Australia no se para. Eso está claro. En 2009 comenzó con una campaña de apoyo al turismo en el que Ben Southall ganó el concurso mundial en el que se buscaba a una persona capaz de nadar, explorar, relajarse y escribir un blog desde la isla de Hamilton en la Gran Barrera de Coral de Australia. Los gobernantes de la isla australiana Hamilton ofrecían este trabajo a nivel mundial para quien estuviera dispuesto a pasar 6 meses en sus arrecifes de coral, trabajar 12 horas al mes y luego contar la experiencia por Internet.
El puesto no requería experiencia previa, ni una edad determinada, sólo se valoraba un buen manejo del inglés, mucho dinamismo, ser carismáticos y estar interesados en el mundo de los arrecifes de corales. A cambio se pagaban nada más ni nada menos que 105.000 dólares (unos 90.000 euros), hospedaje en una casa de tres dormitorios y piscina y transporte para moverse dentro de toda la isla. Para poder acceder había que completar un formulario, enviar una fotografía y un vídeo de 60 segundos donde se explicar, en inglés el porqué de su interés en trabajar en la Gran Barrera de Coral.
Australia ha ofrecido este año los “seis mejores empleos del mundo” a jóvenes extranjeros que desearan vivir aventuras, como bloguero en Sídney, cuidador de canguros en el “bush” o fotógrafo en Melbourne.
Los ganadores recibirán 100.000 dólares australianos (unos 78.000 euros) en concepto de seis meses de salario. El concurso iba dirigido a mayores de 18 y menores de 30 años.
Este año se incluían actividades más o menos “clásicas” de guardián de parque natural a lo largo de las playas salvajes del Queensland (este), fotógrafo “lifestyle” (estilo de vida) en Melbourne o cuidador de canguros en el sur. “Nadarán con los leones marinos, verán a los grandes tiburones blancos (…). En la Isla Canguro observarán a los wallabies y a los koalas, se broncearán en una playa virginal con las focas de la Bahía Seal y jugarán con los delfines en aguas cristalinas”, señalaba el anuncio turístico.
Pero además, había 3 ofertas más curiosas:
El empleo de “chief funster” en Sídney, que consiste en sumergirse en el mundo de la noche y de los festivales. El galardonado deberá “trabajar en los pasillos del Festival de Sídney, el Festival Mardi Gras y el Festival Vivid, hasta los espectaculares fuegos artificiales de Año Nuevo en el puerto de Sídney”.
El “taste master”, que deberá recorrer restaurantes, cavas, viñedos y cervecerías de Australia occidental. “Es un trabajo difícil”, señala el anuncio irónicamente, “pero alguien debe hacerlo y bien podría ser usted”.
Finalmente, en el Territorio del Norte, donde viven numerosos aborígenes, el feliz ganador podrá “limitarse” a “recorrer el Outback (el interior salvaje de Australia), conocer a los habitantes locales y vivir aventuras entusiasmantes”.
Todos los premiados deberán realizar textos y fotos con fines promocionales.
Finalmente, se presentaron al concurso 600.000 personas y un español quedó finalista para la modalidad de Wildlife caretaker (Vigilante de la naturaleza), pero finalmente, no ha sido el ganador.
¿Crees que podría organizarse en España algo similar?
Ay! si en España empleáramos nuestra inteligencia para otras cosas que no fuera robar o hablar mal de los demás, qué bien nos iría!….