El presidente Donald Trump ofreció comprar bonos soberanos italianos durante una reunión de la Casa Blanca el mes pasado con el primer ministro Giuseppe Conte. Según el periódico italiano Corriere della Sera, Trump ofreció su ayuda para financiar el empréstito público de Italia en 2019, cuando el Tesoro de Roma tiene previsto emitir cerca de 400.000 millones de euros de deuda.
Italia registró una deuda pública equivalente a más del 132% del PIB del país en 2017, pero ha podido mantener bajos los pagos gracias al efecto de reducción de intereses del programa de compra de activos del Banco Central Europeo. Pero ese programa terminará en diciembre y la inestabilidad política en Italia, junto con el compromiso vacilante del país con la Unión Europea, han hecho que el coste de los préstamos italianos suba a niveles no vistos desde 2014.
El pasado viernes, los bonos a 10 años se negociaron con una rentabilidad del 3,105%, habiendo comenzado el año en torno al 2%, lo que demuestra la caída de los precios de sus bonos. La rentabilidad de la deuda a dos años también ha aumentado, hasta el 1,121%, de menos el 0,197% en enero. Los rendimientos en el mercado secundario no tienen un efecto directo en los costes de endeudamiento de Italia, pero influyen significativamente en el precio de las emisiones en el mercado primario.
El informe de noticias agregó que mientras Roma está cada vez más desesperada por reemplazar a los inversionistas privados que huyen de los bonos italianos, no está claro cómo Estados Unidos podría intervenir para garantizar la deuda italiana. La sucursal de la Reserva Federal en Nueva York tiene una oficina de mercados que se encargaba de las iniciativas de compra de bonos del banco central, pero la Reserva Federal opera de forma independiente para el presidente.
Y la gran pregunta es ¿Por qué? ¿Qué razón existe para que la administración estadounidense actuaría como un comprador de bonos italianos garantizando su emisiones?Hay dos motivos plausibles que podemos identificar. Dado el tamaño del Italia, la inestabilidad del país en el mercado de deuda pondría en jaque al país y a todo el euro, por lo que Trump estaría garantizando el proyecto del euro. Y el otro motivo es el control político de una pieza clave del euro que en un futuro podría sembrar la división en el seno de la moneda única.
Marc Fortuño