Cada uno reaccionamos de una forma ante una crítica, pero a la mayoría de los mortales no nos gusta que nos critiquen, nos hace sentir inseguros. Habrá también quien rechace la crítica, negándola: “¿Yo? ¿Qué dices? Yo no hago eso, o no me comporto así, o estás exagerando”, habrá quien se enfade: “Vale, si yo seré así, pero es que tu…,” o “No me puedo creer que me digas eso…”. Normalmente, el nivel de enfado será directamente proporcional a la confianza que tengamos con el que critica. Y habrá unos pocos que desde el primer momento, reflexionarán, lo interiorizarán y pensarán sobre lo que les han dicho decidiendo si hay que cambiar algo o no.
Está claro que cuando te dicen que has hecho algo mal, no suele ser agradable para nadie, pero siempre deberíamos tener en cuenta que no todas las críticas son destructivas, de hecho, muchas, suelen ser constructivas y tenemos que aprender de ellas.
Hay que recapacitar, saber quién te ha hecho la crítica y por qué.
Para mi esto es un poco como los regalos de cumpleaños. En mi último cumpleaños, mezclé a varios grupos de amigos y conocidos. Me hicieron muchos regalos, cosa que me encanta. La mayoría me gustaron mucho, pero algunos de ellos no pegaban nada conmigo. Cuando lo pensé posteriormente, me di cuenta de que si me habían hecho esos regalos era porque la gente me veía así y la conclusión a la que llegué es que si quería que me vieran de otra forma, tal vez yo también tenía que cambiar algo.
Pues con las críticas pasa exactamente lo mismo. Tal vez tú te piensas que lo estás haciendo todo muy bien, pero resulta que no, que las personas que lo ven desde fuera, lo ven de otro modo. Para, reflexiona y piensa.
Tómatelo como una crítica constructiva y saca beneficio de ello:
Escucha atentamente lo que tienen que decirte, deja hablar a la otra persona. No te defiendas ni te enfades antes de saber lo que te van a decir.
Muestra predisposición. Recuerda que la otra persona tiene todo el derecho del mundo a opinar y eso es todo lo que está haciendo, decir lo que piensa. Trata de asegurarte de que lo has entendido, pide más información, aclara o trata de concretar más lo que has escuchado.
Pide sugerencias y déjate aconsejar, ya decidirás posteriormente si lo haces o no. No olvides que la crítica, venga de quien venga, no es más que una imagen de ti mismo vista desde una perspectiva que hasta ahora no conocías. Las sugerencias que obtengas desde ese punto de vista pueden ser de gran utilidad al tomar decisiones o resolver problemas.
Da las gracias. Si quien te ha hecho la crítica la hace de forma constructiva, te está haciendo un favor y si quien la hace es de forma destructiva, se sentirán frustrados y dejarán de hacerlas.
¿Sabes aceptar una crítica?
Ya lo creo que nos sientan mal las críticas… con lo que nos gustan los halagos, lo que nos hinchamos recibiéndolos.
Sin duda que cuando algunas personas nos dan su parecer crítico sobre algo nuestro, lo aceptamos con gratitud. Son las personas que de verdad te quieren y te lo están diciendo porque creen que es mejor de otra forma…
A las demás yo creo que no les hacemos caso… «envidia que nos tienen» ; «que más quisieran ellos»…
Bueno, también hay que considerar que existe un nutrido grupo de gente que cómo afición principal tienen el criticar, nada nunca les parecerá bien, y cómo des con uno de esos sobre todo en el ámbito laboral, sentado en la mesa de al lado, puede resultar sencillamente agotador… doy fe de ello.
hola,a esa clase de personas se les llama vampiros energeticos,ademas de dejarte agotado te cargan con su basura y si te fijas veras que cuanto mas cansado te ven a ti, mas revitalizados se encuentran ellos a costa de tu energia
consejo: NI PUTO CASO A SUS VOMITOS.
Hola, para mi no existen criticas constructivas ya que la persona que te lo dice siempre lo hara con todo el doble sentido, el que verdaderamente quiere que uno mejore no lo dice en forma de critica sino una sugerencia de manera que uno entienda que debe mejorar en x aspecto bien sea personal o laboral.