión puede perder parte de su revalorización o incluso manifestar pérdidas por el riesgo de tipo de cambio. En el ejemplo del cruce euro/dólar si por ejemplo está cotizando el cruce a 1,08 quiere decir que la divisa base es el euro y que 1 euro equivale a 1,08 dólares.
Este es un riesgo que al inversor no debería estar ajeno y como todo riesgo hay que decidir si se hace algo o no… La manera más rápida y sencilla para gestionar la posición en dólares, en términos de costes, es acudir al mercado de futuros y a los diferentes contratos para gestionar la cobertura.
Supongamos un inversor tiene 1.600 acciones de Apple que cotizan a 115,62 dólares por acción, lo que supone una inversión total de 185.000 dólares. En el mercado de divisas vemos que el cruce Euro/dólar está en 1,08 dólares, lo que se traduce en euros en 171.296,30 euros. Este inversor teme una apreciación del Euro/Dólar por lo que se dispone a ejercer a cobertura.
Para ello, acude al mercado de futuros y opta por comprar 3 contratos de futuros (ratio cobertura: 171.296,30/62.500 = 2,74) del E-mini EuroFX del CME ya que el activo subyacente es de 62.500 euros, lo que suponen en total una exposición de 187.500 euros (3 contratos x 62.500 euros).
Supongamos que el BCE incrementa por sorpresa los tipos de interés y el cruce euro/dólar se eleva hasta los 1,22 dólares en los siguientes días. ¿Cuál sería el valor de la inversión en Apple? Por un lado, imaginemos que el valor de las acciones no ha variado en los 115,62 dólares, entonces, el valor de la inversión habría caído hasta los 151.639,34 euros, una pérdida del 10,89% o 19.656,96 euros.
Ahora miremos qué ha pasado con la cobertura… Teníamos una posición larga de 187.500 euros y dado que el par ha pasado de 1,08 dólares hasta 1,22 dólares, nos encontraríamos con un beneficio de 26.250 dólares o al tipo de cambio 21.516 euros. En consecuencia, nuestra cobertura nos ha resultado con unos beneficios globales de 1.859 euros (21.516,39-19.656). Estos beneficios se producen porque la ratio de cobertura era de 2,74, y dado que los contratos son estandarizados el inversor tenía que asumir una posición larga de 3 contratos.