En honor al medio siglo de la fama cinematográfica celebrada este mes, hemos reunido algunas lecciones importantes de carrera que podemos aprender del agente 007:
1. No te rindas sin luchar
Incluso cuando parecía que se acercaba inevitablemente a la muerte por láser en Goldfinger, Bond se negó a creer que acabaría muriendo. Porque James Bond nunca pierde.
Se trata de seguir el ejemplo de Bond y defender aquello en lo que crees. Lucha por el proyecto en el que te mueres por trabajar o defiende tu punto de vista en una reunión importante, aunque sea impopular. No siempre conseguirás lo que quieres, pero la gente te respetará por mantener tus convicciones.
2. La gente no es siempre lo que parece
James Bond aprendió esta importante lección el difícil día de Operación Trueno—cuando sigue a la afligida viuda del malvado agente francés Jacques Botier, descubre que la viuda es en realidad Botier disfrazado. Una pelea a puñetazos épica sobreviene (impactante), y Bond escapa con la ayuda de una mochila de propulsión a chorro. Pero la lección sigue: no puedes fiarte de nadie por sus apariencias.
¿Tu compañera de cubículo es aparentemente fría? Tantéala ya que podría ser simplemente tímida. ¿Esa compañera al que le encanta «colaborar» y «compartir ideas» contigo? Asegúrate de que no está pasándole tus ideas directamente al jefe. No creas que tus primeras impresiones son siempre correctas, y aprovéchalas para conocer la verdadera naturaleza de tus colegas.
3. Si la vida te da limones, exprímelos
Cuando abandonan a Bond en medio de una laguna infestada de cocodrilos en los remansos de Luisiana en Vive y deja morir, es capaz de escapar corriendo a lomos de un animal para ponerse a salvo. No solo es un vapuleo estupendo, es además maravillosamente simple: convierte el problema en una solución.
La próxima vez que te encuentres un obstáculo, recuerda esto. A veces un problema que parece insuperable, puede ser una oportunidad disfrazada. ¿No conseguiste el ascenso que querías? Tal vez es momento de buscar un nuevo trabajo y encontrar una nueva oportunidad que te realice más. ¿Liado en un enorme proyecto en el trabajo? Es una oportunidad para demostrar a tu jefe tu capacidad de adaptación y cómo aprendes de los errores.
4. Viste siempre impecable, incluso en medio del caos
En Goldeneye, Bond conduce un tanque a través de las calles de San Petersburgo persiguiendo al malvado general ruso Arkady Grigorovich Ourumov y acaba golpeado por la parte trasera por varios coches de policía rusos. Bond mira hacia atrás y para por un momento para—para colocarse la corbata.
La próxima vez que tengas una crisis en el trabajo, canaliza tu calma interior y tu elegancia exterior. Porque, afrontémoslo, tener un aspecto inmejorable deja una impresión memorable. Y seas Bond o trabajes en un cubículo, tener buen aspecto cuando estalla el caos te hará parecer sensato y fresco a todo el mundo que te encuentres en tu camino. (Imagino que conducir un tanque tampoco hace mal a nadie).
¿Qué más lecciones nos puedes dar de James Bond?
Sonreir, o tener una aptitud relajada, siempre ayuda a afrontar las dificultades con mas serenidad.
5. – No olvides acostarte con la chica del momento
Bond nunca pierde una oportunidad para tomarse un buen momento dentro de sus horarios de trabajo. A ti también, no se te pierda una oportunidad de relajarte y ampliar el circulo de tus amig@s, segun tus gustos.
6. – Mata al jefe
Las peliculas de Bond suelen culminar con una explosiva liberacion, cuando el mata al villano, es decir al jefe de toda la operacion y la organizacion que estuvieron al centro de la pelicula. Tu también, no olvides que cuando tu jefe esta abusando de su autoridad y se vuelve un tirano, matalo : simbolicamente, le puedes denegar su poder abusivo; en la calle solo es un ciudadadno de a pie comun como tu, ni mas ni menos. Burlate de el, socava sus aires superiores. El hara la misma cosa contigo en la primera oportunidad. «I don’t want you to talk, Mister Bond. I want you to die».