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Tras la conclusión de un examen de la estructura de las denominaciones de la serie Europa, el Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE) ayer se decidió poner fin de manera permanentemente a la producción del billete de 500 euros y excluirlo de la serie Europa. El argumento que expone el BCE es su preocupación de que los billetes de esta denominación puedan facilitar la comisión de actividades ilícitas, es decir, blanqueo de capitales y financiación del terrorismo. Los billetes de 500 euros, que fueron una propuesta de Alemania para equipararlos a su billete de 1.000 marcos, dejarán de emitirse a finales de 2018, período en que está prevista la introducción de los billetes de 100 euros y de 200 euros de la serie Europa.
Asimismo, considerando el papel internacional del euro y la confianza generalizada de que gozan los billetes en euros, el billete de 500 euros no dejará de ser de curso legal y, en consecuencia, podrá seguir utilizándose como medio de pago y depósito de valor. El Eurosistema, que comprende el BCE y los bancos centrales nacionales de la zona del euro, adoptará medidas para asegurar la disponibilidad de cantidades suficientes del resto de las denominaciones.
Esta noticia no es ninguna sorpresa ya que Mario Draghi, presidente del BCE, en febrero ya dejó caer la idea de frenar el billete de mayor denominación en euros. El billete de 500 euros, al igual que las demás denominaciones de billetes en euros, mantendrá su valor indefinidamente y puede cambiarse en los bancos centrales nacionales del Eurosistema durante un período ilimitado.
Según las estadísticas del BCE, la cantidad de dinero en efectivo en la zona euro se elevó a más de un billón de euros el año pasado, los billetes de 500 euros representan sólo el 3% del número total de billetes en circulación, pero el 28% del valor total.
Sin embargo hay ciertos intereses que el BCE no ha mencionado y probablemente sean la causa real de ponerle coto al billete de 500 euros. Como comentamos en el artículo La guerra contra el efectivo y sus intereses ocultos: «Debido a que es relativamente fácil de acumular dinero en efectivo utilizando billetes de 500 euros, la eliminación de ellos beneficiaría a la autoridad monetaria por lo que es cada vez más difícil evitar la política de tipo de interés negativo (NIRP). En otras palabras, eliminando el billete de 500 euros se dificulta la capacidad de atesorar dinero en un entorno en que que vemos tipos de intereses reales en negativo, bonos nominales en negativo…
El BCE expresa su intención de «actuar contra las actividades ilícitas»… En primer lugar, mencionar que el crimen organizado no es tonto, la mayoría del dinero se blanquea sin dinero en efectivo a través de empresas falsas. Asimismo, los billetes de 500 euros seguirán existiendo, por lo que muy probablemente el billete de 500 euros quedará en manos de aquellos que por cualquier razón quieran atesorar dinero.
En el supuesto de que no pudieran atesorar en el billete de 500 euros tenemos varias alternativas como substitutivos. La primera sería atesorar mediante el siguiente billete de menor denominación, es decir, el billete de 200 euros. La segunda alternativa sería fijarnos en una divisa como el franco suizo que históricamente ha sido una divisa fuerte. El franco suizo tiene una denominación de 1.000 francos suizos que al tipo de cambio actual supondría 909 euros.
