Bolsa Blog de bolsa
El Fondo Monetario Internacional (FMI) informó que estudia una solicitud de Argentina para acelerar el desembolso de un programa de préstamos de 50.000 millones de dólares tras el colapso de la confianza de los inversores en el gobierno del presidente Mauricio Macri, que hizo caer el peso más de 7% ayer.
Fue la mayor caída de un día en el peso desde que se permitió que la moneda flotara en diciembre de 2015. La divisa americana cerró con un mínimo histórico de 0.0293 dólares y cayó más de 45,3% contra el dólar este año, lo que provocó intervenciones masivas por parte de los bancos centrales.
La caída del peso ha contribuido a un aumento de la inflación, que en julio alcanzó una tasa a 12 meses del 31,2%. En respuesta, el banco central ha subido los tipos de interés al 45% y ha vendido más de 13.000 millones de dólares en reservas, incluyendo 300 millones de dólares en una subasta el miércoles.
Todo eso, combinado con los recortes presupuestarios prometidos al FMI que frenarán los proyectos de obras públicas, está contribuyendo a una recesión que resultará en una contracción económica del 1 por ciento este año, según el gobierno. Eso podría perjudicar las perspectivas de reelección de Macri en la carrera presidencial del próximo año.
Los nervios se desgastan en la tercera economía de América Latina en su lucha por liberarse de su notorio ciclo de crisis financieras de una vez cada diez años. La última, marcada por el impago de la deuda en 2002, sumió en la pobreza a millones de argentinos de clase media.
El hundimiento del peso impulsó a Argentina a recurrir al FMI para obtener la línea de crédito de 50.000 millones de dólares a principios de este año. Como parte del acuerdo, el gobierno argentino se comprometió a acelerar los planes para reducir el déficit fiscal.
Pero dada la continua depreciación del peso, que hace que las deudas del país denominadas en dólares sean más caras de pagar, los inversores están cada vez más preocupados de que la ayuda del FMI no sea suficiente. Cabe recordar que Argentina tiene 24.900 millones de dólares en pagos de deuda denominada en pesos y en moneda extranjera con vencimiento el próximo año, según datos oficiales.
