Ayer, Elon Musk, el CEO de Tesla anunciaba la quiebra de la compañía en un tweet: «A pesar de los intensos esfuerzos para recaudar dinero, incluyendo una venta masiva de Huevos de Pascua, nos entristece informar que Tesla está completa y totalmente a la quiebra .Tan en quiebra que no lo creerías». Sin embargo, hay que contextualizar este tweet pues se producía en el día de «April Fool» que es el día de los inocentes en Estados Unidos.
Tesla tiene una infinidad de problemas en su estructura de negocio. Por un lado, el déficit significativo en la tasa de producción del vehículo eléctrico Modelo 3 de la compañía. La compañía también enfrenta presiones de liquidez debido a su gran flujo de caja libre negativo y a los vencimientos pendientes de los bonos convertibles (230 millones de dólares en noviembre de 2018 y 920 millones de dólares en marzo de 2019).
Tesla produjo sólo 2.425 modelos 3 durante el cuarto trimestre de 2017; actualmente tiene como objetivo una tasa de producción semanal de 2.500 a finales de marzo y de 5.000 a finales de junio. Esto se compara con las expectativas de producción de la compañía para el año anterior de 5.000 por semana a finales de 2017 y 10.000 a finales de 2018.
En consecuencia, las perspectivas negativas reflejan la probabilidad de que Tesla tenga que realizar una ampliación de capital elevada a corto plazo para reembolsar las obligaciones que vencen y evitar un déficit de liquidez. Las perspectivas para hacer frente a sus necesidades de liquidez (ya sean acciones, bonos convertibles o deuda) se apoyarán si la compañía puede establecer credibilidad para alcanzar los niveles de producción del Modelo 3: 2.500 por semana a finales de marzo y 5.000 por semana a finales de junio.
La liquidez de Tesla consiste principalmente en 3.400 millones de dólares en efectivo y valores según consta en el balance a 31 de diciembre de 2017. Este importe no cubre las siguientes obligaciones de liquidez:
- 500 millones en efectivo mínimo que estimamos que Tesla debe mantener para sus operaciones normales.
- Una quema de efectivo operativo en 2018 que será de aproximadamente 2.000millones si Tesla mantiene un Capex similar al año anterior.
- Vencimientos de deuda convertible de aproximadamente $1,200 millones hasta principios de 2019.
El punto positivo para Tesla es que sigue beneficiándose de la sólida aceptación en el mercado de los Modelos S y X, que colectivamente poseen más de un tercio del mercado de lujo estadounidense. Además, las evaluaciones de terceros del Modelo 3 siguen siendo favorables, la respuesta de los consumidores al vehículo es sólida, y las reservas de compra anticipada siguen siendo altas. Por último, sigue aumentando el apoyo regulatorio a los vehículos eléctricos a batería y a los vehículos de emisiones cero.
En marzo, las acciones de Tesla, cayeron un 22%, su mayor caída mensual en siete años. Después de superar con creces la rentabilidad del S&P 500, Tesla ha bajado un 4% en los últimos 12 meses, en comparación con la ganancia del 12% del S&P.
Marc Fortuño